Universidad de Buenos Aires - Facultad de Psicología
“Indagación sobre la prevalencia del aprendizaje
mediado por instrucciones o mediado por contingencias de reforzamiento en conductas
derivadas”
Estudiantes: Grupo de 6
RESUMEN
El
objetivo principal de esta investigación fue observar si el aprendizaje por
instrucciones tiene prevalencia por sobre el de contingencias de reforzamiento
en las conductas derivadas. De 123 participantes fueron seleccionados 75
sujetos que luego de realizar aleatoriamente por grupos el aprendizaje de
relaciones basales mediante métodos alternativos de reforzamiento primero e
instrucciones después (RI) e inversamente (IR), lograron establecer relaciones
de equivalencia para solicitárseles realizar un test en el que a un grupo se
les indicó que respondieran por lo aprendido mediante instrucciones, a otro
mediante lo aprendido por reforzamiento y otro de acuerdo a su preferencia. Los
resultaros nos permite inferir que el aprendizaje mediado por instrucciones
tiene una prevalencia por sobre el aprendizaje por contingencias de
reforzamiento al momento de aplicar el test. Tanto los participantes de los
grupos RI como los de los grupos IR, respondieron mayoritariamente desde lo
aprendido por instrucciones sin que la preferencia se viera afectada por el
orden en el aprendizaje.
Palabras
clave:
Instrucciones,
Reforzamiento, Conductas derivadas, Preferencia de respuesta, Prevalencia de
aprendizaje
INTRODUCCIÓN
En
una situación de aprendizaje las reglas son comprendidas mucho más rápido si la
descripción de las contingencias está dada por una instrucción debido a que es
más eficaz aprender mediante instrucciones que por contingencias de
reforzamiento o mediante repeticiones de prueba y error (Skinner, 1977). Otros argumentos sostienen (Catania, 1989)
que la conducta puede ser controlada y mantenida mediante reglas, pero que es
modelada por contingencias, que están descritas en la regla, cuando las reglas
se tornan contingentes a las contingencias, es decir, que una regla es
fortalecida de existir una relación que sea evidente entre lo expresado por la
regla y el hacer seguido por las consecuencias advertidas. Varias
investigaciones demuestran que las instrucciones producen en los sujetos
instruidos “insensibilidad” a las manipulaciones de contingencias, afirmando
que esta característica es la que define al control instruccional (Shimoff,
Catania y Matthews, 1981). Otras investigaciones dan cuenta de que con el tiempo
este efecto disminuye (Michael & Bernstein, 1991), las
instrucciones pueden producir un mayor control de las contingencias programadas
que la ausencia de instrucciones (Hayes, Brownstein, Zettle, Rosenfarb, &
Korn, 1986; Joyce & Chase, 1990). La importancia de estos estudios es destacar
de qué manera interaccionan las instrucciones con las contingencias por
reforzamiento y verificar la prevalencia de las primeras por sobre las
segundas, es decir, si el aprendizaje mediante instrucciones prevalecerá por
sobre el aprendizaje por contingencias de reforzamiento cuando se trate de
conductas directamente aprendidas. Sobre este tipo de conductas hemos hallado
muchas investigaciones, pero no fue así respecto de las conductas derivadas y
de la manera en que se ven afectadas por ambos modos de aprendizaje.
Para
las conductas derivadas, aquellas que responden a comportamientos creativos y
espontáneos en situaciones novedosas, resulta relevante conocer si la mayor
eficacia estará dada por el aprendizaje mediante instrucciones o por las
contingencias de reforzamiento durante el aprendizaje.
El
estudio de conductas derivadas es abordado desde el paradigma experimental de
relaciones de equivalencia de estímulos (Sidman, 1971) en el cual, a través de
un procedimiento de emparejamiento con la muestra con una serie de
discriminaciones condicionales arbitrarias entre estímulos no relacionados entre
sí ni por características físicas ni semánticas (relaciones basales), se
entrena a los participantes mediante mensajes de acierto y error para después
de dicho entrenamiento constatar si los individuos logran conectar en
situaciones novedosas las relaciones establecidas implícitamente durante el
entrenamiento. Nos referimos a las relaciones de simetría, transitividad y
equivalencia.
