google.com, pub-3034374697620972, DIRECT, f08c47fec0942fa0 UBA Psico Trabajos y Monografías: Trabajo de Campo: "La Casa del Encuentro" - Psicología Institucional - Cátedra I - Prof. Tit. Reg. Virginia H. Schejter - Nota 9
Monografías, exámenes domiciliarios y trabajos prácticos, individuales y grupales, realizados para la cursada de materias de la carrera Psicología en la UBA. Los trabajos fueron subidos al blog sin modificaciones ni correcciones posteriores indicándose la nota correspondiente. Los originales están archivados en la Facultad.

Trabajo de Campo: "La Casa del Encuentro" - Psicología Institucional - Cátedra I - Prof. Tit. Reg. Virginia H. Schejter - Nota 9

UNIVERSIDAD DE BUENOS AIRES

FACULTAD DE PSICOLOGÍA



TRABAJO DE CAMPO

"La Casa del Encuentro"

 Psicología Institucional
 Prof. Tit. Reg. Virginia H. Schejter



Alumnos:

Grupo de 4

Cuatrimestre : 1 º/ 2015




Breve introducción acerca de nuestra institución:

La Casa del Encuentro se fundó el 4 de octubre del año 2003 con el fin de diseñar un proyecto feminista por los derechos humanos de todas las mujeres, niñas, niños y adolescentes. Tiene tres pilares fundamentales, lo político, lo social y lo cultural desde la autonomía de pensamiento, acción y palabra. El propósitos que las moviliza es la construcción de un mundo basado en la igualdad de derechos, oportunidades y trato para mujeres y varones. La misión que guía su trabajo es erradicar toda forma de violencia, abuso y discriminación hacia las mujeres, adolescentes, niñas y niños, desde una perspectiva integral por los derechos humanos de las y los mismos. Para ello se plantean como objetivos desarrollar asistencia, prevención, investigaciones, estudios, programas, proyectos, cursos de capacitación y propuestas de incidencia en políticas públicas  y otras actividades  que tiendan a garantizar la igualdad de derechos, oportunidades y trato para mujeres y varones, y la erradicación de toda forma de violencia sexista. Dentro de sus principales actividades se encuentra el Informe de Femicidios en Argentina (2008-2014). Ante la ausencia de estadísticas oficiales sobre Femicidios en Argentina esta Asociación Civil en el año 2008 produce el primer Informe de Femicidios en Argentina. Además desde 2010 brinda asistencia y orientación psicológica, legal y social en forma gratuita a familiares y víctimas de violencia de género y trata de personas. Como complemento de esto coordinan los grupos, “Si yo puedo, Vos También”, para mujeres en situación de violencia de género y “Construyendo Redes” para familiares y Amigos/as de mujeres en situación de violencia de género.


Supuestos:
-de género como institución social
-de las instituciones que trabajan la temática    
-de la institución seleccionada

 -¿Qué entendemos por género?

Si bien todos nacemos con un cuerpo y una genitalidad que determina nuestro sexo, consideramos que el género es una construcción cultural. En nuestra cultura por muchos años se identificó la genitalidad con el género, reconociendo como válidas dos categorías: Masculino y Femenino estrechamente vinculadas con las biológicas: Macho y Hembra. De este modo, todas aquellas identificaciones que no coincidieran con alguna de estas dos fueron consideradas como desviaciones o anormalidades, tanto desde lo biológico como desde lo psicológico.
Entendemos que el género es aquella identidad más allá del sexual-anatómico con la que la persona se identifica. Lo pensamos como una categoría efecto de lo social que en la actualidad se ha vuelto mucho más amplia e inclusiva que el par de oposición Masculino/Femenino. Frente a esta categoría que se mostraba enmarcada dentro del dualismo mencionado anteriormente, los sujetos debían posicionarse en pos de obtener una manera de nombrar su género. Entonces, cuando pensamos ¿qué es el género? nos separamos de la distinción biológica. Ya que la pensamos como categorizaciones construidas socialmente. Que denuncian la visibilización de identificaciones hasta hace poco tiempo negadas. Gracias a la fuerza instituyente desbordaron la categoría instituida que debió flexibilizarse, tornándose insuficientes así las categorías Masculino/Femenino frente al resto de las identificaciones de género que no cesan de inscribirse. Tales como: Femenino, Masculino, Transgénero, Género, Género Fluido, etc., con diferentes modos de expresión de identidad. Así mismo estas categorizaciones recientes superan no solamente el clásico Masculino/Femenino, sino que también otras categorías que habían sido tomadas como de género pero ya no, como Gays, Lesbianas, Bisexualidad, Asexualidad, etc. que indicarían la orientación sexual del sujeto. Frente al gran esfuerzo de nombrar las distintas maneras de vivir la sexualidad, el cuerpo, la genitalidad, el encuentro con lo hetero, vemos que cada categoría se vuelve insuficiente, que hay algo que nuevamente se le escapa. Cabría preguntarnos ¿por qué la insistencia de encontrar categorías que sean capaces de nombrarlo todo? Tanto la categorización clásica de género polarizada en dos categorías, como el abanico que se abre con las inclusiones más recientes, inscriben un nuevo ordenamiento que parecería no ser suficiente para modificar las relaciones de poder que se produce en torno a las distintas maneras de nombrar los géneros. ¿Será que todo lo que entre en contradicción a la norma fálica, es vivido como amenazador? ¿Será que aquello que no puedo nombrar y por lo tanto conocer, es aquello que debo eliminar o criminalizar?
Cuando nos pusimos a pensar sobre estas cuestiones, lo que se nos presentó fueron los roles que clásicamente se le asignaron a la mujer y aquello que representa lo femenino. Como “sexo débil”, desde los relatos bíblicos, la mujer encarna la representación de lo negativo, débil en cuerpo y en espíritu, capaz de ser tentada ella y culpable de tentar al hombre, merecedora del dolor, impuesto como castigo por pactar con el diablo. Avanzado el siglo XXI parecería que lo femenino no logró expiar aún esa culpa. Lo femenino se castiga principalmente en la mujer, pero también en toda aquella identificación que inscriba en sí misma algo de lo femenino. Lo femenino desde el psicoanálisis también puede ser comprendido como lo hétero, lo diferente, lo que no puede ser nombrado, lo que resulta un enigma, lo que resiste a la simbolización, lo que está más allá del falo. También pensar en lo femenino nos hace pensar en dimensiones políticas que se conjugaron en la sociedad, ya que sabemos que no es lo mismo llevar a cabo una vida desde el mundo femenino que hacerlo desde el mundo masculino. Hoy en día, el femicidio se ha vuelto un tema de agenda, pero esto invisibiliza que durante la historia de la humanidad las mujeres y porque no decir que todo aquello que se corre de la norma macho, ha sido perseguido, explotado, matado, violado y ultrajado.
Cuando decimos norma macho, dimensión fálica, hacemos referencia al discurso hegemónico, al discurso de poder que a través de la historia se ha ocupado de difundir a través de sus instituciones cuales deben ser los imaginarios imperantes. Imaginarios que se hacen carne, que se cristalizan y legitiman que el poder quede circunscrito a algunos pocos.

-¿Cómo suponemos que son las instituciones que trabajan con género?

Suponemos que las instituciones que se dedican a la violencia de género, como ellas mismas lo indican, tienen como objetivo promover la igualdad de oportunidades y condiciones entre los géneros, la erradicación de toda forma de violencia, física, verbal o psicológica, contra la mujer. Estimamos que dentro de sus acciones pueden estar la promoción de leyes que se orienten al tema, el desarrollo de actividades tales como talleres, encuentros periódicos, el asesoramientos legal en áreas de incumbencia y el soporte psicológico que requieran aquellos que acuden a la institución. Para llevarlos a cabo necesitan de fondos que, dependiendo del tipo de institución y el alcance y desarrollo social que tenga, pueden ser obtenidos a través del patrocinio de instituciones internacionales, convenios con organismos gubernamentales, otras instituciones u organismos no gubernamentales dedicados a la misma temática y con los cuales se complementen o articulen su actividad, también con donaciones de empresas y particulares. En cuanto a su composición suponemos que están integradas por personas interesadas por la temática y vocación de servicio hacia la misma, por el voluntariado que generalmente suele ser uno de los pilares fundamentales y por personas contratadas para desempeñar funciones específicas, como pueden ser personal administrativo, profesionales idóneos en la temática, como también personal de maestranza, etc. Consideramos también, que son estructuradas en diferentes áreas específicas con fines de atender los diversos frentes de acción, ya sea tanto en lo que hace a lo administrativo, legal, político, técnico y principalmente, atendiendo a la consigna bajo la cual se agrupan, el área social y el alcance a la población.

- ¿Qué suponemos acerca la Institución elegida: La Casa del Encuentro (CE)?

A partir de la investigación y búsqueda de una institución para el trabajo de campo, llegamos a CE y tras nuestro primer acercamiento desde la página web entendemos que encaran la temática de violencia de género desde la dicotomía Masculino/Femenino, pero con un enfoque centrado en la mujer y donde no se vislumbra, al menos a primera vista, el papel del hombre. Observamos también que como misión proponen “erradicar toda forma de violencia, abuso y discriminación hacia las mujeres, adolescentes, niñas y niños, desde una perspectiva integral por los derechos humanos de las y los mismos” y, entre otros objetivos más generales, su tendencia es la de “garantizar la igualdad de derechos, oportunidades y trato para mujeres y varones, y la erradicación de toda forma de violencia sexista”. La institución parecería contar con una gran trayectoria política, de compromiso y lucha sostenida. Cuenta, además, con espacios de formación para sus integrantes y de atención, derivación y asesoramiento para aquellas personas que lo requieran. Suponemos desde estas impresiones un trabajo responsable y comprometido. Otra observación que realizamos es que la institución está integrada, por lo menos desde lo que en la página de internet indican, únicamente por mujeres. Con “tres pilares fundamentales, lo político, lo social y lo cultural desde la autonomía de pensamiento, acción y palabra” que en las actividades que desarrollan parecerían dar cuenta de ello.

Motivos de la elección de la Institución

Todos los integrantes del grupo propusimos  posibles lugares y temáticas de Género en donde nos gustaría enfocarnos y realizar algún contacto. Inicialmente habíamos decidido enfocarnos en entrevistar una organización que se dedicara a temas de género desde la diversidad sexual y la identidad de género, para esto intentamos contactar diferentes instituciones (Nexo, CHA, ATTTA, FALGBT, LGBTIQ, etc), muchas de ellas nunca atendieron el teléfono ni brindaron respuesta a los mails enviados, alguna nos respondió telefónicamente indicándonos enviar un mail que luego jamás contestaron, otra nos atendió cordialmente durante la primera comunicación telefónica, solicitándonos que volviéramos a llamar durante la semana siguiente que estaría la presidenta de la institución, cosa que hicimos en dos oportunidades distintas, pero al presentarnos automáticamente se cortó la comunicación y no volvieron a contestar el teléfono, por lo que decidimos enviar un mail que jamás fue respondido. Cabe destacar que en cada presentación lo hicimos presentándonos como estudiantes de la carrera de Psicología de la UBA, dando nuestros nombres y en los contactos vía mail, incluso indicando DNI y teléfono de contacto. Entendimos y supusimos que en el inicio de un año electoral, posiblemente la agenda de estas instituciones pudiera estar colmada, pero nos resultó llamativo que organizaciones que luchan por reivindicar el derecho a la identidad de género y la no exclusión, como respuesta a nuestro interés se manifestaron con una no respuesta.
Una de las integrantes se había abocado ya a instituciones que trabajan la temática de violencia de género y tras investigar por Internet, llegó a la página web de La ONG  “Casa del Encuentro”, luego de proponerlo al grupo como una alternativa al tema que inicialmente nos interesó y ante la falta de respuesta mencionada por parte de las otras instituciones, decidimos cambiar la temática, fue así como  por cuestiones de cercanía y accesibilidad, se acercó personalmente hasta su sede en Rivadavia y Medrano. Se presentó como alumna de la Facultad de Psicología, hizo referencia al trabajo en grupo, en el marco de la materia Psicología Institucional y fue muy bien recibida. Luego de explicar los pormenores del trabajo, recibió una respuesta positiva y le solicitaron realicemos un detalle vía email para así concretar las entrevistas. Además de ellas, se les explicó que dentro de los requisitos también nos interesaba la posibilidad de llevar adelante una observación de alguna de las actividades desarrolladas en la institución, nos explicaron que por cuestiones de privacidad esto no sería posible.

INTRODUCCIÓN:

Tomando el concepto de Imaginario social de Castoriadis, pensamos que la sociedad es parte inherente de nuestra subjetividad y que nuestra identidad está anclada en las prácticas que se llevan a cabo, dentro del  entramado social que nos preexiste. Por lo tanto comprendemos que ninguna visión y comprensión de los hechos es ingenua, ella está acompañada de los avatares históricos, sociales y políticos que acompañan al observador, en tanto sujeto social. Por eso pensamos a la neutralidad como un ideal empírico, un imposible que si es negado se transforma en obstáculo. Frente a ello nos planteamos la necesidad de tomar nuestros instituidos y ponerlos al servicio de nuestro trabajo.  Por lo tanto, el objetivo que nos planteamos durante los primeros días de trabajo en equipo, fue animarnos a mirar desde dónde pensamos, observamos y comprendemos. Es decir, qué instituciones nos atraviesan y se hacen presente en cada uno nosotros. Por eso nos propusimos analizar nuestra propia implicación, para poder visibilizar qué imaginarios nos atraviesan. No es una tarea fácil, ya que implica poner en cuestión aquello que comanda nuestras prácticas y nos permiten movernos dentro de límites seguros. Nuestra propuesta es hacer el trabajo de campo en La casa del encuentro, una institución abocada a la problemática de violencia de género.
Uno de nuestros objetivos finales será comprender cómo ven los miembros de la institución, cómo interpretan sus prácticas. Los imaginarios, representaciones sociales que sustentan lo que hacen, lo que dicen y cómo se organizan. La propuesta es descubrir qué imaginarios sostienen eso que hacen. Virginia Schejter nos dice, la intervención institucional es un trabajo de investigación que indaga la manera de pensar (lo instituido en los actores institucionales) y a su vez indaga los propios (los pone en cuestión) a partir de este doble trabajo se produce un diálogo, un entramado en el que indagando lo instituido en ellos descubro los propios. Por eso a continuación partimos de nuestro meta-análisis.

ENTREVISTAS

-Primer Entrevista: Dra. Alejandra Lauría.

Preentrevista:
Realizamos la primera entrevista a una de las voluntarias que se desempeña en la institución, la Dra. Alejandra Lauría, abogada, quien nos recibió cordialmente, coincidentemente con uno de los días en que entrevistaban voluntarias, esto produjo una confusión que inmediatamente se resolvió y se retomó la entrevista con el mismo interés y cordialidad del comienzo.

Entrevistadora:-Queríamos que nos comentes un poco de la casa, de sus orígenes, de su historia, y a partir de ahí ver que va saliendo y que nos podes compartir.
Lauría:-Bueno, mi nombre es Alejandra Lauría, yo soy una de las coordinadoras del área legal de la casa del encuentro. La casa se inició en el 2003, 2004, no me acuerdo bien la fecha.  El 5 de octubre, eso sí me acuerdo, empezó como un proyecto de mujeres que trabajaban más que nada con la temática del feminismo. Con el paso del tiempo y al ver cómo venía el tema de la violencia hacia las mujeres fueron incursionando en la temática. En el año 2008 se creó lo que es el Observatorio de femicidio “Adriana Marisol Sambrano”. Hoy por hoy la casa cuenta con: el observatorio, el centro de asistencia y grupos de autoayuda a mujeres que fueron víctimas de violencia y grupos de familiares que tiene que ver con una asistencia a apoyo y fortalecimiento a los familiares de la mujer víctima de violencia, que muchas veces no se reconoce como víctima, o si bien se reconoce, vuelve se separa, vuelve se separa y esta situación de decaimiento genera una… cierta frustración, intolerancia por parte de la familia que lo que hace es facilitarle el objetivo al violento que es separarla de la familia. Entonces lo que trabajamos es más que nada con el fortalecimiento para poder acompañarla a la mujer hasta tanto pueda salir de la violencia. La casa tiene más que nada quizás una prioridad a lo que es hoy por hoy el centro de la asistencia y lo que es la atención a las mujeres víctimas de violencia, de género en general y de violencia dentro de la pareja en particular, que son los casos que más consultan porque quizás la publicidad que hoy tiene la casa del encuentro, lo que sale en los medios y en muchos lugares es esa, sobre todo porque a partir de convenios internacionales la “CEDAW” y la convención de “Belem do Pará” Argentina se comprometió internacionalmente a luchar activamente contra la violencia, entonces se crearon: Las oficinas.. La oficina de violencia doméstica de la corte suprema que tiene ámbito en capital federal y las comisarías de la mujer en la provincia de Buenos Aires y hay comisarías similares a los que son las comisarías de la mujer y oficinas de violencia en el interior del país,  muy diseminado y con pocos recursos…Principalmente la casa lo que hace es eso, todos los años publica el informe de femicidios, que el año pasado fueron 277 mujeres. Yo también pertenezco al observatorio, publicamos un libro que se llama “Por ellas” que se lo pueden bajar de forma gratuita de la página
E:-Si, nosotras echamos un vistazo y vimos varias cosas de la página…
L:-Ahí está el libro que... Como fue distribución gratuita y somos una ONG y no tenemos muchos recursos la impresión y la edición fue bastante corta y se ofrece más que nada bajarlo porque ya no hay más impresos. Próximamente vamos a sacar… ese libro tuvo los informes 2008, 2009 y 2010, este próximo libro que estamos trabajando va a tener 2011, 12 y 13…
E:-Con respecto a este libro, ¿Cómo surgió la idea de hacerlo? ¿Quiénes participaron?
L:-El libro fue una conmemoración a los cinco años del informe de femicidio, quisimos hacerlo todo en un solo libro pero nos dimos cuenta que era muchísima información. Si bien el primer libro tuvo una información,  la parte que es técnica es más básica, porque es para que cualquiera  pueda acceder al conocimiento de lo que es la violencia de género y tiene la segunda parte que tiene los informes en sí que son el esqueleto del libro. El observatorio está compuesto por varias compañeras. Ada Rico es la directora del observatorio, es el corazón del observatorio… Hacer el informe no solo es desgastante desde el tiempo sino desde lo emocional. Nosotras contamos mujeres que son asesinadas, no es que contamos mujeres que salieron en libertad… Eso implica saber, quién era la mujer, que edad tenia, cuántos hijos tenía, como era la situación en la que estaba de que forma la mataron, como la encontraron, estos informes se hacen a partir de la publicación en los medios comunicación. Como somos una ONG no tenemos acceso a los expedientes (los expedientes son privados), lo tenemos a partir de las publicaciones en los medios de comunicación. Generalmente para que un hecho de estas características sea noticia es porque tiene que haber algo de perversión o algún morbo que lo hace resonante…Entonces, todo eso hay que analizarlo, hay que seguir el caso, en un medio, en otro medio. Entre todos sacar la conclusión de cómo fue ese caso, porque no tenemos la certeza... los medios te dicen una cosa... se tiran a decir en primer momento una cosa, después dicen otra y cualquiera tira cualquier cosa. Eso es lo que es quizás desgastante desde lo emocional y... quema bastante la cabeza y llegan momentos donde decís: ¡Bueno, basta, me tomo un día! En el informe que es el que principalmente lleva Ada, porque en el observatorio hacemos un informe más global. Sí con el informe en sí que lo desmenuzamos, lo analizamos, nosotras las abogadas por ejemplo seguimos lo que son los expedientes, si hubo una condena, si no la hubo, cómo se calificó el hecho. En el año 2012 se sancionó la ley de femicidio, que no se está aplicando, no están aplicando la figura del femicidio. La ley de femicidio lo que hizo fue modificar varios incisos, amplió el 1ro y creo los incisos 11 y 12. El inciso primero lo amplió, antes era agravado el homicidio cuando eran ascendentes, descendientes y cónyuge, ahora lo amplió a cónyuge, ex cónyuges, novio, ex novios, parejas y todas las similitudes.
E:-O sea, si no tenían una relación familiar directa no se aplicaba.
L:-Claro, si no tenía relación directa o legal no estaba dentro del agravante, ahora sí. El inciso 11 crea la figura del femicidio como tipo penal que implica que un hombre mate a una mujer por su condición de mujer, y el inciso 12 es, lo que La Casa del Encuentro definió y después circuló por todos lados, el femicidio vinculado. El femicidio vinculado es aquel donde no matan a una mujer, sino que matan o a un hijo, o a una hija, o a un familiar, alguien para destruirla emocionalmente a la mujer "No te mato a vos, te voy a dejar viva, pero voy a matar a tu hijo, aunque sea mi hijo" que ahora les explico también por qué es eso "para que vos sufras toda tu vida", que eso es peor, quizás, que te maten.
E:-Casi como matarle el hijo a una mujer, a una madre, es matarla en vida...
L:-Claro. Exactamente.
E:-Sí, un caso hace muy poco en Entre Ríos, si no fue la semana pasada fue la otra, yo soy de ahí por eso esto también me toca y me suena, de un papá que salió a la ruta con los chicos, llamó a la mamá y le dijo...
L:-No los vas a ver más me los llevo, sí, sí, salió en todos los medios. Bueno, eso es un femicidio vinculado. El otro nene estaba grave, no sé si falleció.
E:-Por el momento por lo que sé no.
L:-Y él había sobrevivido, sólo se fracturó la cadera.
E:-Sí, sí, sí, él no se hizo absolutamente nada.
L:-Por suerte, para que pueda ir preso.
E:-Sí, sí, porque una vez que terminaba con los hijos, seguro va a seguir con ella.
L:-¡O no! Porque lo que intentan es destruirla por completo a la mujer. porque... a ver, cuando matan a un hijo de la mujer que no es propio, no quiero decir que lo justifican, pero es como que se entiende un poco más... pero muchas veces pasa que matan al propio hijo, que vos decís pero... (Se produce un momento en el que cruzan contradicciones entre lo que se razona y lo que se siente) que vos decís... pero... por qué, qué... ¡Ah! Bueno, viene de la psicología, pero, tiene que ver, ustedes lo sabrán, con que la mujer no puede creer, pero, ¡es su propio hijo! Sí, por eso mismo, "porque es mi propio hijo lo destruyó" para que se genere el doble de dolor. "Porque vos no vas a poder entender que maté a tu hijo y también maté a mi hijo, o hija" (con énfasis en "mi hijo, o hija"). Ese es uno de los tipos de femicidio vinculado. Otro femicidio vinculado es aquella persona que se mete para defender a esa mujer y lo mata. Una pelea callejera donde están una pareja, el hombre golpeando a una mujer, se mete un hombre, una mujer, un policía, cualquiera y está en la línea de fuego y lo mata. Ese es el otro tipo de femicidio vinculado. Y no sé qué más...
E:-Nos estabas comentando de la ley, de los dos incisos, el 11 y 12, el uno que se había modificado a partir de...
L:-De la sanción de la ley de femicidio... La figura del inciso 11 en si no se está aplicando, porque no la consideran, porque lo que establece el código procesal vigente es que hay que tomar a medida... en una cuestión gradual, o numérica. Primero ver si entra en el inciso 1, después ver si entra en el inciso 2, después ver si entra... así hasta que llegamos hasta el 11, pero se cansan y no llegan al 11, entonces no toman la figura del femicidio en sí. Mediáticamente en el caso de Ángeles Rawson sí está, ¡pero ojo! la querella lo calificó como femicidio. También es una figura típica nueva la cual se aplica mal, porque ahí, por más que lo aplican, lo aplican mal porque aplican femicidio agravado y el femicidio no puede ser agravado porque ya es una figura agravada, pero bueno, la fiscalía lo toma como un homicidio con el concurso, con el abuso y el agravante del abuso pero no como un femicidio. Porque lo que implica el femicidio es: cosificar a la mujer, utilizarla para algún provecho, algún abuso o lo que vaya a hacer; cosificarla y matarla en base a su condición de mujer... Esta superioridad histórica que hay de hombre sobre mujeres que si ponemos en ese lugar de víctima a un hombre quizás no le pasaría el hecho... Entonces, ese análisis, como jueces, juezas, fiscales no están preparados y  no  toman el trabajo analizarlo, pensarlo y estudiarlo no lo aplican. A partir del próximo libro lo que vamos a hacer es esta critica la ley está aplíquenla porque si la pena es la misma va a tener una pena de prisión perpetua, pero desde lo social y el mensaje, uno de los fines de la pena es dar un mensaje a la sociedad en base a cuestión de castigo mira si haces esto te corresponde tal pena, el mensaje que se da no es el correcto. La lucha contra la violencia se combate desde distintos lados, uno de los lados es: que la justicia el estado a través del poder judicial que es quien imparte justicia, aplique el agravante para que no se siga replicando.
E:-Que le dé lugar y visibilice eso también…
L:-Exactamente. Pero bueno se están quedando en era pareja ex pareja entonces lo metemos en el agravante uno, no lo seguimos para saber si era alevosía, porque los agravantes se pueden sumar pero la mayoría y sobre todo en las condenas no se están aplicando.
E:-¿Habría una opinión tuya o desde la casa del encuentro de por qué no se avanza en eso, es una cuestión de tiempos legales? ¿Hay alguna cuestión que ustedes hayan podido hablar? Vos decías que lo iban a poner como crítica en el libro…
L:-Principalmente por desconocimiento, muchos sectores del poder judicial lo toman como que esto de la violencia es una moda, porque a las mujeres siempre les pegaron pero ahora se quejan. Es una ironía pero esas cosas las comentan, entonces es una moda. Parte de la doctrina y la jurisprudencia que sigue Zaffaroni considera que el femicidio es un delito de autor. El delito de autor está cuestionado porque lo considera como vos porque sos rubia y tenés ojos claros, sos proclive a robarte barquitos, vos que sos morocha, sos proclive a abusar de niños, entonces es como que el delito de autor está mal visto por ser pensado de esa forma. Como en el femicidio el bien jurídico que protege es la vida de la mujer, no la vida dela persona, la vida de la mujer y quién puede cometer el femicidio es un hombre. Una mujer no puede cometer femicidio desde lo que está concebido como femicidio estructural y socialmente. Entonces dice que es un delito de autor, entonces no la aplican, porque sigue la corriente Zaffaronista no la aplican. Principalmente lo que considero yo y el equipo de abogadas es eso. Es que hay un desconocimiento, muchas veces lo que pasa en los juzgados es que hay violencia institucional, no se personifican los expedientes si no que son números y estadísticas a llevar y entonces bueno si la familia quiere prisión perpetua le damos prisión perpetua no importa porque inciso, pero sí importa porque inciso porque no importa que la pena sea la misma tiene que ver con el mensaje que se manda. Bueno eso en particular.
E:-Vos nos comentabas de todos esos talleres y las cosas que van haciendo… Me gustaría saber cómo llega alguien acá. ¿Qué relación tienen con los medios?
(Interrupción de la entrevista: entra una persona, le pide si puede salir porque necesitan hacer una consulta). Después de 10 minutos.
L:-¿Cuál era la pregunta? a mí se me acaba el cerebro rápido (se ríe)
E:-Vos recalcaste muchas veces que son una ONG y nosotras vimos que en la página, se definen como un proyecto feminista y popular ¿qué implicaría eso?
L:-Nosotras consideramos lo que se llama feminismo popular, qué implica el feminismo en primer lugar. Implica conseguir una igualdad de derechos frente a lo que son los hombres, que las mujeres tengan una igualdad en asimetría a los hombres ni más ni menos. Hoy por hoy históricamente se ubicó a la mujer en un lugar  de inferioridad  física, emocional, de pensamiento, de creencia e intelectual respecto del hombre. A diferencia de otras ramas del feminismo, el feminismo popular nosotras consideramos que es un concepto creado recientemente. Tiene que ver con que este cambio cultural necesario para poder llegar a la igualdad de derechos lo tenemos que hacer entre todas y todos. Es un trabajo que hay que hacer con la sociedad en su conjunto entre todas y todos para poder llegar a la igualdad. Hay muchos hombres que son violentos, pero no todos los son, porque si todos fueran violentos estaríamos todas muertas. Entonces esos hombres que no son violentos ver de qué forma podemos trabajar en forma conjunta, hombres y mujeres para lograr contrarrestar lo que es la violencia sexista, machista. Principalmente el feminismo popular tiene que ver con eso, con un cambio de estructura social, con un cambio de mentalidad, de educación distinta. No asignarles a las nenas lo juegos para barrer, para cocinar, para lavar, la ropa que tiene Barbie, y a los varones pelota, herramientas. Entender Todos y todas somos  iguales, todos y todas tenemos que tener los mismos derechos. No por ser mujer estamos en una situación inferioridad,  y  no por  ser mujer nos tienen que matar, violar o  golpear amenazar y hostigar, ni nada.
E:-¿Ese sería el objetivo principal?
L:-Claro, La utopía. Si, a Lo que apuntamos y el feminismo popular tiene que ver con que entre todas y todos tenemos que lograr el cambio necesario para terminar con la violencia.
E:-Comprometer de alguna forma a la sociedad porque esto no una cosa de “las mujeres”, es un problema social, creo que por ahí viene ¿no? Yendo a eso nosotros hemos visto a lo largo de estas dos semanas, tres, que empezamos a averiguar acerca de la casa del encuentro a partir de contactarnos con ustedes, a partir de la página, de algunas cuestiones... yo te contaba que vi lo del libro. ¿Cómo se comunican ustedes con la sociedad, cómo es este trabajo, cómo es la Línea de comunicación, entendemos que la página web es una de ellas, cuáles son otras líneas de comunicación?
L:-la casa del encuentro tomo publicidad a partir de los informes de femicidio. Hoy por hoy está reconocida la casa del encuentro en forma de Nacional y en forma e internacional. Hoy vino una chica de Francia, por ejemplo vos decís Francia, bueno Francia. Entonces hoy por hoy ya no somos Nosotras las que buscamos los medios sino que los medios nos buscan a nosotros a partir de las entrevistas, y eso. Los medios de comunicación que tenemos son; la pagina web, hay un Blog teléfono, mail, que más que nada... Igual nosotras queremos, por ejemplo: La atención con las mujeres es presencial.  Salvo que sea una mujer del interior Nosotras (como somos una ONG no tenemos problemas de jurisdicción).  Por ejemplo una oficina estatal de Capital no puede trabajar en Lomas de Zamora, bueno nosotras como somos una ONG podemos trabajar en todos lados. La casa no hace patrocinio jurídico, ni da tratamiento psicológico. Las derivaciones las hacemos a Organismos Públicos, tenemos una serie de encuentros, cuando esos encuentros se culminan porque lo que, tratamos de hacer es la atención a la mujer en la urgencia, en la emergencia. Igual inmediatamente cuando la mujer viene, lo que hacemos es una derivación a un… si tiene obra social o no, a un lugar para que haga tratamiento psicológico. y paralelamente vamos siguiendo, las psicólogas lo que es la terapia pero con perspectiva de género. Las derivaciones que hacemos intentamos que sea   a lugares  perspectiva de género que es muy difícil conseguir. Pero que entiendan la violencia de la misma forma que la entendemos nosotras, no es que vaya a un lugar que le diga “no mi marido me pegó” y “pero vos que le hiciste”.
E:-Acá no entendí lo que dice mariana: acompañamiento que tienen acá en relación a su terapia.
L:-Claro y que va a hacer es generarle culpa a la mujer en vez de decir no él me pega porque es un violento él y tiene una concepción machista de lo que soy yo. No yo porque no hice nada y aunque lo hubiera hecho, tampoco se justifica me pegue. Las abogadas hacemos una derivación a los patrocinios jurídicos gratuitos, que en capital federal hay y hasta ahí nomás. En provincia es un poco más difícil conseguir, en el interior ni hablar. Y lo que hacen las mujeres cuando vienen, generalmente vienen con una cita previa, llaman por teléfono mail o lo que sea, y hacemos tenemos una cita que es interdisciplinaria donde hay una trabajadora social, una psicóloga y una abogada, que escuchamos en forma conjunta y desde cada área. En principio por única vez, antes primero la atendía una psicóloga después la atendía una abogada pero lo que lográbamos era que esta mujer se re victimice porque le acababa de contar todo a la psicóloga y llegaba la abogada y le tenía que contar todo a la abogada. Pero había una abogada por semana, ahora tenemos mínimo una abogada por mes, ¡por día!… por mes en cualquier momento (ríe) yo voy a renunciar. Bueno, entonces la mujer viene y tenemos un encuentro acá a partir de ahí se van sucediendo los encuentros y la vamos acompañando. Lo que intentamos  es que esa mujer se fortalezca, se apodere, para poder primero salir de la situación y después afrontar  si hay una causa judicial, lo que viene, todo el mecanismos, el desgaste emocional que implica, ni hablar de los costos económicos. Si esa mujer en esos encuentros logró al menos mejorarse un poco, le interesa, puede ir al grupo de autoayuda, que funciona los Viernes de 17 a 19 hs.,  que  insisto somos una ONG y no podemos atender a todas a  largo plazo. No nos da el cuerpo, en todo, en personal, en estructura, en insumos. Si quiere lo que puede hacer es seguir concurriendo a lo que es el grupo de autoayuda, el grupo de familiares funciona los miércoles de 17 a 18:30 hs.
E:-¿Quién se encarga de la dirección de ese grupo?
L:-En las dos es el equipo de coordinación de Psicología, son dos Psicólogas que están a cargo del grupo, después hay compañeras que van rotando, pero la coordinación en sí la llevan ellas, pero porque tiene que ver con una diagramación de trabajo, el grupo,  no entendamos que es llegar contar y nos vamos a casa con la mochila un poco más floja sino trabajar, esto por ejemplo que ven ustedes lo hizo uno de los grupos (nos indica un cuadro grande colgado en la pared, con una mujer pintada en medio y con distintas frases todo a su alrededor) lo que tiene es una mujer que se libera y son freses, esto fue me parece que con el tema de la prostitución que bueno, es otra forma de violencia. Son todas cuestiones así prácticas, más de otro lado. Por eso ahora también hay otras profesionales, abogadas, ahora también hay asistentes sociales, psicólogas sociales, es como que se trabaja de otra forma.
E:-Vos nos comentaste acerca de varios profesionales que participan, en tu caso ¿cómo llegaste a La casa del Encuentro?
L:-Yo profesionalmente me sentía bastante estancada, yo trabajo en la administración pública, soy abogada pero veía que me estaba convirtiendo en una mera administrativa y el derecho lo aplicaba poco y nada. A través de un amigo de una amiga llegué acá, hace tres años ya y fui pasando por distintos sectores, yo ahora soy una de  las coordinadora, lo que implica el triple trabajo que el resto de las voluntarias, sigo siendo voluntaria ad honorem no cobro ningún ingreso económico, y tampoco me interesa cobrarlo porque lo hago más desde una vocación, el de ayudar y el de… aunque sea no sé, que venga una mujer ahora en invierno muerta de frío y le haga un té, yo ya con eso me siento satisfecha. Tengo mi trabajo que es el que me permite poder realizarme acá de forma gratuita porque si no sería un poco ilógico, me muero de hambre, y tiene que ver con algo de una vocación quiero creer, es como que me siento satisfecha en lo profesional sé que lo que estudié lo aplico de alguna manera, ayudando a alguien. Y así es como vamos llegando todas, ahora estamos haciendo entrevistas para otras voluntarias, es muy difícil sostener un voluntariado, económicamente, con los tiempos, hay reuniones, no se exige mucho, un día cuatro horas y después hay una reunión de equipo mensual y ése mismo día hay una reunión de área, parece que es re fácil, voy una vez por semana… en la práctica es costoso, no solamente los viajes, el tiempo, por eso hay mucha renovación de voluntarias.
E:-El estado emocional debe jugar también, vos lo mencionaste antes.
L:-Sí, te vas fortaleciendo también, lo que tenemos es a partir de que siempre que estamos haciendo una atención siempre queda alguien para escucharnos porque es importante descargar porque muchas veces que jugar con la tolerancia a la frustración, porque viene una mujer, te dice no tengo a donde ir, me mata a palos, ya hice veinte denuncias y no pasa nada, ¿qué haces, te la llevas a tu casa?, no ,entonces bueno ver de qué forma se la puede ayudar y bueno todo eso genera un poco de frustración que bueno, siempre hay compañeras que están ahí dispuestas a escucharnos como nosotras escuchamos a las que salen después, tiene que ver más que nada con eso.
E:-Esta práctica ¿es algo ya instituido, ese lugar, esa tercera persona para apoyarlas a ustedes, o es algo que surgió a partir de alguna situación?
L:-No, se intenta hacer, lo recomendaron las psicólogas, muchas veces juegan quizás cuestiones personales, o venís e un mal momento y te influye más, pero por suerte tenemos un buen grupo de compañeras, somos todas mujeres las que trabajamos acá y hay mucho compañerismo entonces por más que esté pseudo instituido, porque no es obligación quedarse a esperar a nadie, surge porque cuando vos necesitas salir y que haya alguien ese alguien está, entonces es como que… son cinco minutos, te tomaste un mates, descargaste, lloraste, puteaste y te vas con otra carga mucho más tranquila.
E:-Bueno nos gustaría saber por qué del nombre “La Casa del Encuentro”.
L:-Ah… me lo contaron, pero creo que Ada no sé porque quería La Casa del Encuentro y espero muchos, años, un tiempo, bastante, para inscribirlo en la IGJ porque los nombres que están inscriptos, se va pagando un canon determinado, mensual o anual, y ella iba y preguntaba, la Casa del Encuentro, la Casa del Encuentro … y en un momento fue y tenía que esperar tanto tiempo porque se le vencía si no pagaba y perdía el nombre, y bueno fue y si quedo, pero era algo de ella, o vio el nombre en algún lado…
E:-Seguramente debe haber sido algo muy significativo para ella
L:-Sí, si quieren mándenles un mail que ella seguro lo responde, o me mandan un mail a mí, es lacasadelencuetro@hotmail.com y les digo. Si quieren ahí háganme más preguntas porque hoy no las voy a poder continuar porque tengo dos personas esperándome.
E:-Por supuesto, es trabajo y lo entendemos muy bien, te agradecemos por tu tiempo, tomamos tu palabra para que nos ayudes con este dato porque nos parece importante…
L:-Sí, jaja tenía una explicación, capaz que es re fácil pero no me la acuerdo, sé que el tramite lo hizo así, espero, espero, espero hasta que llegó.
E:-No hay problema, te agradecemos el tiempo, luego nos vamos a volver a contactar para la próxima entrevista.
L:-Sí por supuesto, no hay problemas.

-Observaciones:
Llegamos a la institución alrededor de las cinco de la tarde. Nos atendió una chica que muy amablemente nos preguntó los nombres y nos hizo tomar asiento. Luego se acercó otra señora, también muy atenta, que nos preguntó por qué estábamos allí, de donde éramos, y en qué horario teníamos acordada la entrevista. Nos explicó que ese día también había entrevistas para el voluntariado y que a nosotras nos iba a atender la Dra. Alejandra Lauría, pero que en ese momento estaba con una urgencia, por lo que debíamos seguir esperando. Minutos más tarde, viene una tercera persona, que a la pregunta “¿Ustedes están para la entrevista?” les respondemos que sí, de tal forma que nos hizo tomar asiento alrededor de una mesa junto con otra chica. Al empezar a hablar con ella nos dimos cuenta de la confusión, ella pensaba que nosotras íbamos a presentarnos como voluntarias, ya que también se trataba de una entrevista. Nos reímos todas por tal malentendido y volvimos al lugar inicial. Allí, escuchábamos hablar por teléfono a una de las señoras (con las que habíamos hablado minutos antes), acerca del emblemático caso de femicidio de Puerto Madero, el cual lo definía enfatizando el concepto de impunidad. El lugar era acogedor, había muchos carteles y cuadros relacionados con la temática de violencia contra la mujer. Una  vez que llega la integrante que íbamos a entrevistar, nos recibe tan bien como las demás, muy atenta y amablemente y  nos pregunta si queríamos algo para tomar le agradecimos y nos invitó a seguirla, dirigiéndonos hacia el cuarto del fondo en donde íbamos a realizar la entrevista,  atravesamos un pequeño pasillo decorado con fotos y dibujos, observamos también que al pasillo daban las dos puertas de los baños que, curiosamente, eran los dos de mujeres, ya que tenían el símbolo (♀) en ambas puertas pintado de color rosa. El salón al que ingresamos tenía varios sillones, sillas y banquitos en forma de círculo, una especie de mesa ratona en el centro, un placar de madera y las paredes pintadas de color rosa viejo. En ellas había algunos cuadros, un espejo y dos dibujos pegados que representaban la imagen de una mujer abriendo los brazos como saliendo por una ventana. También había un cuadro grande que según la entrevistada lo habían realizado las chicas. El mismo representaba la mujer libre y se completaba con distintas frases relacionadas como por ejemplo, “Cuando una mujer dice no es no”, “Sexo cuando deseo, embarazo cuando decido” entre otras. La entrevistada respondió todas las preguntas, fue muy clara y muy precisa en el transcurso de la entrevista.  Al principio demostró no saber bien de qué se trataba, por eso debimos explicarle porqué estábamos allí. En un momento, ingresa una chica diciendo “Disculpen, ¿Ale te puedo hacer una consulta?”. Entonces la entrevistada se retira por unos cinco minutos más o menos cortando un poco con el clima que se venía generando. De todas formas cuando regresó, retomamos rápidamente con la temática, pero nos indica que nos quedaban diez minutos más ya que tenía gente esperándola. Más tarde, mientras hablábamos de los profesionales que integran la organización y de cómo este grupo se había ampliado notablemente señaló que había “un abogada por mes” pero rápidamente se corrigió riéndose y dijo “por mes no, por día” y en todo de chiste agregó “en cualquier momento yo voy a renunciar”. Finalizando el encuentro, nos aclaró que si queríamos, podíamos seguir haciéndole preguntas a través del mail. Tanto de la entrevistada, como de las personas que nos habían atendido a nuestra llegada (todas mujeres), resaltamos la buena predisposición que tuvieron para brindarnos información así como también lo cordial y atentas que fueron durante todo el encuentro.

Post entrevista:
Finalizada la entrevista, salimos de La Casa del Encuentro con una visión diferente de la que llevábamos, el abordaje de la temática desde la perspectiva de una representante de la institución nos presentó un escenario en el que comenzábamos a tomar contacto con una realidad que, aunque no desconocíamos, no nos resultaba del todo familiar. Surgieron nuevas inquietudes y fuimos elaborando diferentes ideas e interrogantes que nos permitieran indagar más sobre la temática y la institución en la segunda entrevista.

-Segunda Entrevista: Ada Beatriz Rico, co-fundadora.

Preentrevista:
Llevábamos un bagaje de preguntas sobre diferentes temas debido a que suponíamos que íbamos a realizar ese mismo día una tercera entrevista a otra de los miembros de la institución, esto por causa de los compromisos y tiempos institucionales que nos limitaba a ese mismo encuentro para realizar la dos entrevistas faltantes. Lamentablemente una de las personas que iba a atendernos no pudo llegar en tiempo para ser entrevistada porque se había retrazado atendiendo a medio de comunicación, fue por esta razón que la realizamos la segunda entrevista a Ada Beatriz Rico, co- fundadora de La Casa del Encuentro, Presidenta de la Institución y Directora del Informe de femicidios, quien nos ofreció el tiempo de dos entrevistas con ella y la invitación de asistir a una conferencia que daría Fabiana Tuñez, directora ejecutiva de la institución, en la Facultad de Psicología, aprovechando que somos estudiantes de la misma.