La
relación simétrica es aquella que permite asumir la inversión de una relación
entre dos estímulos, si entrenamos la relación A – B y
establecemos que A = B, entonces podemos también establecer B = A. La relación
transitiva permite establecer la transferencia entre dos estímulos por algún
elemento que poseen en común, si por separado establecemos las relaciones A – B
y B – C, sin explicitarlo mediante entrenamiento es posible establecer la
relación A – C. La relación de equivalencia es una conjunción de las relaciones
de simetría y transitividad que permite
establecer, tomando el ejemplo previo, la relación C – A. Cuando los estímulos
logran ser conectados de acuerdo a estas tres propiedades podemos decir que
fueron incluidos en una clase de equivalencia.
Las
relaciones de equivalencia, simetría y transitividad, de acuerdo a la teoría de
marcos relacionales (Hayes, 1991), serían cada una de ellas maneras diferentes
de relacionar estímulos entre sí y las mismas habrían sido aprendidas por los
individuos mediante aprendizaje por contingencias.
Considerando
los enunciados teóricos expuestos y los resultados de otros estudios de
investigación realizados sobre conductas directamente aprendidas, nuestro
objetivo es indagar en las conductas derivadas, cuál de las dos formas de
aprendizaje ejerce mayor influencia al momento de dar respuestas, el mediado
por instrucciones o el mediado por contingencias de reforzamiento (ensayo y
error). Para ello utilizamos la tarea de emparejamiento con la muestra para
formar dos clases de equivalencias con tres estímulos en individuos, elegidos a
través de contactos de estudiantes que desempeñaron el rol de instructores, a
los que se los dividió aleatoriamente en subgrupos para realizar dos
experimentos diferentes. Luego de ser entrenados por instrucciones y por
contingencias, los integrantes del grupo número uno debieron responder de
acuerdo al requerimiento del instructor y los integrantes del grupo número dos
de acuerdo a su preferencia. Es de esperarse que si una de las dos formas de
aprendizaje predomina sobre la otra que la dominante prevalezca indistintamente
en situaciones de respuesta por preferencia y de respuesta por requerimiento,
es decir, al responder el individuo de acuerdo a su libre elección tanto como
al requerírsele que la respuesta sea dada de acuerdo al modo aprendido.
METODOLOGÍA
MUESTRA
Participaron
de esta investigación un total de 123 individuos de ambos sexos (76 mujeres y
47 hombres). Los participantes fueron seleccionados a través de contactos de
estudiantes de la materia Metodología de la Investigación, cátedra I, comisión
11, de la Facultad de Psicología dependiente de la UBA. La edad de los
participantes osciló entre los 16 y 54 años con un nivel de instrucción que
varió desde secundario incompleto a universitario completo, siendo en su
mayoría con formación universitaria y terciaria. La participación fue
voluntaria y no remunerada, se excluyeron individuos que estuvieran bajo
tratamiento psiquiátrico o que padecieran epilepsia. Se les garantizó la confidencialidad
de los datos obtenidos, el anonimato y los objetivos de la investigación
mediante un consentimiento informado que debieron firmar.
La
participación por experimento resultó del siguiente modo: participaron del
experimento 1 un total de 63 individuos (35 mujeres y 28 hombres) y del
experimento 2 un total de 60 individuos (41 mujeres y 19 hombres).
Los
participantes fueron asignados aleatoriamente a dos grupos experimentales, los
que a su vez fueron reasignados, aleatoriamente también, en cuatro subgrupos para el experimento 1 y
dos subgrupos para el experimento 2. (Cuadro 1)
(Cuadro
1: Conformación de subgrupos experimentales y cantidad de sujetos especificando
sexo)
INSTRUMENTOS
Los
instrumentos utilizados para la investigación fueron computadoras de escritorio
con mouse manual y notebooks de las que se descartó el uso del cursor mediante touchpad (superficie sensible al tacto) y
se les agregó un ratón para facilitar la resolución de la tarea y que no hubiese
diferencias en los resultados debido al distinto esfuerzo motriz y mecánica de
reacción que implica el uso de uno u otro sistema. Se utilizó un programa
diseñado en PYTHON por la cátedra para realizar una tarea de emparejamiento con
la muestra mediante seis estímulos (Tabla 1),
para realizar el entrenamiento y test de aprendizaje de relaciones basales
primero y establecer después dos clases de equivalencias: simetría y
transitividad, dicho programa mide la respuesta de selección y el tiempo de
reacción de cada individuo. Se utilizaron también hojas de instrucciones y
consentimiento informado.