- Directora: Soy la Directora del informe de femicidios.
- Entrevistador 1: Justamente una de las cosas que queríamos…
- D: Claro me dijo sí… por eso los pusieron conmigo.
- E1: Claro, nos interesa profundizar más sobre su trabajo en el observatorio. Nos pareció interesante el trabajo que hacen en el observatorio y el modo de investigación que utilizan. Porque en otra entrevista les contó… la abogada que las atendió…
- D: Alejandra Lauría.
- E1: Alejandra Lauría, sí, ella no explicó  es un trabajo arduo, es a pulmón y es un trabajo muy este… emocionalmente muy desgastante. Que trabajan con artículos, que no tienen acceso a los…
- D: Sí, en principios no hay estadísticas oficiales. O sea que las únicas estadísticas que hay en Argentina son las que llevamos nosotras adelante desde el observatorio. Lo que hacemos es… monitoreamos más de 120 medios Nacionales, Provinciales, Locales… Todo a través de internet por supuesto. Hay un equipo de voluntarias, somos bastantes y todos los días… está dividido por zonas el país y todos los días hay que revisar los casos que van saliendo en cada zona. Y bueno y ahí se van recopilando los datos y después se hace el seguimiento de ese dato. Porque una cosa es la noticia madre y después qué es lo que va pasando con ese caso, hasta poder llegar al informe y determinar si es un femicidio o no es un femicidio. Porque no todos los casos que salen en los medios son femicidios.
(La entrevistada interrumpe la entrevista “- D: ¡Cari! ¿Ya está ahí?” Se trasladan de lugar entrevistador y entrevistados. “-D: Acá vamos a estar mejor, pasen”. Continúan…)
- Entrevistador 2 ¿El seguimiento que hacen cómo es?
- D: Bueno el seguimiento también siempre se hace a nivel de lo que sale en los medios periodísticos pero también tenemos el plus de que muchas de las que integran el observatorio son abogadas. Por lo tanto si en ese transcurso porque además aquí en la casa del encuentro hay un centro de atención. O sea que es muy común que las familias se contacten con nosotras para que les digamos cómo está la causa, para pedir justicia, para infinidad de razones. Entonces ahí tenemos acceso al número de expediente, a cómo está la causa y ahí si podemos hacer un seguimiento. Más allá, ayudamos a las familias a encaminar y a su vez tenemos acceso a más información… Y muchísimas veces la presión social o de las organizaciones puede ayudar a que las familias puedan llegar porque la realidad es que no hay patrocinios gratuitos. Entonces les es muy difícil. Así que bueno, ahí se unifica lo que es la casa del encuentro, el centro de asistencia, a lo que es el observatorio. Cuando termina el año, nosotras el informe lo hacemos de enero a diciembre, ahí si en el mes de febrero del próximo año se publica el informe. Esos informes después tienen otro seguimiento más, que es a través de un libro. Nosotras publicamos un libro que se llama “Por ellas”. Después voy a darles uno para que se lo lleven, es gratuito por supuesto. En ese libro están analizados los femicidios del año 2008, 2009 y 2010 con sus correspondientes fallos y sentencias. Ahora vamos a sacar el segundo libro que incluiría 2011, 2012 y 2013.
- E1: ¿Qué relación hay entre los fallos, las sentencias y los casos de femicidios que ustedes constataron?
- D: ¿Las condenas estás preguntando?
- E1: Sí.
- D: Y bueno ahí tenemos que hacer un recorte, porque por ejemplo en el año 2012 se aprobó la Ley del agravante por violencia de género. Esas sentencias recién ahora están saliendo. O sea que ahora la lógica implicaría que toda persona que asesinare a su pareja o ex pareja en un vínculo de violencia de género, tendría que recibir perpetua. Aún no lo podemos saber porque recién están saliendo estas sentencias, pero antes nos encontrábamos con que no había un agravante, o sea lo ponían como homicidio simple que puede ser de 8 a 25 años por lo tanto terminaban recibiendo 12 años. Eso en la actualidad no puede suceder, es perpetua. Más allá de que tuviera un vínculo legal, ya el agravante está porque existe, se llama la Ley de Femicidio. Pero bueno en realidad en ningún punto de la Ley se nombra la palabra femicidio pero se denomina así. Es la Ley por agravado de violencia de género.
- E1: Claro… en la entrevista anterior nos contaba Lauría que es como que no se aplica también porque no se…
- D: Los incisos…
- E1: Los incisos no se aplican todos porque hay un determinado cansancio en la justicia en llegar hasta el último inciso ¿no?
- D: El tema es que todo lo que sea modificaciones los y las penalistas son muy reacios a ejecutarlos. Entonces nos hemos encontrado con caso que les han dado perpetua porque le aplicaron ensañamiento y alevosía… la condena viene a ser perpetua pero no aplican la…
- E1: Claro no aplican la Ley de Femicidio.
- D: Claro, nosotras vamos por que la apliquen porque la Ley de Femicidio, no se llama así… la Ley de agravado por violencia de género, lo que tiene es que es muy buena porque reconoce la violencia de género y también no se le puede aplicar atenuantes. No puede hacer un atenuante por emoción violenta, o sea tiene varios ítems, es muy completa por eso sería bueno, pero lamentablemente tenemos que esperar a que transcurran toda las condenas del año 2013, que se puede aplicar esta Ley y ahí vamos a poder tener realmente un estudio de investigación de qué porcentaje… porque ahora lo que tenemos son casos aislados, qué porcentaje se ha aplicado y cuáles son las condenas que realmente recibieron la perpetua.
- E1: Las leyes no son retroactivas.
- D: No, no, por supuesto que no. Esto se puede aplicar a partir de diciembre de que se aprobó la Ley, no son retroactivas. Pero nosotras pensábamos que bueno… si bien no son retroactivas las leyes ya al existir esta Ley puede ser que en sus alegatos la justicia esté incorporando la violencia de género y eso sí va sucediendo. Que lo incorporan a la imputación, pero bueno a nosotras nos interesa qué pasa con la condena más allá de la imputación.
- E2: Ustedes como organización, digamos como institución se consideran ubicadas en ¿qué lugar? Este… ¿qué lugar tienen en la sociedad?
- D: Claro, nosotras en realidad desde la casa del encuentro y de las organizaciones que trabajamos en esta temática y en otras temáticas venimos a llevar adelante, en realidad a suplir, lo que no se lleva adelante desde los distintos Estados. Esa es la verdad porque en realidad aquí tendría que haber estadísticas oficiales que por supuesto serían mucho más veraces. Porque nosotras lo que tenemos es un piso, es solamente lo que sale en los medios de comunicación. Si existieran estadísticas oficiales, desde los Estados pueden hacer otros entrecruzamientos de datos, entre denuncias, hospitales, comisarías… eso para nosotras queda totalmente alejado, pensá que somos voluntarias, que lo hacemos quitándole horas a nuestro descanso y que por supuesto todos los femicidios que están en el informe son femicidios pero ¿cuántos más no registramos?, seguramente muchos.
- E2: Y desde este lugar ustedes ¿qué apoyo encuentran?, ¿no tienen ayuda del Estado?, ¿se manejan en forma totalmente gratuita ad honorem y desde este lugar qué cosas han logrado y cómo piensan que pueden… este… lograr los objetivos que tienen?
- D: Mirá nosotras consideramos que sí, incidimos en las políticas públicas porque por ejemplo, antes que saliera el informe de femicidios en el año 2008, la realidad es que no se hablaba de femicidio, se hablaba de crimen pasional, estaba en policiales, era como algo privado, de hecho hasta el mismo periodismo, era muy difícil incorporar la palabra femicidio, que es un término político, es una denuncia. Eso se ha logrado a través no sólo de la casa del encuentro sino de distintas organizaciones de la sociedad civil que trabajamos esta temática. A raíz de eso se logra que se sancione esta Ley de agravado por violencia de género, y antes… mucho antes   se sancionó la Ley 26.485 y eso es por la presión de todas las organizaciones de la sociedad civil que trabajamos esta temática. Ahora por ejemplo estamos pidiendo la perdida automática de la patria potestad de femicidio al condenado. Esa es una presión social que ejercemos desde la sociedad civil justamente porque nosotras trabajamos, luchamos, somos activistas estamos convencidas de que si salieran estas leyes, mejorarían la vida de determinadas personas… y trabajamos en función de eso.
- E2: ¿Y han recibido algún tipo de ayuda?
- D: ¿Económica?
- E2: Sí.
- D: No, nosotras tenemos algunos convenios, por ejemplo, realizamos talleres con el Gobierno de la ciudad de Buenos Aires. Hay un programa de fortalecimiento de la sociedad civil donde todos los años le otorgan montos muy pequeñitos. Muy pequeños a las ONGs por determinados proyectos, te digo el montón son $30.000 por única vez en un año. A nosotras nos lo dan por supuesto y eso ayuda, a veces para el informe, no sé, fotocopias… cientos de cosas. Sí hemos recibido apoyo para publicar el libro. Ahí lo apoyó la Embajada de Estados Unidos, la Fundación Avon y la ONU, entonces por eso son libros gratuitos porque se pudo obtener el dinero o para poder publicarlo y también para poder sostener la web. Tiene una web propia el libro, donde se puede bajar en forma totalmente gratuita.
- E1: ¿Todas las mujeres que trabajan acá o que se dedican acá a alguna función, son voluntarias?
- D: Todas.
- E1: ¿Absolutamente todo el personal?
- D: Todas… somos 40 personas.
- E2: La otra vez Lauría comentaba que es difícil que se mantenga el mismo grupo, justamente porque es un voluntariado. Lo que te queremos preguntar es ¿cómo se llevan entre ustedes y qué es lo que las vincula, lo que las une? ¿Cómo es la relación?
- D: La relación a nivel humano es muy buena, estamos dividas por días. Todos los días hay un equipo de trabajo, yo por supuesto estoy todos los días, Fabiana Tuñez también, incluso las coordinadoras tienen un día, se los habrá explicado Alejandra. Hay coordinación por área legal, área psicológica, trabajo social, todas son distintas áreas. La relación que tienen ellas es muy buena porque esto no es un trabajo, es un voluntariado. O sea que si vos te acercas  y estás convencida de lo que estás haciendo y te gusta y todas estamos trabajando por lo mismo, entonces es prácticamente imposible trabajar si no estás en esta sintonía, tenemos que tener muy buena energía porque nosotras trabajamos con el dolor. O sea las mujeres que se acercan están atravesadas por el dolor, entonces tenemos que trabajar con mucha energía. El trabajo aquí si bien es un voluntariado, la compañera que se acerca al voluntariado recibe a cambio no sólo la experiencia si no que para su CV es muy importante haber participado y tener un trabajo de base en forma totalmente gratuita. Sino tendría que hacer un postgrado y pagarlo, o sea que es reciproco. Estamos convencidas de que más allá del tiempo que les dure el voluntariado, cuando ellas se van de aquí, se van con una mirada instalada. Porque nosotras…a ver, no es que viene una voluntaria hoy y ya atiende, tiene dos meses de formación. O sea que en esos dos meses ellas van tomando de todas las compañeras, hay una atención interdisciplinaria aquí o sea que viene una psicóloga que va a tomar un poco de abogada, de la trabajadora social, en eso estamos convencidas que más allá del voluntariado, que les quede algo a las compañeras. Aquí se debaten los casos, cuando lo hay, en el poquito espacio que queda para no atención, también se trabaja lo teórico. Hay una reunión mensual de todas en C.A.O.P.I (Centro de Asistencia Orientación y Prevención Integral en Violencia sexista y trata de  persona), donde se van trabajando distintos temas. Nos damos cuenta que realmente les gusta estar aquí. Porque cuando ellas se tienen que ir por una cuestión económica, porque hay que vivir, las que no tienen trabajo por supuesto, que en algún punto encuentran algún trabajo y tienen que dejar el voluntariado. Se hace una despedida y siempre las puertas están abiertas y seguimos en contacto. O sea que el vínculo entre ellas… son todas de la misma generación, o sea es muy bueno.
- E2: ¿Y a futuro qué proyectos tienen?
- D: Nosotras bueno, uno de los proyectos que tenemos es obtener una casa para la casa, porque esta casa es alquilada. Nosotras pagamos el alquiler con un dinero que llega todos los años de la Global Fund For Women que es una asociación que está en San Francisco. Con eso pagamos el alquiler y los gastos de la casa. Pero nuestro proyecto sería tener una casa que nos la den en comodato. Porque con lo que pagamos de un mes de alquiler se paga un año. Arreglarla y diseñarla y tener realmente lo que tenemos, el centro de atención que tenemos pero sin la presión de tener que pensar todos los meses tenemos que pagar el alquiler, o dependemos de que llegue el dinero para pagarlo. También entre esos proyectos estaría el… en un caso de emergencia también poder alojar a esa mujer que en la actualidad no lo podemos hacer porque no hay espacio suficiente. Proyectos tenemos muchos, ese sería uno. Respecto a los informes de femicidios, nos encantaría que haya estadísticas oficiales, para que realmente eso llegue del Estado y no tener que darle tanta energía y tanto esfuerzo a  esto que realmente te lleva muchísimo tiempo.  Mucho tiempo emocional también. Pero bueno una casa para la casa es una meta que tenemos en la actualidad. Ojo no queremos que nos regalen una casa, queremos que nos otorguen una casa en comodato, nosotras la arreglaríamos, la tendríamos por 10 años.
- E2: El otro día nos comentaba Lauría que el proyecto cuando se inició, se inició para ayudar a las víctimas, digamos… ¿Cómo fue que se creó la idea, quién la hizo y cómo fueron haciéndose conocidos?. ¿Cómo se dio?
- D: Bueno la casa del encuentro se fundó el 4 de octubre del 2003, la fundamos… bueno yo… ahí estamos las tres fundadoras: Fabiana y Marta. La casa no estaba aquí, estaba en Pueyrredón y Méndez de Andes.
- E1: Cerquita de mi casa, estoy ahí a dos o tres cuadras.
 - D: A no me digas… bueno ahí estuvimos 3 años, lo que pasa es que ahí alquilábamos y después la casas supuestamente se iba a hacer un edificio, y después había una reglamentación que no se podía hacer. La casa está todavía. Bueno en realidad se formó con la idea de que bueno… de juntarnos, de poder… tal vez trabajar más la temática desde lo teórico, desde poder hacer análisis, de todo lo que nos iba sucediendo por ser mujeres. Una cosa lleva a la otra porque se fueron acercando por Internet, donde se van acercando las organizaciones feministas que nos conocemos todas, no somos tantísimas. Entonces empezaban a pasar datos, de una mujer desaparecida… y ahí me acuerdo que nos habían escrito de Santa Rosa, La pampa, que fue con Andrea López. Empezamos con el tema de las mujeres desaparecidas. La gente incluso pensaba que la casa del encuentro era el nombre que le habíamos puesto como un encuentro, pero  pensaban que era como el encuentro con la cara de estas mujeres. Ahí empezamos a hacer una marcha todos los 3 de cada mes. Los 3 de abril en homenaje a la fecha que desapareció Marita Verón. Eso lo sostuvimos durante 5 años, después lo terminamos aquí pero en ese momento estábamos en la otra casa. Todos los 3 durante 5 años estuvimos en la esquina del Congreso, buscando las mujeres desaparecidas. Ahí se acercaban familias, víctimas de violencia… y ahí ya es como que nos fue llevando la vida… porque entonces ya empezaban a acercarse aquí, a nosotras no nos conocía nadie. Éramos dos abogadas, dos psicólogas. Fabiana, yo y Marta. Entonces un día estábamos en la olla popular allá de Corrientes… y una de las compañera de la casa que era Noe, dice: “¿Por qué no pedimos voluntarias?” y pedimos por megáfono, ahí no había nadie pero cuando llegamos a la noche dijimos vamos a mandar un pedido. Si alguien viene…. Quizás nos conocían un poco por el tema de las marchas. Mandamos un mail a todas las listas y nos escribieron 60 personas, de las cuales habrán quedado 15. Cuando vinieron las compañeras ahí construimos el C.A.O.P.I que es o que conocen ahora. Funciona desde el año 2010. Les estoy hablando de hace 5 años atrás. En paralelo en el año 2008 empezamos con el informe de femicidios. O sea que teníamos la marcha de los 3, el informe de femicidios y el C.A.O.P.I porque aquí venia gente a buscar a sus hijas por la trata, buscaban sus hijas desaparecidas, a atenderse por violencia. A veces a mi me parece casi tantísimo lo que estamos, pero no es tanto el tiempo. Vinimos tal vez a ocupar un lugar que se necesitaba, no sé cómo explicarlo. Hacemos mucho, somos muchas nosotras y bueno y las que co-fundamos la casa, seguimos trabajando acá como el primer día.
- E2: Salieron como emergencia de eso, del pedido, la búsqueda…
- D: Claro, a veces hay lugares que se construyen para… acá fue al revés, estaba el espacio, que era un espacio de construcción para hacer talleres y de repente la demanda es lo que nos lleva a nosotras a transformar esto.  Estábamos convencidas de que era necesario un mundo más igualitario para tanta violencia hacia las mujeres, los niños. Incluso a veces los varones, que dicen que un varón no puede llorar, no están la idea de sensibilidad. Eso lo teníamos claro, ahora cómo la vida nos fue llevando… aquí estamos. Tanto hacer, tanto estar en la calle y tanto trabajar.
- E1: Y a nivel social, yo me asombro que hayan empezado tan cerca de mi casa y yo no las conocía, de hecho las encontró Mariana, buscando por Internet. Digo ¿cómo no se conocen? Y eso que yo sigo la temática de femicidios, es como que a uno le afecta. Pero no las ubicada a ustedes, a otras instituciones que me imagino que deben existir también y que uno no las conoce. Es como la invisibilización que hay en el tema ¿no?.
- D: Mirá nosotras, la verdad que no podemos decir que no nos conocen porque salimos todo el tiempo en los medios, en los diarios, en la calle incluso nos pasa. Por ejemplo… no estamos tantísimo en la calle pero por ejemplo el 25 de noviembre, 8 de mayo, cuando estamos, la gente se acerca y siguen la casa del encuentro. Porque siempre hay alguien que conozca a alguien que le esté pasando algo. Nosotras como aquí en la casa por supuesto no se cobra, por supuesto que se puede atender gente que no viva aquí en Capital, porque ese es otro tema, el tema de lo del Estado es que es por jurisdicción. Yo la verdad que a veces digo que el reconocimiento de esa mujer que me diga: “A mí me ayudaron”. Eso es lo que queremos, ver a alguien que ha logrado avanzar, que logró salir de su vínculo, que logró volver a considerarse persona cuando antes no se consideraban. Eso es lo que realmente reconforta. A veces a  nosotras nos preguntan a las co-fundadoras si tuvimos una causa parecida o si vivimos violencia o algo. No, la verdad que no. La violencia la puede vivir cualquier mujer por ese hecho de ser mujeres y la justificación que existe no sé, en la calle, hacia nosotras. Pero no… nos moviliza esto… este es nuestro espíritu de lucha, el cambio de un mundo mejor, como tantas y tantos activistas en distintas temáticas. No sé, la gente de Greenpeace trabaja por un tema, es lo que vos elegiste en la vida. O transcurrís o elegís algo a qué dedicarle tu pasión.
- E1: Sí, es algo de lo que nosotros estábamos hablando antes. Yo suponía que tiene que haber un atravesamiento personal.
- D: En el caso nuestro no.
- E1: En algún punto las atraviesa la violencia, el sufrimiento del otro.
- D: Pero por supuesto, eso te lo dije antes. Solo por el hecho de ser mujeres hay un atravesamiento de la violencia, pero no te puedo decir desde lo personal. Hay fundaciones que claro… esas mamás que mataron una hija o violaron a su hija y necesitan de alguna forma canalizar eso, ayudando a otra persona. El caso nuestro no es. Sí el ser mujeres.
- E2: Es ayudar a otro…
- D: Sí, porque siempre decimos nosotras no podemos cambiar el mundo pero con que podamos ayudar a esa mujer que tocó el timbre de esta casa se vaya con un panorama distinto. Ya con eso es… el mejor regalo que nos pueden dar.
- E2: En relación al trabajo que hacen en el observatorio, nos gustaría que nos cuentes un poco más de eso ¿Cómo lo hacen?
- D: Bueno ya te dije, nosotras monitoreamos más de 120 medios… todos los días porque está dividido en zonas y después se recopila esa información. Se hace un seguimiento real, porque no es solamente una mujer asesinada, hay que fijarse realmente qué sucedió con ese caso. Eso es lo que más trabajo nos lleva y también el caso que no está claro qué sucedió y que tampoco sale ninguna información más. Entonces siempre tenemos en el informe muchísimos casos que llamamos dudosos nosotras, que no podemos afirmar que es un femicidio. Si en alguno de esos casos que continúan en seguimiento después, aparecen algunos datos se pueden incorporar al libro. Tenemos una reunión trimestral con las compañeras del equipo donde nos vamos perfeccionando. Ahora ya tenemos un programa donde vamos descargando todos los casos de estos años para que se nos sea un poquito más sencillo. En la actualidad me llama una periodista y me pregunta cuántas mujeres de 21 años asesinaron, para eso hay que buscarlo…entre todos los casos que son 1.808, recorrerlos uno por uno y fijarse. Eso no va a pasar o sea se fue como sistematizando los casos. Lo que sí, esos casos están en búsqueda siempre, porque siempre te va a aparecer algún dato más. Cuando empieza el juicio, la imputación, algún dato que te ponga el diario de ese lugar, local. Local porque no siempre los casos que suceden en Jujuy salen en los medios de Jujuy, no son tomados a nivel Nacional. Por eso la búsqueda tiene que ser tan exhaustiva. También le fuimos incorporando cosas al informe. Al principio no registrábamos los niños y las niñas que quedaban como victimas colaterales. A partir del año 2010 los incorporamos y fuimos para atrás e incorporamos 2008 y 2009. En el año 2009 también incorporamos los femicidios vinculados de varones, que eso no lo teníamos en el primer año. Pero nos dimos cuenta cómo había varones que eran asesinados nada más con el objeto de destruir a la mujer. El objeto sigue siendo la mujer. Niños, hijitos, nuevas parejas o también hombres que intervenían para impedir la agresión, un padre, un vecino, un hermano. Decidimos incorporarlos. Hay informe de femicidios en otros paises pero ningún informe registra a los varones. Cuando nos queda totalmente claro, por ejemplo Tomás, el niñito de Lincoln. ¿Lo tienen presente a ese caso?