(Tabla
1: Estímulos utilizados en la tarea de emparejamiento
con la muestra en la investigación)
PROCEDIMIENTO
Se
formaron dos grupos principales aleatoriamente para realizar dos experimentos
en los que se a su vez, a cada grupo se los dividió aleatoriamente en 6
subgrupos que se conformaron con la finalidad y el modo en que se detallan a
continuación:
Para
el experimento 1:
a)
Dos subgrupos que durante la etapa de aprendizaje lo hicieran primero por
reforzamiento (R) y luego por instrucciones (I), para luego responder mediante
solicitud del experimentador de acuerdo a lo aprendido por reforzamiento (R) o
por instrucciones (I), quedando así conformados los grupos RII y RIR.
b)
Dos subgrupos que durante la etapa de aprendizaje lo hicieran primero por
instrucciones (I) y luego por reforzamiento (R), para luego responder mediante
solicitud del experimentador de acuerdo a lo aprendido por reforzamiento (R) o
por instrucciones (I), quedando así conformados los grupos IRI y IRR.
Para
el experimento 2:
a)
Un subgrupo que durante la etapa de aprendizaje lo hicieran primero por
reforzamiento (R) y luego por instrucciones (I), para luego responder mediante
su preferencia, quedando así conformado el grupo RI.
b)
Un subgrupo que durante la etapa de aprendizaje lo hicieran primero por
instrucciones (I) y luego por reforzamiento (R), quedando así conformado el
grupo IR.
En
sesiones individuales en las que cada
sujeto se encontraba sentado frente a la pantalla de la PC o Notebook, se le dieron
a cada uno de los participantes las indicaciones comunes al inicio del
experimento, luego se procedió de acuerdo al grupo al que correspondieran.
En
la Fase A del experimento, mediante una tarea de emparejamiento con la muestra,
se realizaba el aprendizaje de relaciones basales, presentándose un estímulo de
muestra en la parte superior de la pantalla, la indicación de cliquear sobre él
para que desapareciera, a continuación aparecían en la parte de abajo dos
estímulos de comparación para que eligiera cuál de los dos empareja con el
estímulo de muestra cliqueando sobre él. Finalizados los ensayos de aprendizaje
se realizaron ensayos de prueba para verificar si las relaciones fueron
aprendidas. Aquellos participantes que integraron los grupos RIR y RRI del
experimento 1 y el grupo RI del experimento 2 comenzaron aprendiendo por ensayo
y error, sin seguir instrucciones, luego se les indicó que continuaran la tarea
con la ayuda de una hoja de instrucciones donde se explicitaba el
emparejamiento. Los participantes que integraron los grupos IRI e IRR del
experimento 1 y el grupo IR del experimento 2 comenzaron siguiendo las
instrucciones de la hoja para luego pasar, en una segunda etapa a establecer el
emparejamiento mediante reforzamiento. Esta etapa constó de un bloque de 32
ensayos de aprendizaje de relaciones basales y 16 ensayos de prueba que
verificaban el aprendizaje de dicha relaciones.
Finalizada
la Fase A de aprendizaje siguió una Fase B de prueba en la que los
participantes debieron en 30 ensayos establecer relaciones de simetría AC y
equivalencia BC y CB. A continuación se realizaron 16 ensayos correspondientes
a verificar las relaciones BACA. Finalmente una etapa de test en la que se
midieron las relaciones de equivalencia mencionadas durante la cual se
aplicaron 10 ensayos de simetría AC, 10 ensayos de equivalencia BC y 10 ensayos
de equivalencia CB.
A
los participantes del Experimento 1 que estaba subdividido en cuatro subgrupos
se les indicó que el test lo respondieran de acuerdo a lo que habían aprendido
por instrucciones o por reforzamiento, de este modo estaban conformados los
grupos IRI, IRR, RII y RIR. A los participantes del Experimento 2, en el caso
de cualquiera de los dos subgrupos, la indicación dada para lña respuesta fue
que lo hicieran de acuerdo a su preferencia. En el Experimento 1 se midió la
cantidad de aciertos en la fase de relaciones de equivalencia, considerando el
método de entrenamiento y la respuesta requerida. En el Experimento 2 se midió
la preferencia en las relaciones de equivalencia, considerando el método de
entrenamiento.