- E1: Sí. Tomás me suena.
- D: Tomás es un chiquito que en el año 2011 lo secuestró el padrastro.
- E1: Ah, sí que lo llevó y lo secuestró.
- D: Ese niño fue asesinado para destruir psicológicamente a la mujer. Entonces a partir del caso emblemático de Tomas, los medios y la sociedad… porque a la sociedad llegan a través de los medios, es mediante este caso que se logra entender de qué hablábamos cuando hablábamos de femicidios vinculados. Ése es un paso importante. Y bueno la realidad es que con los informes vamos a seguir hasta que haya estadísticas oficiales, nos parece que es un porte que hacemos hacia la sociedad y que es generador para poder presionar para que haya políticas públicas integrales que protejan a las mujeres. La realidad es que si yo te estoy diciendo que si en tal provincia hay tantos femicidios quiere decir que hay algo que está fallando. Entonces eso puede servir como presión para que se hagan más dispositivos de seguridad.
- E2: Hoy casualmente en el programa de canal 2 de Pamela David. Nombraron que de femicidios… o sea que matan una mujer cada 32 horas.
- D: Cada 31…
- E2: Sí, 31. Y decían que esas eran estadísticas en base a artículos y casualmente las nombraron a la casa del encuentro. Está naturalizado y se sabe que es en base a la no intervención del Estado, a no estadísticas reales.
- D: No hay oficiales, bueno de hecho desde los distintos lugares del Estado cuando hacen declaraciones o cuando hablan, dicen matan a una mujer cada… antes era cada 40 horas, ahora cada 31 horas, pero tendría que haber estadísticas.
- E2: Claro hay algo de lo que se dice de invisibilizar.
- D: Es la única manera porque la realidad, y yo te lo puedo asegurar que los números serían mucho más altos. Porque en una zona rural, una mujer que la golpeo el marido y entró al hospital y muere por paro cardiorespiratorio ¿quién lo investiga?
- E1: Y muchísimas cosas más. Por eso yo decía antes que… no porque no fueran conocidas ustedes… es como que se mediatizan tantas cosas. El fin se logró porque nosotros ahora hablamos de femicidios, de femicidio vincular, porque hay un movimiento atrás de eso. ¿Por qué no se pone de relieve un tipo de institución así?
- D: Lo que pasa es que para que este tema sea un tema realmente importante, tiene que ser un tema de agenda de Estado. Porque sería la forma en que muchos femicidios se pueden evitar. El tema es que tendría que ser una cuestión política, crear más refugios, hacer capacitaciones a los efectores de la justicia. Ahora estamos pidiendo que los niños y las niñas que quedaron huérfanos reciban del Anses una jubilación minina. No es un subsidio, si no un beneficio hasta la mayoría de edad y que ese dinero lo reciban las personas que están a cargo de esas criaturas que son generalmente los abuelos, las abuelas, los tíos. Entramos con otra problemática. Murió la mujer y los hijitos son 6, 7 o 5. No pueden estar en una sola casa, estamos hablando de la gente de menores recursos. Todos terminan, dos en un lado, dos en el otro, uno en el otro. Además los traumas psicológicos que le trae a esa criatura, porque no sólo mataron a la madre, el padre está preso porque es el asesino, pierden a su compañerito de colegio, del barrio, se tienen que mudar. Esa es una iniciativa que hemos tomado… el año pasado estábamos pidiendo la pérdida  de la patria potestad, este año seguimos pidiendo la pérdida de la patria potestad y le anexamos esto. Esto sí con una decisión política se puede hacer, es un relevamiento, que presenten los papeles y que se le otorgue una ayuda económica, porque no es solamente para que los chicos tengan para comer y vestirse. Es también para que tengan una obra social y puedan tener un tratamiento psicológico. Nosotros registramos de todos estos años 2.200 hijos e hijas de las cuales 1.400 son menores y es un subregistro, imaginemos la cantidad que hay. Esos chiquitos obvio que sufren un impacto emocional tremendo y a ustedes les parece que una familia que no tiene ni para darles de comer lo va a llevar a un psicólogo o a una psicóloga… entonces ese es uno de los motivos que realmente nos parece que esa niñez que hoy está en ese vacío legal y abandono, después van a ser personas adultas y van a seguir en el mismo estado de abandono. Me parece que eso hay que reverlo.
- E2: ¿Ustedes han implementado hacerse presentes en los medios, hacer ese pedido, este reclamo de pedir más ayuda de la gente? Gente que quizás puede y se sensibiliza de esto y que quiere ayudar como para poder tener su casa…
- D: Nosotros primero que no vamos a los medios, los medios vienen a nosotras. Pero cada vez que vienen los medios es porque hay un caso. Nosotros pedimos para esa mamá, para esa familia que le den patrocinio, que le entreguen a los hijos. Nunca hemos pedido para nosotros… o sea por una causa que sería totalmente justa, pero no… la verdad que no lo hemos hecho. Nosotras no tenemos tiempo Gabriela. El tiempo se va en esto. Hace poquito hablábamos con las compañeras y decíamos ¿Por qué no hicimos una campaña? No la implementamos jamás, hemos puesto en la página de la casa: si vos querés donar…. Y pusimos los números de las cuentas, hasta ahí llegamos y creo que las compañeras hicieron un videíto… pero así una campaña fuerte no, no porque no nos interesa, no nos da el tiempo. O sea nosotras realmente…. Aquí se atiende que se yo 250 mujeres por mes, es mucho. En los horarios que tenemos y estamos todos los días… mas allá de los talleres y capacitaciones, todas las cientos de cosas que hacemos.
- E1: ¿Es una condición que solamente sean mujeres?
- D: No, nunca vino un hombre. Nosotras de hecho pusimos desde un principio voluntariado que incluía varones y mujeres, nunca se presentó.
- E1: Ah… porque yo veía en la página que piden “voluntarias”.
- D: Ah…. ¿Por qué lo cambiamos? De enojadas que estábamos. Nunca…
- E1: Yo te confieso que pensaba: a ver si me dejan entrar o no, lo veía tan estricto como que son integrantes mujeres, pensaba ¿se podrá entrar? Pensé que tenían alguna razón en especial.
- D: Los únicos días que tratamos de que no hayan muchos hombres por la casa son los viernes porque está el grupo de autoayuda, cuando ellas entran y cuando se van, es el momento que… después no hay ningún problema. Nosotras nos hemos reído mucho porque los primeros dos años hemos tenido voluntariado y nunca nos escribió un varón.  A las capacitaciones sí vienen, hacemos dos capacitaciones por año, son muy interesantes y gratuitas por supuesto. Ahí si vienen, vienen 80 mujeres y 5 varones pero algo vienen. Si no parece un tema de mujeres nada más.
- E1: Claro, porque Lauría decía en la otra entrevista…. Hablaba de feminismo… lo que trataban era hacer el hablar para todos y concientizarse. Hay hombres que son violentos pero hay otros hombres que no son violentos, además que traten un poco de pregonar nuestro trabajo…
- D: La sociedad la cambiamos entre todas y entre todos porque si no, no se cambia. Nosotras nos definimos como feministas populares porque el feminismo tiene distintas corrientes. Una es la corriente radical, que es a la que vos te referís, que no quieren saber nada con los hombres. Lo cual es un imposible cotidiano. Hay distintas ramas que no vienen al caso, nosotras tomamos de todas esas ramas lo que más nos representaba y a nosotras lo que nos representa en el caso de las mujeres, no es hablar para las mujeres sino con las mujeres. Nosotras pensamos que si el tema de la violencia es un tema donde la víctima es la mujer, involucra a toda la sociedad. Cuando acá viene un padre, un hermano o un amigo, el que tiene una víctima o familiar en su entorno también está involucrado. Fijate que el año pasado abrimos un grupo de familiares, amigos y amigas de víctimas de violencia, que participan por supuesto hombres y mujeres. Porque se encuentran con que tienen a un conocido o a un familiar y no tienen las herramientas para ayudarla.
- E1: Hoy miraba el caso de Alejandra rubio, que el papá estaba sin saber qué hacer. Dijo en su momento que no se podía meter, no sabía cómo…uno a veces piensa que no se puede meter porque es cosa de la pareja…
- D: Bueno por eso te digo, acá hicimos dos años lo de noviazgo violento y me acuerdo que en el primero que hicimos subió un señor la escalera, yo estaba ahí y me dice: ¿Yo puedo participar? Sí, le digo yo. Y me dice: No, porque yo soy el papá de una adolescente que está en un noviazgo violento. Así existe ese temor de si pueden participar. Sí pueden y deben participar. Porque cuando hablamos de los violentos estamos hablando de esa porción de varones agresores y violentos, no estamos hablando de los hombres. Hay hombres que son compañeros y caminan a nuestro lado y están en la lucha. Es absurdo segmentar porque si hablamos de igualdad entre varones y mujeres, la sociedad…
- E1: No se construye excluyendo a una parte,
- D: Claro. A mí a veces me preguntan si atendemos varones. Porque hay talleres y cursos para varones violentos. Yo le digo no, nosotras nos dedicamos a las mujeres, en eso sí. Pero bueno si me llama un varón por supuesto que le doy las direcciones de lugares que los atienden en forma gratuita. Nosotras a nuestra garantía la ponemos en ayudar a las mujeres, a los chiquitos, a las chiquitas.
- E1: ¿Hay hombres violentos que se interesen? Hombres interesados en la situación que quieran ayudarse a sí mismos.
- D: No, generalmente nos llaman por teléfono varones, cuando nos preguntan si atendemos a varones. Les decimos que nosotras no, pero les damos las direcciones. Y la realidad es que son derivados del juzgado, o la pareja le dijo si no te curas no vamos a seguir. Nosotras no creemos que se curen porque no están enfermos, son violentos. Son dos cosas distintas. Entonces nosotras los derivamos a lugares que trabajen esta temática. Personalmente no, o sea ¿un espontaneo querés decir que le agarró culpa?, no.
- E1: Sí, supongo que puede haber gente, aunque es difícil.
- D: Sí, podría haber pero no nos ha pasado la verdad.
- E1: ¿Y hombres golpeados? ¿Alguno se ha presentado?
- D: Han llamado a veces, no golpeados… o sea generalmente llaman algunas mamás que dicen que la pareja los insulta. Golpes no tuvimos jamás.
- E1: Igual es otra temática porque ya estaríamos fuera de lo que es el femicidio.
- D: Claro es otra temática. Mirá nosotras tenemos listados de todos los lugares para todas las temáticas. Que esa es una temática, otra temática es una mujer que haya vivido una agresión sexual en su niñez y ya sea adulta, o sea son distintas ramas de lo mismo pero todo tiene que  ser derivado al lugar que trabaje la temática y la tenga profundizada.
- E1: Entonces ustedes se dedican a lo que es femicidio y evitarlo.
- D: Nosotras nos dedicamos a violencia de género, claro y trata.
- E1: Pero el femicidio lo tienen como…
- D: Y trata.
- E1: Y trata también, pero el femicidio es como la bandera de ustedes ¿no? El femicidio y la trata.
- D: Claro, nosotras dentro de la violencia de género elegimos trabajar los dos eslabones más fuertes, que es la desaparición de personas que muchas veces se entrecruza con el femicidio y es el asesinato de una mujer por violencia de género. Justo los dos extremos de la violencia.
- E2: Cuando llega un caso así desesperante, de una mujer que acaba de ser golpeada, en un estado de desesperación o alguien que desapareció ¿Con que ayuda cuentan? De una comisaria, de lugares…
- D: Lo primero es ver dónde vive para poder derivarlo, porque  no es lo mismo una víctima que viva acá en la ciudad autónoma de Buenos Aires, que una víctima que viva en el gran Buenos Aires donde a veces no hay nada. En función de eso… si vive acá en la ciudad de Buenos Aires es más simple el procedimiento porque tenemos la Oficina de Violencia Doméstica (OVD), que depende de la Corte Suprema de la Nación para derivarla y que pueda hacer un proceso súper rápido. Si no lo podemos derivar a lugares donde… no la dejamos sola obvio pero bueno a veces hay lugares donde no tenemos nada, ni refugio, nada.
- E2: Ustedes la reciben acá. Tratan de contenerla y que se vaya tranquila…
- D: No, por ejemplo viene una mujer que no es de acá. ¿Dónde vivís? En Florencio Varela, bueno mientras la contiene el grupo de psicólogas, llamamos para ver a donde pueden ir. A veces a la comisaria misma llamamos.
- E2: ¿Y cuando no hay respuestas?
- D: Comisarias hay siempre, ya cuando se llama desde una ONG. Pero ¿qué pasa con la mujer si no tiene la ONG cerca?, ahí está el tema. O sea nosotras cuando llega una víctima nos ha pasado… una vez llego una víctima con los dos chiquitos y el perrito que se habían ido de la casa. Y qué hacemos… porque en los refugios no se puede ir con animales y los chicos no querían dejar el perrito, es un vínculo más. Ahí empezamos a buscar los vínculos, porque también es eso, finalmente contactamos con un familiar lejano que era una prima que bueno, los terminó alojando ahí hasta que se hizo todo el proceso legal.
- E1: Vos decías recién del perrito, y no… el perrito es importante en una situación así, no le podes sacar ese perrito a los chicos, a la mujer misma inclusive… porque por algo lo trajo.
- D: Claro… Por ejemplo una mujer que se haya ido y no tengamos ningún lugar para alojarla, acá no está permitido para alojarla. Una vez nos habíamos quedado hasta la una de la mañana buscando teléfonos para alojarla, mientras le dimos algo para comer. Pensábamos qué íbamos a hacer si no encontrábamos, no nos íbamos a quedar toda la noche con ella pero no podía estar en la calle. Cuando vos estas de este lado te das cuenta todo lo que no hay y nosotras que tenemos los elemento, no sólo de información si no también los teléfonos para llamar. Y si nosotras no conseguimos imagináte una mujer ¿qué hace? En el estado de vulnerabilidad, muchas veces golpeada, o que han abusado sexualmente de ella su propia pareja, sin un peso, les rompen los documentos ¿qué hacen?, la violencia no es esto de los sectores económicamente más vulnerable, esos sectores son los que no pueden tener acceso a nada más, porque una mujer de clase media o clase alta que sufre violencia puede tener aunque sea las redes sociales o la parte económica cubierta como para acceder. Buscar una amiga, o trasladarse en un taxi, la otra mujer no tiene nada. De hecho nosotras tenemos acá un ropero con ropa porque en pleno invierno han aparecido sin nada, se van.
- E2: O sea una forma de ayudarlos de ustedes es dándoles ropa, ofreciéndose cada uno en forma de voluntariado. Ofrecer todo lo que puedan para lograr tener su lugar…
- D: Y si porque nosotras ahora nos hemos puesto como meta decir bueno… un año me acuerdo que había un problema en Estados Unidos, no llegaba el dinero. Yo pensaba… ¿cómo vamos a pagar el alquiler? Porque acá se pagan casi $10.000 pesos por mes, sólo de  alquiler. Lo demás lo podemos ir paleando, el resto no podemos, no tenemos la plata para pagar acá. Yo eso sí lo pienso: ¿Si algún día no llega el dinero? ¿Cómo hacemos?. Jamás cobraríamos, porque la esencia de trabajo es esto. No derivamos a lugares que sean arancelados y por supuesto nadie paga absolutamente nada, ni en los talleres ni en nada, es la esencia de la casa.
- E2: ¿Y cómo lo sostienen? Es la ayuda que les llega, los que nos conocen, lo que nos contaste.
- D: El alquiler ya te dije, que es lo mas grande.
- E2: ¿De qué manera ustedes pueden tener más llegada de ayuda? .Porque está bien, los medios viven de ustedes pero ustedes están poniendo el cuerpo… ¿Cómo llegaron a tener más ayuda?
- D: A veces es muy difícil poder donar $50 pesos a un lugar, si vos tuvieras la forma de que te lo debiten de tu tarjeta de crédito y pudieras debitarlo de ahí. Multiplicado por tanta gente que nos conoce, seria muchísimo dinero para la causa que llevamos adelante. Empezamos a hacer el trámite pero era tan engorroso que lo dejamos por la mitad. Eso si es algo que se podría llegar a hacer. Nosotras todo lo que tenemos lo donan. Desde volantes… imposible para poder hacerlo, pero tenemos energía y pasión, hasta ahí llegamos. Yo siempre digo que una recibe todo lo que va brindando. Una mujer que llegó encorvada y mal, vos la ves cómo se va incorporando y esa sonrisa… y en algún momento de algún otro lado recibimos, algo… es así…
- E2: Y eso también es lo que las sostiene y las mantiene en pie.
- D: Totalmente, aparte nosotras las co-fundadores, las mujeres más grandes no necesitamos el dinero, lo que necesitamos es que esto se sostenga. Las compañeras son todas mas jovencitas, las voluntarias no tienen trabajo y las que tienen trabajo van coordinando y desconectado ese día, o sea es como una mística, es así.
- E2: También lo que piensan realmente es alojar a esta gente, porque con darle plata no la ayudas… la ayudas con que se fortalezca y…
- D: Jamás le damos dinero a la gente, primero que no tenemos, pero creo que así lo tuviéramos no, porque nosotras no creemos en el asistencialismo. Creemos en el fortalecimiento que son dos cosas distintas. Una cosa es que una mujer llegó acá, se fue de la casa y tiene que llegar porque se le consiguió el refugio acá y no tiene ni para viajar, eso es una cosa, el dinero del viaje pero lo otro es asistencialismo. Pero el asistencialismo no sirve porque después pasan a depender de vos. Acá el tema es fortalecerla y que busque sus propios recursos. Otra cosa es que venga sin ropa y le damos una campera.
- E1: Claro se me ocurre pensar que sería crearle otro vínculo de dependencia. Sería dejarla sumergida en la misma violencia, pero que sería simbólica…
- D: El otro día venía una mamá con una nenita, en bata la nenita. Fuimos al salón y le dimos a la mamá lo que teníamos. Pero para la nena no teníamos ropa de invierno, le dimos todos pulóveres grandes pero calentita. Eso es solidaridad, pero no se nos ocurriría nunca decirle a esta mamá vení todos los días a buscar el… no…no estamos de acuerdo  porque así no generas fortalecimiento, generas la dependencia.
- E1: Claro por eso decía que me parece que eso es ejercer violencia… estar poniendo en una situación de dependencia.
- D: De hecho es uno de los límites que tenemos porque a veces pasan cosas acá que es difícil. Pero uno de los límites que tenemos trabajados y logrados es este, nunca darle…
- E1: Y cuando una mujer viene acá, me imagino que en las condiciones más dolorosas, yo pienso que no viene buscando una asistencia. Viene buscando una contención.
- D: Yo veo a una mujer, y uno le da un beso y un abrazo y le pregunta: ¿querés tomar algo? Ya con eso se aflojan. Porque para nosotras las mujeres no son un expediente… son personas. Cuando llega una mujer se activan todos los mecanismos de cómo podemos ayudarla a salir. No sacarla, son dos cosas distintas, eso se lo transmitimos. La mujer necesita que haya alguien que va a hacer  lo posible para acompañarla en esta salida, es así.
- E1: Si, yo pienso en el aislamiento en el que viven.
- D: Aislamiento, si vos estuvieras acá 24 horas sabrías las cosas que vemos nosotras.
- E1: Claro el hombre que es violento generalmente tienden a aislar también.
- D: A aislar, arañar, a destruir a quemar… es muy… o sea nosotras siempre vemos la parte positiva de todo esto porque si te quedas en lo terrible… porque pensás que el femicidio es el último eslabón, pero antes ¿cuánto vivió esa mujer? Son años de violencia, años de maltrato, de humillación, de subestimarla y destruirla psicológicamente, psíquicamente, físicamente y después llega al femicidio.
- E1: ¿La mayoría son así familiares directos no?
- D: Sí, el porcentaje más alto son parejas o ex parejas.
- E1: Estaba pensando en casos como el de Manggieri…
- D: Esos casos existen pero tienen un porcentaje menor. El 65% de los casos son parejas o ex parejas. Todos los años igual…. Si ese porcentaje es el más elevado.
- E1: Hace  poco hubo uno acá los otros días cerca de Caballito.
- D: Sí, el de Caballito. Ahí tenes bien en claro la obsesión que tenía este femicida por ella… 30 años de obsesión y termina matándola. De cualquier manera todos los casos son obsesión. El otro día una periodista me preguntó ¿Conoces además de este algún caso de obsesión? Y le dije sí, el año pasado 277. Todos, porque si no existe la obsesión, o sea el deseo de poseerla, no  existiría el femicidio, es muy simple.
- E2: Bueno realmente te agradecemos muchísimo.
- D: No, por favor.

-Observaciones.
 Concurrimos a la casa del encuentro tal como habíamos pautado para realizar las dos entrevistas que, por razones operativas, nos concedían en un mismo día. Al  llegar a la Institución fuimos recibidos muy amablemente por una de las voluntarias y nos invitó a aguardar un instante que enseguida nos atendería.
Inmediatamente nos recibió Ada Rico, presidenta y cofundadora de La Casa del Encuentro, quien muy cordialmente nos invitó a pasar a una sala apartada para que pudiésemos comenzar la entrevista.
La entrevistada manifestó estar con un esguince y algo cansada y dolorida, disculpándose por esa situación, a la vez  se mostró comprometida con nosotros para ayudarnos en nuestro trabajo, por lo que  nos dijo que ella iba a respondernos todo lo que quisiéramos preguntarle ese día, ya que la otra persona que iba a darnos la tercera entrevista no pudo presentarse debido a compromisos relacionados con la institución, se disculpó también por esta situación y nos propuso presenciar, considerando que somos estudiantes de la UBA,, una charla que Fabiana Túñez, cofundadora y directora comunicacional, daría en la Facultad de Psicología UBA, invitada por la Cátedra de Género...
Podemos decir que la entrevistada estuvo muy bien predispuesta (a pesar de estar dolorida por su lesión), respondió a todas nuestras preguntas explayándose en detalles y anécdotas.
Pudimos observar que el lugar es cálido y acogedor, tiene una sala de estar con sillones para recibir a las personas en los que vimos sentadas dos mujeres  esperando para ser atendidas, la calidez se hacía extensiva al trato brindado en el recibimiento y durante la entrevista. En las paredes hay fotos de marchas a las que han asistido e información sobre violencia de género tales como afiches en repudio al femicidio y a la violencia. Todo esto en un ambiente hogareño, construido con lo que se fue consiguiendo, con luz tenue y en medio de una armonía superadora de lo físicamente estético que invitan a relajarse y distenderse.

Post-entrevista:
Salimos del encuentro con La Casa del Encuentro con un material rico para comenzar a trabajar, con muchos más datos que resultaron de los interrogantes que llevamos surgidos de la primera entrevista; pero enriquecedor también por la apertura que representó a la temática que comenzábamos a abordar. Decimos encuentro con La Casa del Encuentro porque significó eso, un encuentro, y no solamente con la institución, sino con la causa por la que lucha. El diálogo con Ada Rico fue realmente motivador y emocionante, no sólo desde su exposición, sino desde su propia emotividad. Nos fuimos ese día con la invitación a la conferencia y ganas de involucrarnos con el tema.