RESULTADOS
Para
incluir los datos de los sujetos participantes en el análisis de ambos
experimentos, se consideró que debían alcanzar un nivel de maestría del 80% en
el aprendizaje de relaciones de equivalencia. Se consideraron establecidas las
relaciones de simetría y equivalencia o las clases de equivalencia si los
individuos daban un 80% de respuestas correctas utilizando un mismo criterio de
respuesta, ya fuera mediante el criterio entrenado por instrucciones o mediante
el criterio entrenado por reforzamiento. Los participantes que no alcanzaron
dicho porcentaje de respuestas según un mismo criterio, fueron excluidos del
análisis.
Para
el Experimento 1, en el que se realiza el análisis de eficacia de entrenamiento
según el modo de respuesta solicitado, de 63 participantes solamente alcanzaron
el 80% de respuestas requeridas 43 de ellos, de los cuales, independientemente
del orden en el entrenamiento y del tipo de respuesta solicitada, 9
respondieron por reforzamiento y 34 por instrucciones, arrojando una diferencia
estadísticamente significativa (χ2=9,223 gl=1
p-valor=0,002).
Analizando
los resultados podemos observar que de los participantes que tuvieron como
consigna responder por reforzamiento, ocho lo hicieron correctamente mientras
que 11 lo hicieron, contrariamente a lo solicitado, por instrucciones. Del
grupo de participantes cuya consigna fue que respondieran por instrucciones, 23
respondieron correctamente y solamente uno lo hizo por reforzamiento
contrariamente a lo solicitado. Podemos interpretar estos resultados como una
prevalencia del aprendizaje mediado por instrucciones por sobre el mediado por
contingencias de reforzamiento cuando los sujetos tuvieron que responder a la
consigna.
Para
el Experimento 2, en el que se realiza el análisis de acuerdo a la preferencia
en la respuesta, de los 60 participantes, solamente 32 alcanzaron el 80% requerido
de respuesta que permitieron considerar que formaron clases de equivalencia
según un único criterio de entrenamiento de relaciones basales, de los cuales
21 de ellos respondieron preferentemente por instrucciones y 11 por
reforzamiento, arrojando una diferencia estadísticamente no significativa (χ2=3,125 gl=1
p-valor=0,077). Tomando en consideración el orden en el que los
participantes aprendieron las relaciones basales y la influencia del mismo en
la preferencia de respuesta, los resultados arrojados en el análisis
estadístico también fueron no significativos (χ2=0,162 gl=1
p-valor=0,687).
Si
consideramos el conjunto de sujetos total que formaron relaciones de
equivalencia según un único criterio, sin discriminar por experimento, se
constató también una prevalencia del método de aprendizaje por instrucciones al
momento de dar una respuesta. De un total de 75 sujetos, 55 respondieron por
instrucciones mientras que 20 lo hicieron por reforzamiento, el valor arrojado
fue estadísticamente significativo en este caso (χ2=16.333 gl=1
p-valor=0,000).
Con
relación al orden de entrenamiento se pudo observar que no influyó sobre la
elección de la respuesta, los resultados arrojados fueron estadísticamente no
significativos (χ2=0,011
gl=1 p-valor=0,916) y tanto en
los grupos que primero comenzaron el aprendizaje por contingencia de
reforzamiento como los que comenzaron por instrucciones, indistintamente en uno
y otro la respuestas fueron mayoritariamente por instrucciones que por
reforzamiento.
DISCUSIÓN
Analizando
los resultados podemos observar que la preferencia, aunque no significativa, es
tendiente a responder por instrucciones. Aunque la significación estadística no
es suficiente para inclinarnos a realizar conclusiones, podemos argumentar en
favor de la prevalencia del método de aprendizaje por instrucciones por sobre
el de contingencias de reforzamiento, que el tamaño de la muestra fue demasiado
pequeña para cobrar significación estadística, pero observamos en la misma que
casi el doble de sujetos se inclinó por la preferencia instruccional.
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