-Conferencia sobre “Violencia de Género y Femicidios”

Conferencia dictada por Fabiana Tuñez, el día viernes 16 de Mayo de 2015, en la Facultad de Psicología de la Universidad de Buenos Aires, en el marco de los festejos de los 25 años de la Cátedra Única, de la Materia “Introducción a los estudios de Género”.
Abre la conferencia la Titular de cátedra, profesora Débora Tájer.

Profesora: Buenas tardes, bienvenidos. Para nosotras es un orgullo que Fabiana comparta con esta cátedra y que quiera estar aquí en esta facultad, transmitiéndole las cosas que desde la casa del encuentro están haciendo. Fabiana por favor (aplausos).
- Fabiana: Bueno, en primer lugar agradecer a la cátedra, porque para nosotras siempre fueron aliadas en este trabajo, en esta lucha y ojalá  que vayan por 25 años más y porque se incorporen en las currículas educativas y la temática como algo de grado, y algo obligatorio. Este…y realmente el trabajo que se ha hecho a lo largo de todos estos años desde la cátedra se ve. Se ve porque cada vez que hacemos una convocatoria de voluntariado no es lo mismo la profesional que pasó por la cátedra que la que no pasó. Así que le doy mi felicitación a todo el equipo de la cátedra por supuesto por el trabajo. Y también lo importante de esta posibilidad de articular lo que es el trabajo cotidiano de la sociedad civil y la Universidad. Porque tener un compañero para poder expresar al machismo y al patriarcado es trabajar y hacer. Trabajar permanentemente en la construcción de una sociedad basada en otros valores. Y creo que este es el camino, cuando nosotras articulamos con Universidades, con otras organizaciones, nos damos cuenta de la presión que tenemos como sociedad y todo lo que no aprovechamos. Entonces estamos muy felices, nuevamente como todos los años por algún tema andamos por aquí. Obviamente que aquí hay algunos temas que a lo mejor ni siquiera hacer falta definirlos, pero nosotras desde la casa del encuentro, que somos una asociación multiestratégica, dinámica, en permanente y constante mejoramiento y crecimiento. Hemos desarrollado un trabajo que tiene tres pilares: lo político, lo social, desde un punto de vista de género, pero específicamente de feminismo popular. Construido entre todas las mujeres de cada rincón de la sociedad. Donde incorporamos al varón también dentro de esta lucha, porque para  poder destruir el patriarcado  y el machismo en el cual hemos sido educados varones y mujeres, el único camino es unirnos todos y todas en esta lucha. Por eso somos feministas raras, dicen que las feministas estamos en contra de los hombres, bla bla bla... Nosotras no estamos en contra de nadie, sino a favor de los derechos de las mujeres. Pero fundamentalmente de los derechos de una sociedad más justa, más igualitaria y libre de toda forma de discriminación. Dentro de las diferentes líneas de trabajo que desarrolla la casa, una de las líneas como bien decía Débora, es la investigación. Una de estas líneas tiene que ver con la elaboración del informe anual de femicidios en Argentina. Cuando comenzó este trabajo, nosotras decíamos… no puede ser que no se encuentre en ningún lugar cuántas mujeres son asesinadas anualmente en nuestro país.
Empezamos a mirar, a cuestionarnos y a pensar en las experiencias que  se fueron desarrollando en otros países y dijimos ¿cuál es el parámetro en el cual nos vamos a parar para poder hacer un informe estadístico?. Y empezamos a ver que los crímenes pasionales que figuraban en los titulares de los diarios podían ser extraídos para poder empezar a avanzar en esta realidad. Así fue que elegimos 120 medios de comunicación de todo el país y agencias del oficio. De periodismo de investigación, diariamente se consultan esta cantidad de medios. Pero no solamente se consultan, se hace también el seguimiento de cada uno de esos casos. Es un informe cuantitativo pero también es un informe cualitativo. Porque nosotros no queremos contar solamente una peli, queremos contar un historia, por eso es que los informes nuestros están divididos en dos. El cuantitativo, cada uno de los casos está desarrollado haciendo hincapié en la historia de esa víctima. Del victimario sólo se mencionan los datos suficientes como para poder incorporarlo en el informe cuantitativo... pero la realidad que queríamos contar, más allá de las estadísticas, era la historia de esas mujeres que hoy deberían estar aquí y que  lamentablemente no están. En ese esquema empezamos a hablar de cómo podíamos utilizar el informe de investigación también como una forma de exhibir socialmente. El femicidio para algunos países, el femicidio para otros… el femicidio tan conocido en el ámbito de la academia… ¿cómo hacíamos para utilizar esta herramienta para exhibir socialmente y empezar a colocar el significado de homicidio y violencia de género?,  para poder ir corriendo de lugar el crimen pasional, la mató por celos… todas las barbaridades que aún  todavía en algunos titulares se ven. La verdad es que nos fijamos determinados objetivos, sostener los informes de femicidios hasta que se supieran estadísticas oficiales. Porque es una forma de denunciar socialmente una realidad que hasta ese momento quedaba encerrada en el ámbito de lo privado. El tema de hacer los informes lo sacó al ámbito de lo público. Empezamos a trabajar fuertemente periodista por periodista, ¿el femicidio qué es? Bla, bla, bla, bla… el homicidio es el asesinato de una mujer en manos de un varón. Y esto que fue un trabajo muy, muy muy desgastante el primer año, tuvo sus frutos. Hoy por hoy, la gran mayoría de la sociedad ya sabe de qué hablamos cuando hablamos de femicidio. Ahora dentro del área investigación de la casa del encuentro cuando empezamos a hacer los informes de investigación y también basadas en la experiencia teórica y académica, la mayoría de nosotras veíamos también, la realidad que no estaba potenciada en ningún lugar del mundo. Esto tenía que ver con una realidad que Ada, que es la directora del informe, empezó a observar y empezó a decir: también matan varones y le dije es lo mismo. Pero a ver… decía… si llegamos a decir que también hay femicidio entre varones, las feministas nos van a saltar a la yugular y nos van a decir que estamos locas. Pero empezamos a problematizar y a discutir esta realidad que estábamos viendo, emanada de estudios. Entonces apareció la discusión, después de mucho tiempo, del femicidio vinculado. Porque lo que sí existe en el ámbito académico es el femicidio por condición, pero siempre está vinculado a una mujer o a una niña. Entonces ahí aparece el femicidio vinculado, y ¿qué es el femicidio vinculado?. Es aquel que se comente contra una  persona que intenta impedir el femicidio o aquella persona que es asesinada para destruir a ese objeto de posesión que es la mujer. Casos emblemáticos como por ejemplo este caso de este hombre que lleva a sus dos hijos en el auto, la llama a la mujer y le dice: “no los vas a ver nunca más” y se estrelló contra un camión, uno falleció, el otro sigue muy grave. También está este otro caso del contador, que la mujer va a la casa del abogado para  reclamar la cuestión del divorcio, el tipo entra y además de matarla a ella, mata al contador. Ese contador no hubiera sido asesinado, sino mediara una cuestión de violencia de género en el medio. Estas historias son de femicidio vinculado. Costó muchísimo esto de femicidio vinculado, hasta que fue el femicidio de Tomas Santillán, ahí los periodistas entendieron realmente. A partir de allí empezaron comunicar y a partir de allí la sociedad también empezó a entender qué significa femicidio vinculado. También en nuestros registros veíamos claramente de qué manera la violencia de género o la violencia hacia las mujeres, como nos gusta decir a nosotras, la realidad es que también tiene un impacto directo en todo el tejido social. Y tuvimos que empezar a pensar y a problematizar cómo hacíamos para mostrar cada uno de estos casos. Porque empezamos a pensar en todas las víctimas colaterales que hay detrás de cada femicidio. Porque lamentablemente todavía, aun hoy, para la sociedad, los femicidios son cosas de mujeres, no son cosas de la sociedad. No son tenidas en cuenta todavía, como una cuestión de derechos humanos, entonces dijimos ya está… vamos a empezar a hablar de la cantidad de hijos e hijas que quedan sin madre producto del femicidio. Se pensó también en incorporar la historia de esos niños que quedaron sin madre y que son víctimas colaterales, victimas mudas, atónitas, sin posibilidades de tener la alternativa a poder salir de esa situación en la cual suceden los problemas. Entonces hablamos de víctimas colaterales de una misma violencia. Para nosotras obviamente, las feministas, la violencia hacia las mujeres es una conducta aprendida, es algo que tiene que ver con una cultura, con un sistema en el cual las desigualdades estructurales que todavía coexisten entre varones y mujeres, justamente es esa desigualdad con la que sostienen la violencia hacia las mujeres, niñas, niños. Así fue como empezamos a hacer en el 2008 el primer informe de femicidio y cuando el equipo lo terminó y se quedó hasta las 4 de la mañana haciendo la impresión y todo…. le pusieron un moñito violeta y quedó arriba del escritorio de la casa del encuentro y yo les digo: “¿ustedes tienen idea de lo que acaban de hacer?”. No, nosotros hicimos un informe para saber cuántas mujeres habían muertas, y bueno efectivamente lo que hicieron fue un informe que tuvo un impacto directo en la sociedad, en las Universidades, en todos lados. Y no había…. Esto es un piso para nosotras, tener todo un trabajo terminado con las herramientas tecnológicas y los equipos que realmente pueden llevar adelante este trabajo, obviamente que es un piso. Pero es un piso muy grande, porque estamos hablando que hay una mujer cada 31horas siendo asesinada en nuestro país por violencia de género. Es un piso muy grande… estamos diciendo que en los últimos 7 años 1.808 mujeres fueron asesinadas en contexto de violencia de género y estamos hablando de que 2.196 hijos e hijas en los últimos 7 años quedaron sin madre. Y también quedaron sin padre porque, o los metieron presos en el mejor de los casos o incluso hasta se suicidan. Entonces ¿de qué manera impacta la violencia de género, que en este caso es el femicidio?, en todos los medios sociales. Cuando nosotras siempre decimos que la casa, para algunos organismos… tenemos una cosa muy importante porque nosotros estamos de los dos lados de la violencia. Por un lado conocemos sus formas, por el otro lado, al generar asistencia a las víctimas de violencia, sabemos realmente qué es lo que está pasando, qué es lo que hay y qué es lo que no hay. Cuando se decide hacer el informe de femicidios, se decide ampliar el informe, ya era una cosa que no dábamos abasto. Entonces ahí se forma el laboratorio de femicidios. El laboratorio de femicidios en la Argentina lleva el nombre de una víctima que para nosotras fue emblemática: Adriana Marisel Zambrano ,28 años, de Palpalá, Jujuy. Fue asesinada a golpes en la cabeza con un nivel de albañilería. El Juez decretó que el marido la mató sin intención, y lo condenó a tan solo 5 años de prisión. Eso fue en el año 2008. El femicida hoy está libre y saben lo que está haciendo… está recamando la tenencia de su hija que en ese momento tenía nueve meses y que dejó al lado del cuerpo muerto de su madre. Hoy por hoy, estamos peleando justamente por una Ley que sea concreta, de la perdida automática de la patria potestad del homicida  condenado. Esto es a favor de los derechos del niño. Si ustedes como psicólogos escucharan a una chiquita de 7 años, que tiene ahora, y te dice: “yo a mi papá le tengo miedo, pero la jueza me obliga a verlo 2 veces por semana”. ¿Ustedes qué piensan que puede generarse en la psiquis de ese niño o de esa niña?. Terrible ¿no? .Y también se involucra la familia porque la familia está pidiendo la tenencia de esta niña, la familia de Adriana, de la víctima. Y la jueza sigue insistiendo que hay que vincularla con su padre. Estas cosas que pasan.  Es por eso que este observatorio lleva su nombre. Y la verdad es que empezamos a hacer todos esos informes y analizamos cuestiones que se van repitiendo sistemáticamente. Así como también se repite cuando lo comparamos con la angustia, hay características que se sostienen y que se dan de forma muy homogénea a lo largo y ancho del país. La realidad es que estamos diciendo que más de 200 mujeres mueren… el otro día estaba escuchando una noticia que decía que habían matado 200 personas por temas de seguridad y está mal obvio. Pero no se escucha la indignación popular por más de 200 mujeres anuales, casi 300, como fue en el año 2013. En un informe que fue en el año 2014 que estaba elaborando la justicia… y esto de ser feministas, cuestionadoras, nos llevó a pensar ¿qué pasó en 2014 en Argentina?. ¿Ustedes qué se imaginan que pasó el año pasado en Argentina? Durante el mes del mundial, cuando históricamente el promedio era de 20 a 22 femicidios, mágicamente bajó a 12 femicidios. Esto nos permite analizar la estructura patriarcal, ese varón violento que tiene como un dispositivo el control el aislamiento, el control de esa mujer que considera de su propiedad, por 35 días la pelota fue más importante que seguir destruyendo a esa mujer. Lo mismo pasó el año que fue lo de la gripe A, también en esos dos meses hubo una baja. También este tipo de cuestiones tiene un impacto, así como también las fechas emblemáticas como el día de la madre, como el día internacional contra toda violencia de género, como el 8 de marzo, previo y posterior a esa fecha, como también las fechas cercanas a las fiestas, también hay un incremento de índice de femicidios. Nosotras lo hacemos como un análisis muy casero, en realidad eso va a salir en el otro libro que va a salir el año que viene. En realidad nosotras pensamos en que algo pasó que tiene que ver con que… en las fiestas por ejemplo… en las fiestas la mujer vuelve a tener el protagonismo que tiene que ver con ser el centro de alguna forma de la historia. Así como el día de la madre, la mujer como centro y en el fondo ese varón que pierde ese poder, aunque sea momentáneo. También pasa que durante el fin de semana no hay consultas por ejemplo y el día lunes las mujeres consultan… porque se tuvieron que bancar todo el fin de semana de violencia. Este tema de las fechas emblemáticas, sí nos da para pensar. El 25 de noviembre, día emblemático para la lucha contra la violencia de  género lamentablemente año a año tenemos un femicidio emblemático por la barbaridad que les hicieron o varios femicidios en ese mismo día. Eso tiene que ver también con una conducta del agresor. De todos estos análisis que fuimos haciendo también pudimos observar cuál es el lugar más inseguro para una mujer… para una niña, para un niño… el lugar más inseguro es su propia casa, la vivienda compartida, la vivienda del femicida. En el lugar donde se supone que una mujer con sus hijos deberían estar más seguros, es el lugar más inseguro. Así vemos… no los quiero abrumar con los números, les estoy diciendo las conclusiones de todo esto. También pudimos analizar, que atraviesa todas las clases socioeconómicas y culturales del país, que también va cambiando todos los mitos que tenemos construidos socialmente. Lo vemos claramente en los últimos femicidios, donde tenemos el caso de Kiara, 14 años en un pueblo de la provincia. Entonces ahí empezamos a ver cómo a lo largo y a lo ancho de nuestro país los homicidios se producen y que también tienen una proporción entre cantidad de habitantes y cantidad de femicidios. Por ejemplo el año pasado en la provincia de Salta hubo 21 femicidios, es una barbaridad para una provincia de tan baja densidad de población. La provincia de Salta se declaró población de emergencia, pero claro… se olvidaron de agregarle programas, dispositivos, presupuestos… y de hecho cuando hicimos el ranking por cantidad de habitantes en realidad la provincia de Salta quedó en segundo lugar. En primer lugar estaba la provincia de Buenos Aires y le siguió Salta, es una barbaridad. Y así seguimos haciendo estudios,  todos los años…. Dividimos por rangos de análisis. Uno de los rangos tiene que ver con las edades de las víctimas, obviamente que tenemos desde 3 meses hasta 90 años.  Claramente identificamos que la gran mayoría tienen entre 29 y 50 años, la gran mayoría. Con un número preocupante de las víctimas, que tienen entre 12 y 16. Esto sí es llamativo, porque estamos hablando de un incremento que tiene que ver con el embarazo adolescente,  pero que también tiene que ver necesariamente con los noviazgos violentos. Comenzamos desde muy temprana edad con este sistema de relaciones  de poder. Las edades de los homicidas… aquí si se repiten las edades de 19 a 50 como mayoritariamente, pero las edades de los homicidas van de 13 a 90 años. Ese es el rango de edades de los asesinos.  Por favor, si alguien quiere preguntar algo adelante…
- Alumna 1: ¿Por qué ustedes piensan que el ingreso fuerte está entre 19 y 50 años de edad?
- Fabiana: Bueno en realidad hay una cuestión que también tiene que ver con la rutina, es una edad en la que se establece afectivamente con otro, cuando el hombre va desarrollando el camino del noviazgo, la pareja, la  maternidad y a los 50 años desaparece esa etapa de plenitud reproductora de la especie de la mujer. En general ya los hijos ya son mayores de edad, ya están grandes y todo lo que sería la etapa de la edad fecunda de la mujer… esa es la edad más peligrosa para el varón, porque para él el objeto de posesión es en ese rango de edades, tiene la posibilidad de perderlo a ese objeto. Y es verdad como a partir de los 50 vos vas viendo cómo va bajando, porque también va perdiendo el interés… en realidad quién te la va a sacar ahora a esta vieja, ya está…
- Alumna 2: ¿Piensan que hay algo que tiene que ver  con la reproducción también?
- Fabiana: Sí, claramente y lo vemos en los casos en que la mujer ha sido asesinada embarazada, son notables los casos de mujeres embarazadas que son asesinadas en contexto de violencia de género. El argumento del agresor una vez que las mata, es que estaban esperando un hijo que no era de él. Este tema de poseer el útero, el cuerpo, la vida, la reproducción, es muy fuerte. Hasta tal punto que en todos los casos que tenemos hecho el seguimiento… en todos los casos ése embarazo era de él. La fantasía que construye el violento… y los relatos que van construyendo para justificar su misma violencia es realmente…. El otro día escuchábamos que una víctima decía a un periodista…. Vieron que ustedes obviamente conocen el ciclo de la violencia, y una de las victimas decía: “llega un momento que ya ni siquiera te pide perdón”. O sea que llega un momento que ya ni ese ciclo existe más. En realidad esas mujeres en situación de violencia son las que padecen en cotidiano la manipulación del violento.
- Alumno 3: Una pregunta… Si bien un homicidio se precede por el aislamiento de la víctima… Si hay un circulo inevitable en la familia… en el caso de ella y él, ¿qué papel puede tomar la familia?… no se pueden aislar...
- Fabiana: ¿A la familia de la víctima te réferis  vos?
- Alumno 3: Sí. De ambos.
- Fabiana: Ah de ambos. Bueno en general, la familia del agresor tiene obviamente, casi seguro  historias de compulsión, de violencia. Por lo general la familia del agresor lo que hace es negar esa realidad, es despreciar  a la mujer, que por ahí le dice: “tu hijo me está pegando”…. “no…  vos porque sos  terrible, él es muy bueno…” Hay una actitud negadora total. Hay algunos casos en que lo han entregado al femicida, pero la gran mayoría tiende a negar. O no la ve, o no quiere verla, pero la niega y defiende al violento. La identifican como a una enemiga a la víctima. Y la familia de la víctima… o sea pueden haber varias cuestiones… pueden haber familias que nieguen la realidad porque el varón agresor se ocupó de separar a la familia de la víctima, dejándola en una situación de vulnerabilidad total, dejándola sola.  También hay otro sistema en donde la familia prefiere negarlo, prefiere esperar. Y después existen otras familias que buscan ayuda pero no saben cómo. En esas situaciones nosotros ideamos un dispositivo dentro de la casa del encuentro que es el grupo para familiares, amigos y amigas de las victimas… donde se trabajan diferentes estrategias que tienden a generar el acercamiento entre la familia, los amigos, las amigas y las víctimas. Para poder generar acercamiento y no alejamiento, para desterrar la estrategia del agresor que es el aislamiento. Entonces ése dispositivo para nosotras fue muy importante porque fuimos viendo cómo entre las mismas familias van construyendo estrategias… obviamente que estas familias están coordinadas por profesionales… pero van construyendo ellos mismos las herramientas. El principal problema que tenes con las familias de las víctimas que, sí son conscientes del peligro y  la situación que viven es de gran ansiedad. La ansiedad porque la victima entre en razón… y lo primero que  trabajamos es que tiene que respetar los tiempos de ella y que tiene que trabajar su misma ansiedad. Hay un caso que por suerte tuvo un final re contra feliz, estuvieron trabajando 2 años el padre y la madre, todas las semanas venían al grupo y terminó mejor de lo que se pensaba, el papá de ella tenía algunos rasgos violentos… se empezó a trabajar a través del grupo. Y la historia tiene más final feliz todavía, no sólo que la hija se separó del violento si no que a su vez su mujer dijo públicamente que ella había recuperado dos cosas: había recuperado a su hija y había recuperado al compañero del cual ella se había enamorado y por el cual había perdido el interés. Así que esa experiencia se tradujo en un trabajo concreto, pero pasaron dos años, no fue fácil. ¿Te respondí más o menos la pregunta?
- Alumno 3: Sí, muchas gracias.
- Alumna 4: ¿Cómo definen a la víctima de violencia?
- Fabiana: Bueno nosotros definimos a la víctima de la violencia como una sujeta que tiene que ser atendida desde un punto de vista que tiene que ser integral. Su historia, la situación que está padeciendo en este momento. La mujer angustiada, desordenada, negadora, que acudía a nosotros… ¿cómo hacíamos para tener en esa entrevista un abordaje que nos permitiera construir una estrategia conjunta con esa mujer?, habitualmente las víctimas tienen una ventanilla donde, lo llaman al Juez para hacer la denuncia, otra ventanilla para ir al psicólogo, otra ventanilla que tiene que ver con lo social… para nosotras la atención multidisciplinaria es indispensable, porque hay un cambio concreto de las situaciones en la que la mujer llega al espacio de la casa del encuentro. Cada mujer que llega a la casa del encuentro es atendía en el mismo momento por una psicóloga, una trabajadora social y una abogada. Este abordaje nos permite que cada una desde su disciplina pueda generar en una misma situación las diferentes miradas, las cuales permiten que después este equipo,  junto a la mujer, puedan definir cuál es la mejor estrategia a seguir. Porque es mentira que siempre que la mujer está en una situación de violencia tiene que denunciar, la mujer que está en situación de violencia tiene que estar fortalecida para hacer la denuncia. Salvo que sea un caso inminente. Pero si no tenemos en cuenta la historia de la mujer, el contexto en el que se desenvuelve, los marcos afectivos que tiene cercanos, que la puedan ayudar a sostener… es muy difícil que la mujer haga la denuncia y la sostenga y realmente vaya transitando el camino de separación del violento. Además nosotras trabajamos con un concepto que tiene que ver con el feminismo popular de construcción de saberes. Nosotras como profesionales del equipo de la casa del encuentro nos paramos al mismo nivel de la mujer, hablamos en un mismo nivel y fundamentalmente generamos estrategias que nos permitan acercarnos a esa mujer. Una mujer llega a la casa del encuentro nos saluda con besos, nos da su nombre… en qué te podemos ayudar… le damos un vaso con agua y luego es atendida. Y cuando hablamos de construcción de saberes es porque las profesionales del equipo vamos a poner a disposición de esta mujer todo lo aprendido pero, a su vez por cada mujer que atendemos, ellas ya tienen su historia. Entonces el abordaje tiene que ver con la horizontalidad, porque lo que deseamos es aprehender todas las potencialidades y fortalezas que tiene y no pararnos en el lugar de “vos tenes que hacer…”. Ella sabe lo que tiene que hacer, tenemos que buscar la manera de que ella lo encuentre, lo agarre, lo atrape y pueda salir adelante. Esta es nuestra posición, la manera en que nosotras trabajamos y nos sentimos cómodas. Algunas mujeres salieron, otras volvieron con el agresor, pero otras no volvieron. Entonces para notros una llamada por teléfono o una visita tiene el mismo grado de importancia. Lo importante es cómo trabaja el equipo cuando una mujer se va, a través de la ficha de registro se van pensando diferentes estrategias…por ahí si dos equipos están trabajando en cosas distintas y como estamos en un ámbito chico de trabajo y por ahí si una de las abogadas que está ahí dice: “no sería mejor por ahí plantear esta otra alternativa…” no es que la otra doctora le va a decir: “no… cómo me vas a cuestionar lo que yo estoy diciendo”. Porque para nosotras el orden es distinto, primeo está la víctima. Ahí somos activistas profesionales que trabajamos con cada una de estas mujeres. Acá hay muchas compañeras que forman parte del equipo de voluntariado y creo que no estoy diciendo muchas mentiras ¿no?
- Alumno 5: ¿Te puedo hacer una pregunta? ¿Qué rol cumplen los contenidos audiovisuales… porque si bien focalizan en la seguridad… cómo afecta esto para su seguridad?
- Fabiana: Bueno no cabe la menor duda de que tu pregunta es más que buena. Los roles de las mujer en los medios de comunicación lo único que hacen es reproducir esquemas de violencia contra la mujer, y que además tiene un poder de penetración terrible porque está todo el día en las casas, cuando hay hijos e hijas adolescentes. Ahora vos fíjate que la Ley de violencia de género incluye la violencia simbólica, que sería esto y lamentablemente no está reglamentado ése artículo. Sí, se puede aplicar la Ley de medios que también está contemplada. Pero no solamente en programas como Tinelli, a veces es terrible la forma en la que se abordan los homicidios, es una violación permanente tras otra al cadáver de esa mujer o sea esa mujer padeció violencia de género y después la siguen violando. Porque investigan el policía, que si tenía novio, que si no tenia, es terrible. Eso también habría que sancionarlo. Entonces se sigue sosteniendo este mito de que bueno… era medio rapidita, mira cómo se vestía… y te lo ponen adrede. Como todavía te ponen adrede “crímenes por amor” en el diario, yo no lo podía creer. Entonces estamos mandando mensajes a la sociedad que lamentablemente son totalmente contrarios a la lucha contra la violencia de género.
- Alumno 5: Perdón, quizás nos salimos un poco de tema pero ¿Qué se hace con respecto al hombre? El hombre que pega, que lastima… queda libre para atacar a cualquier otro. ¿Se toma alguna medida con respecto a eso, o se intenta al menos?
- Fabiana: Mirá yo te voy a contestar desde lo que nosotras sabemos. En el caso de los varones violentos no existe dispositivo de trabajo grupal para varones violentos. El problema que nosotras detectamos es que…  incluso hoy salió en una nota no me acuerdo de qué diario que decía que el 80% de los varones que iban a estos grupos iban porque eran enviados por la justicia. O sea… estos varones muchas veces utilizan este mecanismo en el cual la justicia los obliga a ir a los cursos. Como una manera de aprovechar ese periodo de meseta para explicarle a la mujer que él está cambiando y está haciendo todo lo que le están pidiendo porque él la ama. Ahora bien… qué recomendamos nosotras… hay un 20% de esos varones que efectivamente van per se. Esos varones que realmente reconocen que el problema lo tienen ellos, esos varones seguramente con un buen trabajo puede ser que empiecen a modificar conductas. Hasta ahora lo único que sabemos que se está trabajando es lo que tiene que ver con las técnicas de control de ira. Que en realidad está bueno porque  por lo menos no llega al golpe. Trabajamos con todas las otras violencias, que son las micro-violencias, la violencia cotidiana.
- Alumna 6: Ahora… ¿qué hacemos con esa persona? Porque volvemos a lo mismo, o sea seguimos teniendo gente que va a seguir maltratando.
- Fabiana: Bueno como yo soy de la sociedad civil y puedo decir cualquier cosa, jajaja (risas). La realidad es que no está trabajado el tema de… el sistema carcelario general como un espacio de rehabilitación, de adaptación. Nosotros lo que vemos es que vuelven a repetir la misma conducta. Tendría que haber algún análisis o estudio, eso lo harán ustedes como psicólogas o psicólogos. Para poder ver de qué manera se modifica esto. Por ejemplo… para nosotras un violador, discúlpenme, no tiene retorno. Ahora bien, lo que sí puedo decir con respecto a este tema es que para nosotras el tema no es,  ¿cómo trabajamos con los varones?, está bueno que empecemos a problematizar esta cuestión pero cuando ya está la base de la violencia de género… no es nada simple trabajar en esto cuando seguimos las mujeres en un contexto de cultura machista, cuando hablamos de machismo no sólo hablamos del varón, estamos hablando de nosotras mismas las mujeres. Somos terribles machistas también, reproducimos el sistema. Nosotras lo seguimos reproduciendo, no sólo los hijos e hijas si no también nosotras mismas. Entonces para nosotras en realidad los trabajos se tienen que dar… por un lado desarrollando alternativas o propuestas para la cuestión de la violencia del varón. Pero la realidad es que para nosotras la única solución es modificar la currícula educativa del jardín hasta la universidad. Obviamente este resultado no lo vamos a ver este año, pero vamos a tener en 20 años toda la información que va a tener otro valor.
- Alumna 7: Está apareciendo por Facebook… que de igual forma que ningún pibe nace para chorro, ningún pibe nace violento, sino que se los educa, se les permite y se les legitima, retomando la línea que decías recién… entonces es muy importante los sistemas de crianza. Este es un punto… El otro punto… un varón violento no es un problema psicopatológico. (Aplausos). Es un problema del ejercicio de poder y de legitimidad del ejercicio de poder. En todo caso si se hace un trabajo en el campo de la subjetividad, es para reconstruir la hegemonía.
- Fabiana: Sí, aplaudo porque nosotras creemos que no es un problema psicopatológico.
- Alumna 8: ¿Cómo se manejan las urgencias?
- Fabiana: Bueno fundamentalmente cuando hay un riesgo inminente y el equipo interdisciplinario así lo determina, se trata de dar toda la información posible, económica, de vivienda, de entorno, tratamos de… si hay un ataque inminente tratamos explicarle qué significa hacer la denuncia y que significa su propia vida. El valor de su propia vida y de la vida de sus hijos. Hay una abogada que habla el mismo idioma que esta mujer, entonces para esta mujer el acceso a justicia es real porque si yo no entiendo cuáles son mis derechos no sé cuáles son mis derechos. Entonces se trabaja mucho con los abogados, cuando salen de la Facultad no saben el trabajo que hay que hacer para cambiarles el cassette. Pero después realmente la mujer entiende lo que le estamos transmitiendo. Le explicamos todos los pasos que ella necesariamente debería ver y cómo se procede. Primero hacer la denuncia, pedir medidas de protección, qué significan las medidas de protección, cual es la dimensión, cual es el tiempo, qué es lo que van a tener que hacer después y también se le explica que tiene la posibilidad de un refugio, aunque no son muchos, pero también se le explica qué es un refugio también. Se le explica que significa también, para que ella pueda tomar la decisión. Es decir, se les dan todas las herramientas, también se les habla de todos los riesgos que está tomando y si no toma la decisión en ese momento, lo que sí hace el equipo es que tenga armado un equipo de emergencia. Para que si vuelve a pasar esto porque ya los ciclos son cada vez más cortos, tenga preparado un bolsito en el que tiene que tener los documentos, algo de plata, una muda de ropa para ella y para sus hijos,  bien escondido para que en el momento de que no le quede otra que disparar, escape. Una vez pasó una cosa muy loca, la mujer llega con sus dos hijos. Cuando llegó a la casa del encuentro hacia un frio terrible, se vino con lo puesto, estuvimos buscando ropa porque tenemos algo ahí, le dimos ropa y un poco de comida porque no había comido antes. Cuando va a hacer la denuncia, le dicen que no tiene documento. Y no tiene documento porque se escapó. Así que nosotras trabajamos en ese punto, también sabemos que puede pasar que la mujer no acepte ir a pedir ayuda en ese momento, pero dejamos algunos tips. Un teléfono de emergencia por cualquier eventualidad. Todo lo que hemos logrado, Ley 26.485, línea 144, que no es de denuncia, es de asistencia e información. Lo publican mal en los medios, ponen denuncia pero no es denuncia, es asistencia e información en todo  el país. ¿Ahora qué es lo que falta?, falta una visión integral de lo que es ser víctima de violencia de género, en todos los estamentos en los cuales se trabaja la violencia de género. Falta entender la problemática como una problemática en la cual el Estado va a tener que estar presente en forma sostenida en el tiempo, para lo cual se necesitan los dispositivos desde una mirada integral interdisciplinaria. Entonces los pocos refugios que hay, en realidad terminan siendo depósitos porque los equipos que hay son insuficientes y en general están muy descuidados y muy maltratados. Faltan lugares de día, hogares que tengan que ver con la capacitación, con el fortalecimiento, el empoderamiento de esa mujer, con que pueda sostener una terapia en el tiempo, falta patrocinio jurídico gratuito en todo el país para mujeres víctimas de violencia de género, falta todo lo que tiene que ver con domesticar las causas civiles por violencia de género. Entonces la justicia, que tiene un coágulo en el cerebro, obliga a la vinculación de esos chicos con el padre violento. Entonces la mujer dice que no se los va a entregar porque hay una medida de restricción, qué es lo que hace el violento… la denuncia por impedimento de contacto. Son los modos violentos del patriarcado o del machismo… hay una estrategia que encontraron los violentos y abusadores para seguir reproduciendo el esquema de que es la mujer la que le llena la cabeza a ese chico condicionando… yo lo explico en mi idioma, obviamente que hay una  explicación más académica… entonces ¿qué es lo que hace el violento?, acusa a la mujer de que es la culpable de que él no pueda relacionarse con su hijo, es decir que impide el normal vinculo parental. Y la realidad es que lamentablemente la justicia lo toma y entonces parte de una concepción… un hijo necesita de un padre y de una madre. Por ahí nos toca alguien más avanzado y puede decir dos padres, dos madres… pero no se le puede sacar la figura paterna al hijo. No importa de qué figura paterna estamos hablando y en estos casos es terrible cómo la justicia hace caer todo el peso en la mujer. Y nosotros hemos visto caso en donde la mujer hace denuncia de abuso, con dibujos hecho por sus hijos donde claramente se ve… se manifiestan indicadores de abuso sexual y el juez le quita la tenencia de esa madre. Y se los entrega al padre y se le impide el contacto de la madre con el hijo, este síndrome de alienación parental realmente es un tema que nos está generando un retroceso muy grande, así como la presencia de muchos padres que son abusadores de sus propios hijos que son los que dicen que el 40% de las denuncias que hacen las mujeres son falsas. Y que se están haciendo eco en algunos medios de comunicación. Incluso hay abogados que defienden a los violentos.
- Alumno 9: ¿Qué pasa en el caso en el que se puede comprobar que la mujer está mintiendo para quitarle la tenencia de su padre?, ¿qué herramientas tienen para detectar que no está diciendo la verdad?.
- Fabiana: Hay elementos en la forma del relato, en la forma corporal, la forma en que desarrolla todo su relato, las preguntas que obviamente se hacen para tener mayores precisiones, si coinciden en el relato fechas, elecciones, vínculos. Es medio complejo. Cuando te llega una víctima real, la gran mayoría, ya desde que entró te das cuenta que no miente. Lo que si nos pudo haber llegado a tocar es que ralamente en la situación de violencia tenga una situación psiquiátrica. Si puede haber una confusión con problemas psiquiátricos, por ahí se mezcla todo una realidad y ahí lo derivamos. Nosotras trabajamos con la gran mayoría. Los hombres también son víctimas de violencia de género, puede haber algún caso en que suceda una situación así. El peligro en este tipo de problemas es primero desconfiar… y a partir de ese prejuicio de que puede haber mujeres que mientan y nos paramos desde ese prejuicio. Entonces como profesionales nos  paramos desde un lugar de desconfianza y la realidad es que cualquier persona que trabaja en violencia de género… profesionales y no profesionales… con el simple hecho de preguntarle un nombre, mirarla a los ojos, ver su actitud corporal, en ese momento te das cuenta que esa mujer es víctima. No hay duda, no hay mentira, obviamente en los niños menos todavía.
- Profesora Débora Tajer: Por eso hay que formarse en este tema…  no es solamente tener voluntad, hay que formarse y con la formación de un campo específico uno puede discernir. Fabiana nos gustaría que antes de agradecerte y despedirte, hagas la invitación para el día miércoles 3 de Junio.
- Fabiana: Bueno quiero recordarles este evento, el 3 de Junio va haber un evento histórico en nuestro país, va a ser la primera movilización masiva contra el femicidio.  Esta convocatoria salió a partir de una iniciativa de un periodista donde se generó este clic en la sociedad porque ya estamos hartos y hartas de femicidios, así que el día 3… concentración frente al Congreso de la Nación, donde la consigna es “Ni una menos” y es un acto que tiene toda la participación de la sociedad, esta manifestación no es contra nadie. Es una actividad para decir “basta de femicidios” pero también se van a hacer 10 propuestas concretas de políticas públicas, donde todos aquellos candidatos que se adhieren a la foto con “ni una mujer más” le vamos a hacer la contra campaña de la foto, a la firma. Asi que les vamos a hacer firmar a cada uno.
Aplausos de todo el público.
 - Fabiana: A las 17 hs. vamos a estar ahí. Va a ver grupos, va a ver lectura, van a haber intervenciones pacíficas. No van a haber discursos no va a haber nada, lo único que van a estar van a ser los familiares de las víctimas. La idea es mostrarle al mundo y a toda la clase política de todos los sectores políticos, que este tema también es un tema de derechos humanos y que este tema también nos preocupa a todos los argentinos y argentinas. Los esperamos.
- Aplausos y cierre de la conferencia. 



ANÁLISIS

Ejes de análisis:
1. Género, relaciones de poder e imaginarios sociales
2. La casa del encuentro como síntoma social
3. De la lectura de textos al trabajo por un mundo basado en la igualdad de derechos, oportunidades y trato para mujeres y varones.

1- Género, relaciones de poder e imaginarios sociales

Tomamos este primer eje de análisis para pensar a la Casa del Encuentro (CE) sosteniendo la idea de que existe una relación inseparable entre los imaginarios sociales y las prácticas que se llevan a cabo dentro de nuestra sociedad. Por lo tanto planteamos que los imaginarios sociales  dan un sustento determinado a las maneras de concebir a la mujer, al hombre, a sus prácticas, a sus modos de relacionarse, a los  modos de pensar al género, es decir, en efecto  determinan y legitiman las relaciones de poder que se viven  en la sociedad patriarcal. Por eso cada uno de estos conceptos: género, relaciones de poder e Imaginarios sociales; serán abordados de manera tal que la lectura que proponemos a partir del encuentro con la institución sea comprensible para aquellos que no han transitado por la experiencia.
Por un lado, uno de los principales objetivos que nos proponemos, es poder enfocar todo lo que implica social, política e históricamente pertenecer a un género determinado. Lo que implica ser hombre, ser mujer en la sociedad actual y a lo largo de la historia. El género es una construcción histórico - social en relación a los modos de ser y hacer en una sociedad. Estos modos de ser mujer y ser varón no son ingenuos sino que están sustentados por relaciones de poder que tienen su origen en el sistema patriarcal. Históricamente se caracteriza a la mujer como frágil y en posición de desigualdad con respecto al hombre, se presenta a la mujer como el sexo débil y al hombre como el sexo fuerte, asociado al poder, al valor, el dominio de la razón y su circulación en el dominio público, por contraposición a la mujer, relegada al dominio privado, atravesada por el mito de la pasividad femenina, mujer sumisa necesitada de protección masculina. De igual forma, encargada de la supervivencia de la especie y encerrada en el mito Mujer= madre, razón por la cuál es la encargada del hogar, de la crianza de los hijos y el hombre cumple en el ámbito doméstico el rol de proveedor. Pese al gran avance de la mujer en el ámbito público y a la fuerte lucha de estas  por nuevos espacios y derechos, el impacto del poder patriarcal mediante la hegemonía de lo masculino está aún hoy presente y es por esta razón que es pertinente analizar las relaciones desiguales de poder entre hombres y mujeres, dado que estas desigualdades pensadas como  inequidad de género son las que sustentan la violencia de género, entendida como la violencia ejercida por los varones contra las mujeres en su deseo de poseerlas, dominarlas y mantener su poder.   
El ejercicio de poder masculino se puede ver o inferir mediante los problemas que las integrantes de la casa nos han compartido. Por ejemplo muchas mujeres tardan en tomar la decisión de escapar de la violencia de su pareja ante el desamparo económico que esto implica. La amenaza a los hijos ante la denuncia o huida puede también configurarse como ejemplo, así como también la dependencia afectiva y la creencia alimentada por el agresor de que “nadie va a quererte más que yo”, “nadie va a creerte si me denuncias”, o la violencia psicológica ejercida a través de  frases como “tu trabajo es cuidar a tu marido y tu familia”, “acá el que mantiene la casa soy yo y vos no vas a trabajar”, “sos mi mujer y tu obligación es complacerme sexualmente”,  todas estas frases conviven en el imaginario social  Y se sostienen desde los discursos de poder, cosifican a la mujer como objeto de uso del hombre y no le permiten asumirse como sujetos de derecho. Nos dice Alejandra Lauría en la primera entrevista algo tan obvio como obviado que requiere de la justificación para ser visibilizado y considerado: “no por ser mujer estamos en una situación de inferioridad, y no por ser mujer nos tienen que matar, violar o golpear, amenazar y hostigar, ni nada.”. Nos invita esta frase, que hasta parece ingenua, a pensar en las relaciones de poder instituidas entre los géneros. Seguramente todos, o por lo menos la mayoría, coincidimos y adherimos con lo expresado por Lauría, no justificamos de ningún modo la violencia en contra de la mujer y justificamos por diferentes y variadas razones su derecho a un trato justo, respetuoso e igualitario. Pero no se nos ocurriría de este mismo modo justificar dicho derecho en el hombre, podemos incluso considerar absurda esta mención y las razones nos resultan obvias, tanto que no es necesario exponerlas, inmediatamente el lector habrá hecho un repaso de las mismas, un recorrido por todos aquellos instituidos que, partiendo desde la temática abordada nos posicionan al respecto. Dice Bourdieu que “la fuerza del orden masculino se descubre en el hecho de que prescinde de cualquier justificación” (Bourdieu, 2000). En la expresión de Lauría en la que no podemos dejar de leer una denuncia, haciendo un recorte de la misma, tampoco dejamos de leer la afirmación de un instituido sostenido en la visión dominante de lo masculino sobre la división de los géneros: “por ser mujer estamos en una situación de inferioridad”. Esta afirmación se sostiene en los discursos y las prácticas, los habitus, que construyen y replican modos de valoración que se internalizan modelando la subjetividad.
De acuerdo a Bourdieu la dominación masculina en la división de los géneros es fundante de la sociedad (Bourdieu, 2000). Podemos observar esto desde la religión en nuestra cultura judeocristiana, en la narración bíblica que todos conocemos de la creación del hombre y la mujer y las causas y consecuencias de la expulsión del paraíso. Desde la ciencia misma que para diferenciar a la especie humana de las demás especies animales la denomina hombre, omitiendo lo femenino. Esta forma de racionalizar y categorizar, es denominada violencia simbólica, desde esta violencia que no es física el dominador se sostiene como tal con la complicidad involuntaria del dominado al que se presenta una verdad dada como tal y que sin consciencia de ello convalida y replica. La violencia simbólica impide cambiar el sentido esencial que se le otorga a ciertas prácticas sociales que definen los roles entre los géneros, pero la posibilidad de pensar esta violencia permite cierto margen de libertad que posibilita hacerla visible.
La casa del Encuentro se convierte, conjuntamente con otros, en un espacio desde el cual comenzar a pensar esa violencia simbólica que permite cuestionar y confrontar aquellos instituidos que desde la construcción de género sostienen a la mujer en posición de inferioridad.
Si, con las limitaciones obvias de lo que significa definir y realizar el análisis de un campo , intentamos a groso modo hacer un recorte del campo “género” con el fin de acomodarnos a la conceptualización de campo que da Bourdieu. Campo como un sistema de relaciones y posiciones que están definidas objetivamente y no son sin conflicto, es decir, que el entramado de este sistema de relaciones se da en medio de luchas de poder tanto sea por ganar o mantener un lugar o posición dentro de ese campo, intercalándose entre momentos de mayor colaboración y momentos de mayor conflicto (Bourdieu, 2000), lo que se observa cuando Ada Rico, durante la segunda entrevista, nos dice que la incorporación de la palabra femicidio como modo de nombrar y visibilizar una situación hasta el momento invisibilizada “se ha logrado a través no sólo de la casa del encuentro sino de las distintas organizaciones de sociedad civil que trabajamos esta temática”. Partiendo de este recorte y tomando que la incorporación de la palabra femicidio se sostiene en la acción de las distintas organizaciones o agentes que se dedican al tema, podríamos señalar, desde la temática de la cual se ocupa, a la institución La Casa del Encuentro, como uno de esos agentes en estos momentos en colaboración con los otros.
En algún momento durante el transcurso de su conformación, la institución entrevistada, ante la falta de estadísticas oficiales, comenzó a realizar el seguimiento de los diferentes casos de femicidio cuando estos no eran considerados todavía como tales y se los entendía como el resultado de actos pasionales, dice Ada Rico “las únicas estadísticas que hay en Argentina son las que llevamos nosotras adelante desde el observatorio… monitoreamos más de 120 medios Nacionales, Provinciales, Locales… Todo a través de internet por supuesto… está dividido por zonas el país y todos los días hay que revisar los casos que van saliendo en cada zona… ahí se van recopilando los datos y después se hace el seguimiento de ese dato. Porque una cosa es la noticia madre y después qué es lo que va pasando con ese caso, hasta poder llegar al informe y determinar si es un femicidio”. Este observatorio que emblemáticamente lleva el nombre de Adriana Marisel Zambrano, una mujer de 28 años, asesinada a golpes en la cabeza con un nivel de albañil por su marido, al que el juez condena a sólo 5 años de prisión considerando que la mató sin intención. Desde su creación y elaboración del primer informe de femicidio en el año 2008 a la fecha, este observatorio, es el que va acumulando año tras año los datos de las mujeres asesinadas.
Posiblemente sin proponérselo, con la acumulación de estos datos que transformaron en estadísticos y desde los cuales comenzaron a informar a la sociedad a través de los informes elaborados y compilados en un primer libro de distribución gratuita , considerando además que es la única institución que asumió el compromiso de realizar este arduo trabajo, no sólo desde la demanda en tiempo, sino por el desgaste y agotamiento emocional que conlleva, como refiere en la primera entrevista Alejandra Lauría: “Nosotras contamos mujeres que son asesinadas, no es que contamos mujeres que salieron en libertad… Eso implica saber, quién era la mujer, que edad tenía, cuántos hijos tenía, como era la situación en la que estaba de que forma la mataron, como la encontraron…”, van posicionándose como referente de otras instituciones, de medios masivos de comunicación. Su dedicación a la temática la convierte en una institución de consulta cada vez que un nuevo caso de femicidio es noticia. Comienza a instalar en la sociedad un nuevo término con el que nombrar los asesinatos de mujeres muertas en manos de un hombre por su condición de mujer. De este modo va afectando el campo, instalando nuevas prácticas, Habitus, que se irán internalizando y conformarán nuevas subjetividades, hoy todos los medios hablan de femicidio, en el Código Penal , la ley 26.791 , lo incorpora en el inciso 11, e incluso instalan un concepto que toma la mencionada ley en otro inciso: “el inciso 12 es, lo que La Casa del Encuentro definió y después circuló por todos lados, el femicidio vinculado.”. Bourdieu llama Habitus a la internalización de la estructura del campo, una vez la subjetividad está socializada. Se realiza en el proceso de incorporación de modos de valoración y disposiciones que se van asumiendo, incorporando e internalizando en la relación con los demás y va construyendo la subjetividad.
Siguiendo a Bourdieu quien dice que “un capital o una especie de capital es aquello que es eficiente en un campo determinado, como arma y como apuesta de lucha, lo cual permite a su, portador ejercer un poder, una influencia; por lo tanto, existir en un campo determinado” (Bourdieu. 1996) podemos considerar también a este observatorio de femicidio, desde la definición de Capitales que considera Bourdieu, como el capital cultural capaz de aunar las fuerzas con las que oponerse al Capital Eficiente en este Campo del dominio masculino. Este capital cultural que posee La Casa del Encuentro, le otorga una posición de privilegio frente a los otros agentes y determinado poder y capacidad de incidencia en este Campo permitiéndole producir efectos como los ya mencionados en él. En este momento en particular, de creación y de lucha, de visibilización, en el que se abren espacios que permitan pensar en la violencia simbólica que sostiene la desigualdad entre los géneros y cosifica a la mujer, hasta el punto de estar puestas las dudas sobre ella cada vez que una mujer es asesinada o víctima de violencia; en este momento en que con la intención de promover un cambio en el Habitus tendiente a lograr la igualdad de derechos entre los hombres y las mujeres tal como lo enuncia el feminismo popular que propone La Casa del Encuentro, podemos considerar que este capital representado por el observatorio de femicidio, posiciona a la institución en el lugar de obtener y serle requerida colaboración, tanto de otras instituciones como de otros Campos. Podríamos también especular con la posibilidad de que, en algún momento en el que nuevas subjetividades hayan sido socializadas, en el que la estructura del campo haya sido internalizada, se generen entre los campos mencionados nuevas luchas de poder que lleven a situaciones de mayor conflicto como enuncia Bourdieu, pensándolo solamente para contraponerlo al momento actual en el que podríamos entenderlo como un momento de mayor colaboración.
Otro de los conceptos que desarrolla Bourdieu es el de Metacampo, representado por el Estado, que tiene la capacidad de regular y ejercer presión sobre todos los restantes campos. El Estado tiene presencia en los campos a través de las instituciones que lo representan, entre ellas el Poder Judicial, que nos incumbe debido a que otro punto a destacar en este eje de análisis es el ejercicio de poder llevado adelante por aquellas instituciones representantes del Estado del Estado. Con respecto al Poder Judicial, en cuanto al uso y aplicación de la ley. Es importante en este punto no confundir el Estado con gobierno que lo administra.
La falta de aplicación de la ley puede entenderse desde diversas miradas, una es como violencia institucional, esta se debe a la impunidad con la que los jueces llevan adelante las causas y al momento de ejecutar las penas no tiene en cuenta las modificaciones recientes, según lo expresa Ada Rico al hablar de estos cambios: “son muy reacios a ejecutarlos”. La forma en la que se materializa este tipo de violencia es la discriminación que se da mediante estas omisiones, esta discriminación se comete al interior de los despachos de quienes deben aplicar la ley, lo que hace inaccesible la procuración de justicia, atentando así contra los derechos humanos de las mujeres víctimas de violencia de género. Otra forma de entenderla es desde situaciones implícitas o no deliberadas donde directamente no se investiga si la muerte estuvo precedida de violencia de género. Un ejemplo muy común es el de recibir llamados donde el homicida entre sollozos explica “Mi mujer se quiso matar, se suicidó”, y con eso basta para el personal policial vaya más allá. Esta situación puede explicarse desde el poder de lo patriarcal, donde éste actúa de forma no reflexiva, a través de la acción sí efectiva de significaciones sociales imaginarias instituidas, es decir actúa allí donde resulta impensable suponer que la explicación de ese hombre pudiera no ser verdad. Este ejemplo nos remite a un caso emblemático, el de Carlos Monzón, quien al llamar a la policía explicó: ““Llamen a una ambulancia, Alicia se tiró por el balcón”, en este caso ese artilugio no prosperó y fue acusado por el crimen de su mujer.
Todas estas situaciones serían invisibles si no fuera por las denuncias de las víctimas, de sus familiares o por el accionar de las organizaciones sociales como la Casa del encuentro, dado que por desconocimiento, por posicionamientos doctrinales dentro del ámbito de la jurisprudencia que consideran el femicidio como delito de autor, o por ser considerado lisa y llanamente un tema de moda, tal como nos relata Lauría: “muchos sectores del poder judicial lo toman como que esto de la violencia es una moda, porque a las mujeres siempre les pegaron pero ahora se quejan.”.
Como tercer objetivo nos proponemos analizar las prácticas institucionales utilizando lo desarrollado por Cornelius Castoriadis (Castoriadis, 1988), junto a él pensamos que, no hay manera de constituirse como sujeto si no es dentro de las instituciones y que a su vez no hay institución que no esté constituida por sujetos. Entonces el concepto de institución se articula a lo individual y lo social, al decir esto nos referimos a que la prácticas sociales, modos de hacer, de ser, de percibir, los usos y las costumbres se constituyen dentro del campo social formando lo que el autor llama trama de significaciones imaginarias compartidas y a su vez los individuos para constituir su identidad se apoyan en ellas, entonces esto se trataría de una construcción mutua donde los sujetos construyendo sentido de manera anónima y colectiva constituyen sus propias subjetividades. De este modo la institución estaría dando un producto “la materia prima humana” que a su vez le permite su perpetuación  y validez.
Como entendemos que este proceso actúa y se produce de manera silenciosa nos proponemos analizarlo. El trabajo será deconstruir y analizar para poder comprender las dimensiones que se ponen en juego dentro del proyecto institucional, esto estaría íntimamente relacionado con descomponer aquello que se lleva a cabo, tomarlo, pensarlo para  concebir cómo ven los miembros de la institución, cómo interpretan sus prácticas. Los imaginarios, representaciones sociales que sustentan lo que hacen, lo que dicen y cómo se organizan. La propuesta es descubrir qué imaginarios sostienen eso que hacen.
¿Cómo trabaja la casa del encuentro? ¿como nos describen ellas sus prácticas? a partir de las entrevistas nos cuentan sobre su trabajo institucional, nos dicen que si bien es una atención en la urgencia y la emergencia, más allá de la premura que implica la situación se toman  un trabajo de reflexión en cuanto a cómo actúan frente a la demanda, no responden a todos los pedidos de manera impulsiva , solo se dedican a determinadas asuntos “nosotras dentro de la violencia de género elegimos trabajar los dos eslabones más fuertes, que es la desaparición de personas que muchas veces se entrecruza con el femicidio y es el asesinato de una mujer por violencia de género. Justo los dos extremos de la violencia”. Se podría pensar que como institución no se piensan de una manera omnipotente, hay un campo de acción delimitado y una manera de accionar que nace de una planificación pensada. Con respecto aquellas problemáticas que dejan por fuera nos comentan que toman la consulta y dan una respuesta, en sus palabras: “todo tiene que ser derivado al lugar que trabaje la temática y la tenga profundizada” y a su vez “las derivaciones que hacemos intentamos que sea   a lugares perspectiva de género”. Respecto del tema, denuncian la falta de formación para el tratamiento de estas temáticas, de los distintos actores sociales que participan en las instituciones, a las que la víctima tiene que acudir. Empezando por el trato en la comisaría donde son hombres quienes muchas veces deben tomar las denuncias y se niegan a ello o al hacerlo culpabilizan a las víctimas sostenidos por imaginarios tales como: “algo habrás hecho para que te golpeara”, “no se aleja porque en realidad le gusta que la golpeen”, “esto se soluciona en la cama”, etc. La falta de formación en la temática de género se traduce también en violencia cuando estas mujeres asisten a los hospitales públicos, a centros de atención en salud mental.
El tema es muy delicado, muy fuerte emocionalmente, históricamente no ha sido tomado en cuenta y las víctimas no solo han sufrido violencia de género sino una violencia institucional de aquellos sectores que deberían haber brindado una respuesta, frente a ello las integrantes de la CE nos comentan la importancia de tomarse el trabajo de pensar la mejor posibilidad para aquella que consulte. La atención debe ser cuidadosa. Por ello las personas que comienzan a trabajar reciben una formación de dos meses antes de salir al campo ya que otro de sus objetivos es que sus voluntarias puedan construir e incorporar una mirada desde la perspectiva de género. Para ello, más allá de la formación, se trabaja de manera teórica, se debaten los casos y hay reuniones de equipo cada quince días.
Actualmente se trabaja de manera interdisciplinaria. Cada vez que se hace una cita hay una trabajadora social, una psicóloga y una abogada lo que se busca es escuchar de manera conjunta. Ya que anteriormente se tenía primero la entrevista con la psicóloga, luego con la abogada, etc y lo que se generaba es una revictimización. Al comprender que ese modo de trabajo era iatrogénico, fue modificado.
Por otra parte no comparten el modelo asistencialista, creen en el fortalecimiento. El asistencialismo no cumple ningún sentido terapéutico porque lo que se cambia es de dependencia. “El tema es fortalecerla para que ella misma encuentre sus propios recursos”. Una cosa totalmente diferente es contenerla, acompañarla en el proceso de salida del vínculo violento. Siempre haciendo énfasis en la parte positiva y constructiva. Para ello se apoyan en los  grupos de autoayuda en donde se busca realizar un trabajo terapéutico, más allá del efecto catártico que puede tener el sentarse a contar su historia.
También se trabaja en el fortalecimiento de los familiares de la mujer víctima de violencia a través de los “grupos para familiares” el objetivo es que puedan comprender y acompañar, porque lo que más se observa es que aparece la frustración e intolerancia y la familia se termina alejándose de la víctima y eso le allana el camino al violento.
Ellas sostienen en términos generales que la violencia la vive cualquier mujer por el hecho mismo de serla y de allí radica el espíritu de su lucha. Y hablando en términos específicos consideran al femicidio como cosificar a la mujer, utilizarla para algún provecho, algún abuso o lo que vaya a hacer y matarla en base a su condición de mujer ya que no existe la obsesión si no lo que hay es el deseo de poseerla. Por último al Femicidio vinculado es donde se mata a un tercero, puede ser un hijo, hija, familiar de la mujer, amigo, etc en donde lo que se busca es tratar de destruir psicológicamente a la mujer.
Lo que motiva su que hacer es el estar convencidas de que es necesario un mundo mas igualitario en contra de tanta violencia hacia las mujeres, los niños e incluso los varones. También lo que quieren lograr es que las mujeres salgan de esos vínculos en donde son objetalizadas, es decir que salga de la posición de objeto y  que se logre empoderar. Por ello, “se pone a disposición de la mujer que llega a la institución todo lo aprendido y se valora todas las disposiciones y fortalezas que tiene, para que ella comprenda lo que tiene que hacer. Se la concientiza acerca del valor de su propia vida y la de sus hijos y sobre sus derechos. Se trabaja con el fortalecimiento de la mujer hasta tanto pueda salir de la violencia”.

Se definen como feministas populares – un concepto creado recientemente- a diferencia de otras ramas del feminismo y proponen que en el tema de la violencia es víctima la mujer pero involucra a toda la sociedad. No son un feminismo que excluya a los hombres, los hombres deben caminar al lado de ellas en la lucha, es ilógico segmentar si lo que se pregona es la igualdad social. Sin embargo actualmente e históricamente se ubicó a la mujer en un lugar de inferioridad física, emocional, de pensamiento, de creencia e intelectual respecto del hombre por eso sostienen:”que ver con que este cambio cultural necesario para poder llegar a la igualdad de derechos lo tenemos que hacer entre todas y todos. Es un trabajo que hay que hacer con la sociedad en su conjunto entre todas y todos para poder llegar a la igualdad. Hay muchos hombres que son violentos, pero no todos los son, porque si todos fueran violentos estaríamos todas muertas. Entonces esos hombres que no son violentos ver de qué forma podemos trabajar en forma conjunta, hombres y mujeres para lograr contrarrestar lo que es la violencia sexista, machista. Principalmente el feminismo popular tiene que ver con eso, con un cambio de estructura social, con un cambio de mentalidad, de educación distinta. No asignarles a las nenas lo juegos para barrer, para cocinar, para lavar, la ropa que tiene Barbie, y a los varones pelota, herramientas. Entender Todos y todas somos iguales, todos y todas tenemos que tener los mismos derechos. No por ser mujer estamos en una situación inferioridad, y no por ser mujer nos tienen que matar, violar o golpear amenazar y hostigar, ni nada”
A partir de lo detallado nos animamos a hipotetizar que el imaginario de mujer que sostienen es diferente al planteado por el patriarcado. Piensan a la mujer desde la potencia creadora, capaz de empoderarse, fortalecerse, en  lucha, que necesita de un acompañamiento fuerte ya que son imaginarios poderosos  los que sostienen el predominio del patriarcado, ya que venimos al mundo y ese imaginario nos preexiste, nacemos haciendo carne en nuestros cuerpos las ideas que promueven a la  mujer  como  un mero objeto, relegada al campo de lo privado, mujer sinónimo de madre, con una función bien detallada estar al servicio de su casa, familia, pareja, hijos, una mujer que no nace libre, nace con cadenas que debe destruir todo los días ya que la violencia simbólica es tan grande, que el patriarcado se ha hecho carne no se solo en el cuerpo social sino también en nuestros cuerpos .
Por ello no nos parece obra del azar que la CE, tenga bien definido su campo y modo de accionar sostenido en valores como la contención de sus usuarias y trabajadoras. Ya que ante tanta violencia, es necesario crear un clima que sepa contener lo espantoso y pueda promover una mirada constructiva ante tanto sufrimiento. Por eso, su imaginario de mujer es fundamental en sus prácticas sostenerlo posibilita otra práctica por fuera de la lógica imperante, la ubicar en otro espacio y por ende habilita que sus objetivos se vayan cumpliendo.
También opinamos que la noción de feminismo popular es un imaginario que sostiene y da sentido a sus prácticas ya que es su manera de definirse, su manera de pensarse y pensar su lucha en pos de un mundo mejor, un mundo igualitario. Si hay algo que singulariza a la CE es su manera de pensar a la mujer, su lucha, su compromiso con la tarea y sus deseos de incidir en las políticas destinadas a esta temática. Creemos que uno de los mayores aportes que ha producido esta ONG es instalar en los medios de comunicación y en la sociedad el término femicidio, solo conocido en el medio académico. Esto ha logrado desnaturalizar un imaginario social muy arraigado respecto de estos crímenes. Hasta entonces en las páginas policiales, noticieros, radios, etc, se hablaba de crímenes pasionales, pero como lo explica Tuñez la violencia de género se trata no de un momento de locura y pasión, se rompe con la idea de que “los hombres son violentos por naturaleza”, una conducta violenta es una conducta aprendida, que da cuenta de las desigualdades estructurales entre hombres y mujeres atraviesan lo histórico social y se sostienen y reproducen en las prácticas sociales. Muchas veces se naturalizan conductas que se expresan en agresiones leves (gritos, insultos, sacudones, etc) que se representan como propias de la vida doméstica y que son invisibilizados y naturalizadas en un contexto machista y que luego al tomar otra dimensión como agresiones psicológicas y físicas graves, son visibilizados como agresiones graves pero es tal la dependencia para entonces de la mujer que resulta muy difícil salir de ella. Es por eso que instalar el término, darlo a conocer posibilitó también  visibilizar el tema y comprender que no es una problemática del mundo privado, romper con el imaginario de que es “un problema de alcoba”, “son cosas que debe resolver la pareja”, romper con la cultura de no involucrarse permite comprender el problema como una violación a los derechos humanos y permite comprender la violencia machista como un problema social, político y cultural. Frente a ello pensamos que han logrado dar nombre a aquello que no entraba en la cadena el “femicidio” antes se utilizaba la denominación crimen pasional, imaginario que encubre la visión de la mujer como objeto de posesión del hombre, “la mato por amor “. Al llamarlo femicidio le devuelve el estatuto real y político que encubre el hecho de matar a una mujer. La CE en conjunto a otras organizaciones instaura socialmente un imaginario que sienta precedente en la lucha contra la violencia de género, da nombre, da entidad a algo que una vez visibilizado no va a ser posible callar. Gracias a esto la frase “cada 31 horas muere una mujer” toma su real alcance y dimensión para todos los actores sociales.
Finalizando, en este eje de análisis no queríamos dejar de pensar una temática que de manera indirecta insiste a lo largo de las entrevistas, la temática en torno al dinero, específicamente la relación entre el voluntariado y al trabajo remunerado. En sus dichos leemos un fuerte énfasis en que el trabajo que se realiza en la CE es realizado dentro del marco del voluntariado; Ada nos dice: “somos todas voluntarias”, “esto no es un trabajo, es un voluntariado”. A su vez se observa una fuerte reticencia a la idea de pedir ayuda económica “Nunca hemos pedido para nosotros… o sea por una causa que sería totalmente justa, pero no… la verdad que no lo hemos hecho”. Sin embargo han recibido dinero de organizaciones internacionales como fundación avon, la embajada de los estados unidos, y la ONU cuando escribieron el libro.  También reciben algunos pequeños montos de unos talleres que coordinan con el gobierno de la ciudad y otros aportes de ONGs. Sumado a lo que reciben de la asociación que está en San francisco Global Fund For Women la cual les envía el dinero que permite pagar el alquiler.
 Lo que queda como producto de nuestro análisis es una posición que se repite en todas las entrevistas, la cual es  queda expresada de manera dicotómica por un lado estaría el trabajo pago y por el otro el trabajo que se hace por vocación, como por ejemplo “ Tengo mi trabajo que es el que me permite poder realizarme acá de forma gratuita porque si no sería un poco ilógico, me muero de hambre, y tiene que ver con algo de una vocación quiero creer, es como que me siento satisfecha en lo profesional “  Frente a esto nos hacemos preguntas que nos permitan comenzar a pensar sobre los indicadores encontrados. ¿Qué imaginario subyace a este posicionamiento? ¿Lo que se hace por vocación no debería ser cobrado? ¿El trabajo que recibe su remuneración no se hace con y por vocación? ¿Cuál sería la relación entre dinero y vocación? ¿Que implica para ellas el recibir dinero?
Estos interrogantes nacen de la necesidad de comprender la toma de posición de la institución. ¿Será posible que la CE no pueda pensarse en tanto sujeto de derecho y pensarse capaz de recibir un pago por su trabajo realizado? ¿Por qué no pensar que una manera de persistencia del proyecto institucional se podría lograr con trabajadores que reciban un pago por su labor? ¿El pago haría menos valioso al trabajo?¿ Qué es lo que las lleva a decidir sobre de quién recibir el dinero y de qué manera? ¿ Será una forma de obtener una independencia política?


2- La casa del encuentro como síntoma social

Esta línea de sentido nace de la necesidad de pensar a la CE dentro del contexto social que dio lugar a su historia y nacimiento. Frente a la información que fuimos obteniendo nos planteamos varias preguntas ¿qué lugar ocupa la CE dentro de la sociedad? ¿hay otras instituciones que también realizan este trabajo? ¿qué dimensión cobra su trabajo? Luego de conocer su historia, su lucha, sus batallas ganadas, sus ideales, sus objetivos comenzamos a pensarla como un síntoma social. La concepción de síntoma la tomamos del psicoanálisis, en el sentido de que eso es un signo que encubre otro sentido más allá del accesible a la conciencia, ya que si bien la casa del encuentro hoy en día es una ONG destinada al trabajo con mujeres desaparecidas, violencia de género y femicidio, entendemos que ella encierra una historia llena de avatares que la atraviesan y la definen de tal manera que ella es única en relación a todas las organizaciones civiles dentro de la misma temática que tenemos en nuestro país.
 A nuestro entender la institución termina conformándose como un proyecto íntimamente relacionado a aquello que es relegado de la agenda pública, de las políticas sociales, termina dando lugar a aquellas demandas ignoradas y construyendo respuestas que aun no habían sido llevadas a una practica concreta.  Es decir que allí donde el sentido estaba coagulado, donde las representaciones estaban cristalizadas, se abrió paso otro movimiento, otra fuerza que nació del deseo de grupo de mujeres que supieron hacer frente a lo real de las situaciones vividas en la sociedad.
En este sentido la CE como síntoma implica la idea de solución de compromiso, allí donde había negación, silencio, naturalización comenzó a emerger la pregunta, la problematización. Lo que los actores sociales tenían para decir comenzó a contar con un lugar con gente que esta dispuesta a cooperar y brindar su asistencia. Entonces la CE frente a esta falta de respuesta por parte del estado, comienza a dar sus propias respuestas, con sus propios estudios y sus empleados voluntarios.
Frente a todo lo anterior mencionado pensamos que la institución se transforma en síntoma social porque dice algo de nuestra sociedad, de nuestras políticas, de la formación como profesionales, de lo que se habla, de lo que se calla, de lo que importa y de lo que es relegado dentro de lo social y el campo de la salud.
Entonces la CE como proyecto institucional nace como una solución de compromiso frente a la falta de respuesta del estado. No consideramos que sea una respuesta reivindicativa, consideramos que es un saber hacer frente a un real que emerge, una elaboración, una respuesta que se fue construyendo de manera artesanal y que hoy en día da respuestas a aquellas problemáticas que fueron y continúan siendo calladas o invisibilizadas por el estado. Ambas entrevistadas, como también Tuñez, denuncian la ausencia del estado en su rol de asistencia y contención en muchas de las instancias previas al desenlace del femicidio, que se podría evitar mediante la implementación de políticas públicas. .El informe de femicidios de la CE es un claro ejemplo, el mismo nace ante la necesidad de contar con estadísticas, su trabajo viene a suplir la falta de estadísticas oficiales necesarias para poder comprender la dimensión del problema y poder así pensar en políticas públicas que permitan abordarlo. Una estadística oficial basada en los datos recogidos en distintas instituciones privadas,  hospitales, comisarías y expedientes judiciales sobre la forma en que fue reportada la muerte violenta de cada mujer es hoy una deuda pendiente del estado. Actualmente y con demasiado esfuerzo es desde la Casa del encuentro desde donde todo aquel interesado en el tema puede obtener información al respecto.
El estado argentino a partir de la Declaración de las Naciones Unidas sobre la Eliminación de la Violencia contra la Mujer (1993) asume el compromiso internacional de poner el tema en agenda y es así que en 2009 es sancionada  la Ley 26585 de Protección integral para prevenir, sancionar, y erradicar la violencia contra las mujeres en los ámbitos en que desarrolle sus relaciones interpersonales. Sin embargo, como lo explicitan nuestras entrevistadas, las normas son necesarias pero no suficientes sino están acompañadas de un diseño de política pública y de un cuerpo administrativo que las ponga en funcionamiento, de un abordaje multi e interdisciplinario y que incluya instituciones especializadas a las que se pueda acudir en  todo el territorio argentino.

A continuación desarrollaremos un paralelismo con el texto de Ulloa “La tragedia y las Instituciones” para explicitar de qué manera la institución vendría a cumplir una función en la sociedad.
Según las entrevistas realizadas podemos conceptualizar que en la relación donde se efectúa la violencia de género muchas veces se produce un ciclo dinámico en el cual la mujer queda atrapada en una relación de violencia. Esta se compone de distintas fases, pero culmina cuando la víctima perdona al maltratador tras haber sido convencida por éste de que “todo va a cambiar” y de esta forma el ciclo vuelve a comenzar. Ubicamos aquí dos posiciones diferenciadas, una de dominación y otra de dominado, que aluden a los imaginarios anteriormente nombrados de “hombre fuerte” y “mujer débil”.
También se puede reconocer lo que se suele denominar “violencia económica” como un efecto de imaginarios instituidos, provocando en la mujer una completa dependencia económica hacia el hombre. Pero no solo por esta razón la mujer se encuentra, en cierta forma “acorralada”. Cabe citar aquí, una breve explicación de A. Fernández en donde reúne las formas explícitas e implícitas de violencia dentro de la pareja: “Al mismo tiempo que las manifestaciones evidentes de maltrato, otras formas menos visibles pero no menos eficaces se ponen en práctica en la familia cotidianamente a través de la desigualdad en la distribución del dinero, del poder, de las responsabilidades domésticas, de las opciones de realización personal, etc.” (Fernández, 2009)
Consideramos que toda esta situación constituye progresivamente lo que Ulloa define como “encerrona trágica”, la cual se genera cada vez que una persona para vivir (amar, educar, estudiar, tramitar, recuperar la salud, etc) depende de alguien que lo destrata, corriéndolo de su lugar de sujeto. Asimismo, en esa relación, no hay un tercero mediador a quien apelar.
De esa forma se genera lo que el autor llama “dolor psíquico” en la víctima, un sufrimiento que lo diferencia de la angustia ya que esta tiene momentos culminantes y de alivio, y agrega el autor “Quien sufre ese dolor no vislumbra para este ningún final ni tiene la esperanza de que cambie la situación de dos lugares. Una situación sin salida con connotación infernal”. (Ulloa, 1995 p.187).
Explica Ulloa, que la encerrona trágica es un factor epidemiológico habitual en cualquier ámbito social donde los establecido (instituido) asume la rigidez cultural propia de la mortificación y encierra a los sujetos. (Ulloa, 1995).  Entonces podemos pensar, que el régimen patriarcal hace posible el despliegue de dicha en encerrona trágica en las mujeres víctimas de violencia, una situación en la que se encuentran inmersas sin percibir ninguna salida posible para ello y donde no se vislumbra ninguna terceridad a quien apelar, dado que la acción del estado no funciona como tal. Con esto, nos referimos a que en esa relación de violencia o bien en la temática que nos compete, la acción del estado interviene de manera insuficiente. De hecho, a la pregunta ¿Qué lugar tienen en la sociedad? la presidenta nos responde “nosotras en realidad desde la casa del encuentro y de las organizaciones que trabajamos en esta temática y en otras temáticas venimos a llevar adelante, en realidad a suplir, lo que no se lleva adelante desde los distintos Estados”.
En esta línea, también se ve reflejada esa terceridad que falla, a través de las quejas de las mujeres que cuentan que hicieron denuncias y no tuvieron respuesta. La primer entrevistada hablando de la tolerancia a la frustración nos dice: “porque viene una mujer, te dice no tengo a donde ir, me mata a palos, ya hice veinte denuncias y no pasa nada, ¿qué haces, te la llevas a tu casa?, no, entonces bueno ver de qué forma se la puede ayudar”.
En última instancia, las falencias que presenta la acción de dicha terceridad es también, la falta de una aplicación correcta de la ley que promueva el aniquilamiento de esa violencia que se presenta de múltiples formas ejercidas desde el más fuerte sobre mujeres más débiles.
Consideramos la CE como la institución que viene a suplir esa terceridad que falla, asistiendo tanto legal social y psicológicamente a las víctimas de violencia de género. Asimismo, intenta desnaturalizar el discurso que ubica a la mujer en ese lugar de dominado (producto de las desigualdades estructurales que existen entre el hombre y la mujer), y sobre todo lugar donde es ella recibidora de un maltrato constante. No es tarea fácil, ya que implica cambiar en esas mujeres y en la sociedad en general, la trama de imaginarios compartidos que guían sus pensamientos y sus conductas.
A su vez, la intervención de dicha institución viene a interrumpir el dolor psíquico del que nos habla el autor mencionado y ofrece una voluntad férrea en donde las víctimas encuentran alivio para la mortificación. Podría pensarse, que el dolor psíquico se traspone en angustia y con ello la víctima puede tomar otra posición frente a la situación de violencia. Teniendo en cuenta que ese sufrimiento es silencioso, por estar la mujer dependiendo de alguien que la maltrata, el pasaje a la toma de conciencia supone, la recuperación del sufrimiento embotado por la mortificación (Ulloa, 1995).
Es allí donde trabaja el equipo interdisciplinario de la institución mediadora, concientizando a la víctima acerca del valor de su vida y de la sus propios hijos en caso de que los tenga, sobre todo si se percibe un ataque inminente como lo explica Fabiana Túnez en la conferencia: “Se trata de dar toda la información posible, económica, de vivienda, de entorno (...) Tratamos explicarle qué significa hacer la denuncia y que significa su propia vida”. Asimismo, el hecho de denunciar legalmente al agresor es algo que es trabajado con las víctimas dentro de la institución, la mujer es fortalecida para tomar coraje y denunciar.
La noción de Feminismo Popular donde hunde sus raíces la institución, como ya dijimos, tiene que ver con un cambio de estructura social y todos esos saberes construidos se transmiten a la mujer. Dice la entrevistada Fabiana Túnez: “Nosotras trabajamos con un concepto que tiene que ver con el feminismo popular de construcción de saberes. Nosotras como profesionales del equipo de la casa del encuentro nos paramos al mismo nivel de la mujer, hablamos en un mismo nivel y fundamentalmente generamos estrategias que nos permitan acercarnos a esa mujer (…) Y cuando hablamos de construcción de saberes es porque las profesionales del equipo vamos a poner a disposición de esta mujer todo lo aprendido pero, a su vez por cada mujer que atendemos, ellas ya tienen su historia. Entonces el abordaje tiene que ver con la horizontalidad, porque lo que deseamos es aprehender todas las potencialidades y fortalezas que tiene y no pararnos en el lugar de <<vos tenés que hacer>>”. Se pondera desde la institución que la mujer víctima de violencia pueda reconocer todas las  fortalezas que tiene, que piense y repiense la situación de violencia que la atraviesa para que ella misma encuentre las estrategias para su liberación. En términos de Ulloa se trata de herramientas útiles para recrear el espacio dramático donde se desenvuelve la tragedia y explorar una y otra vez críticamente ese escenario y agrega “Ocurre que la puesta en acción de ese conflicto ya supone un intento de dramatizar lo que está paralizado en las encerronas trágicas” (Ulloa, 1995: p. 195).
Concluyendo, la acción terapéutica de la institución, muchas veces es efectiva para que la mujer logre salir de la relación violenta, porque se ubica como un tercero que viene a mediar y permite que el dolor psíquico se ligue, que la mujer se identifique con su padecimiento desde otro lugar y pueda ver otras opciones. No perdamos de vista, que las instituciones dan identidad, nos hacen pertenecer y la pertenencia proporciona una ayuda psicológica fundamental.


3- De la lectura de textos al trabajo por un mundo basado en la igualdad

En este tercer punto queremos hacer un recorrido partiendo de los orígenes, para comprender como es que estas mujeres – las tres fundadoras de la CE- interesadas por la lectura comenzaron a reunirse para discutir textos e intercambiar ideas y llegaron a convertirse hoy en las fundadoras de un proyecto feminista por los derechos humanos de todas las mujeres, hombres, niñas, niños y adolescentes, sostenido desde tres pilares fundamentales, lo político, lo social y lo cultural. Tuñez nos dice:” Nosotras no estamos en contra de nadie, sino a favor de los derechos de las mujeres. Pero fundamentalmente de los derechos de una sociedad más justa, más igualitaria y libre de toda forma de discriminación”. Al hablarnos de sus comienzos Ada comenta: “se formó con la idea de que bueno… de juntarnos, de poder… tal vez trabajar más la temática desde lo teórico, desde poder hacer análisis, de todo lo que nos iba sucediendo por ser mujeres”
Para este recorrido nos valdremos del concepto de analizador de Rene Loureau. Dicho autor  entiende la intervención institucional como un procedimiento clínico, aplicado a las instituciones y plantea que toda intervención constituye en sí misma un dispositivo analizador. Lo define  como aquello “que permite develar la estructura de la institución, provocarla, obligarla a hablar” (1991, p.282).  Plantea tres tipos de analizadores, natural, histórico o construido. En el caso de nuestro análisis queremos plantear que todas  las denuncias, los reclamos de los familiares, la información que empezó a aparecer acerca de la cantidad de mujeres desaparecidas y asesinadas y todos los datos en relación a estos temas,  produjo un efecto de análisis en estas mujeres y por lo tanto se lo puede pensar como analizador natural, que luego producto de este efecto de análisis, las llevara a consolidar lo que es proyecto feminista conocido hoy como  la Casa del Encuentro. ¿Por qué lo pensamos así?, siguiendo a Loureau todo analizador provoca un efecto que devela lo no dicho, puede pensarse como una máquina de desconstrucción, que producen un saber nuevo sobre la institución – en este caso un saber nuevo acerca de la mujer como tal-  y conlleva una toma de conciencia colectiva, que se espera hagan surgir las capacidades o potencialidades instituyentes a partir de este nuevo saber que se devela. Permite descomponer el todo, poniendo de relieve a sus componentes y develando su estructura –es decir traer a la superficie las relaciones no explicitadas de poder en juego, nos referimos a las relaciones desiguales entre los géneros, hace hablar a la institución.
Toda esta situación provocó en ellas un efecto de análisis al develar lo oculto, la muerte y desaparición forzosa de un sin número de mujeres. Al respecto Ada cuenta: “Una cosa lleva a la otra porque se fueron acercando por Internet,(…) empezaban a pasar datos, de una mujer desaparecida… y ahí me acuerdo que nos habían escrito de Santa Rosa, La pampa, que fue con Andrea López. Empezamos con el tema de las mujeres desaparecidas. La gente incluso pensaba que la casa del encuentro era el nombre que le habíamos puesto como un encuentro, pero pensaban que era como el encuentro con la cara de estas mujeres. Ahí empezamos a hacer una marcha todos los 3 de cada mes, en homenaje a la fecha que desapareció Marita Verón. Ella explica que todos los tres década mes se juntaban en la esquina del Congreso buscando a mujeres desaparecidas y:”Ahí se acercaban familias, víctimas de violencia… y ahí ya es como que nos fue llevando la vida… porque entonces ya empezaban a acercarse aquí, a nosotras no nos conocía nadie. Éramos dos abogadas, dos psicólogas. Fabiana, yo y Marta”.
Continuando con la articulación teórica, el analizador natural no es  planificado, de allí nuestra articulación con este movimiento  de mujeres, el efecto que toda la información mencionada provoca en ellas, surge sin planificación previa ni objetivos pautados. Como lo explican las entrevistadas, el trabajo y la lucha contra la violencia contra la mujer comenzó sin planificación, no estaba en los planes de ellas transitar este camino mediante la acción y participación dentro del feminismo popular. Ada nos dice al respecto:” a veces hay lugares que se construyen para… acá fue al revés, estaba el espacio, que era un espacio de construcción para hacer talleres y de repente la demanda es lo que nos lleva a nosotras a transformar esto.  Estábamos convencidas de que era necesario un mundo más igualitario para tanta violencia hacia las mujeres, los niños. Incluso a veces los varones, que dicen que un varón no puede llorar, no está la idea de sensibilidad. Eso lo teníamos claro, ahora cómo la vida nos fue llevando… aquí estamos. Tanto hacer, tanto estar en la calle y tanto trabajar”. Podemos decir parafraseando a Loureau que, cuando estamos frente a un analizador natural este acontece y puede ser hablado o no, en este caso el habla institucional es provocada por sus propias protagonistas, las altas cifras de muertes y desapariciones de estas mujeres hicieron efecto, ruido, produjeron  un efecto de análisis, encontraron voz y cuerpo en estas tres mujeres,  que comenzaron a pensar en ellas, las palabras y voces que ahí empiezan a aparecer, los procesos de elucidación que ahí empiezan a haber, generan la capacidad de pensar aspectos en la vida del agrupamiento que hasta ese momento parecía opacados, ayudando a entender lo que está en juego, develando las relaciones de poder en relación a la desigual relación de los géneros. La Dr Alejandra Lauria lo expone así: “lo que implica el femicidio es cosificar a la mujer, utilizarla para algún provecho, algún abuso o lo que vaya a hacer; cosificarla y matarla en base a su condición de mujer”, refiere que él está en relación con  “Esta superioridad histórica que hay de hombre sobre mujeres”.
Ada nos cuenta que en paralelo a las marchas de los días tres, se les ocurrió pedir voluntarias: “dijimos vamos a mandar un pedido. Si alguien viene... Quizás nos conocían un poco por el tema de las marchas. Mandamos un mail a todas las listas y nos escribieron 60 personas, de las cuales habrán quedado 15”. En paralelo a este trabajo y ante  la ausencia de estadísticas oficiales sobre femicidios en Argentina, producen en 2008, el primer  informe de femicidios del país. Ada afirma:”Cuando comenzó este trabajo, nosotras decíamos… no puede ser que no se encuentre en ningún lugar cuántas mujeres son asesinadas anualmente en nuestro país. Empezamos a mirar, a cuestionarnos y a pensar en las experiencias que  se fueron desarrollando en otros países y dijimos ¿cuál es el parámetro en el cual nos vamos a parar para poder hacer un informe estadístico?. Y empezamos a ver que los crímenes pasionales que figuraban en los titulares de los diarios podían ser extraídos para poder empezar a avanzar en esta realidad. Así fue que elegimos 120 medios de comunicación de todo el país y agencias del oficio. De periodismo de investigación, diariamente se consultan esta cantidad de medios. Pero no solamente se consultan, se hace también el seguimiento de cada uno de esos casos”.
Luego con el objetivo de ampliar y profundizar los monitoreos de los casos, en el año 2009, se conforma el “Observatorio de Femicidios en Argentina Adriana Marisel Zambrano”, cuya directora general es Ada Beatriz Rico, co fundadora. Dicho observatorio puede leerse como un analizador construido, puesto que su fin es producir un material analizable,  busca poner a circular este material, los datos estadísticos obtenidos, “el concepto de analizador es un concepto que tiene que ver más con una acción específica, una acción de denuncia de develar las situaciones que conforman el no saber” (Britó, citado en Zappino: 2001, p.15). De igual forma, como denuncia  piensa Fabiana Tuñez los informes:” empezamos a hablar de cómo podíamos utilizar el informe de investigación también como una forma de exhibir socialmente.(…)¿cómo hacíamos para utilizar esta herramienta para exhibir socialmente y empezar a colocar el significado de homicidio y violencia de género? (…)  nos fijamos determinados objetivos, sostener los informes de femicidios hasta que se supieran estadísticas oficiales. Porque es una forma de denunciar socialmente una realidad que hasta ese momento quedaba encerrada en el ámbito de lo privado. El tema de hacer los informes lo sacó al ámbito de lo público”.
Es así como estas mujeres y el grupo de voluntarias que coordinan, comienzan a denunciar con más fuerza y a contabilizar  estas muertes mediante el observatorio, esto permite que sean percibidas como un problema real a visibilizar para toda la sociedad  y sus instituciones, el instituido de las reglas del patriarcado, de sus relaciones desiguales, de su poder sobre la mujer y las niñas, .ellas comienzan a interrogar este poder, a denunciarlo,  a emprender una lucha cuerpo a cuerpo y su fuerza instituyente se revela a través de los logros que fueron obteniendo en su camino de luchas. Al hablar de la acción del analizador Brito (1990) explica, “el análisis deja de ser un mero ejercicio intelectual, con posibles aplicaciones prácticas, y se constituye como un trabajo, una acción de desconstrucción en la acción de lo instituido, de las formas de funcionamiento ya establecidas y naturalizadas, ya integradas en la institución”( citado en Zappino: 2001, p.14).

El observatorio es ubicado como analizador construido en la medida que tiene un efecto de análisis en el espacio social, y fue pensado con el objetivo de ampliar y profundizar los monitoreos de casos. Los informes son citados con frecuencia en los medios de comunicación y utilizados como insumo para el debate y diseño de políticas públicas. Como lo explicitan en su página web, el objetivo que se plantean con los informes es “realizar un aporte desde la sociedad civil para consolidar un proceso de desnaturalización de la violencia sexista, comenzando por el lenguaje, instalando la definición de Femicidio, tanto en los medios de comunicación como en la sociedad”.
Comprometidas con las víctimas y sus familias en una guerra desigual contra la inequidad de género, base material del patriarcado, estas mujeres trabajan para contrarrestar  la impunidad de los homicidas que creen poder cosificar a la mujer para poseerla, violentarlas, mutilarlas para luego desecharlas, y contra las instituciones que le permiten seguir haciéndolo, porque como lo explica Ana María Fernández: “Para que los femicidios ocurran, es necesario que previamente una sociedad haya inferiorizado y desigualado al conjunto de las mujeres” (Fernández: 2009, p.191).
Estas mujeres dieron el puntapié inicial para a través de la conformación del observatorio de femicidios y de otras tantas acciones, comenzar a revertir la situación desde el punto de vista legal, estatal y social, contando  con los informes de femicidios como herramienta de lucha fundamental, produciendo un saber que se convierte en denuncia, donde la voz y el pedido de justicia de cada mujer muerta se escucha a través de las cifras alarmantes y los detalles importantes pero no por eso menos dolorosos  que los informes muestran año a año.Las múltiples  fuerzas instituidas en juegos, desde el estado y sus instituciones, la sociedad civil, las fuerzas, policiales, la institución del machismo, el sistema capitalista, las relaciones desiguales de género , etc., han sido cuestionadas, denunciadas y trastocadas en su dominio, por el trabajo de estas mujeres que comenzaron compartiendo teorías y hoy están construyendo conocimientos, erradicando instituidos, ampliando derechos y desnaturalizando de las relaciones sociales, el dominio y la opresión  del hombre sobre las mujeres, es decir, haciendo historia.

Implicación grupal

En un primer momento la elección de la institución surgió como un interrogante, hicimos una puesta en común de los temas que individualmente a cada uno le interesaban para así, conociendo los intereses de todos, poder llegar a un interés común. De este momento surgió,  tal como se explicita en los inicios de este trabajo, la temática de identidad de género  ya que no teníamos conocimientos sobre ella. Tras varios intentos fallidos de contactos con instituciones de este ámbito, nos vimos obligados reformular nuestra elección. Comenzamos a pensar en instituciones abocadas a la violencia de género llegando en este recorrido a la Casa del Encuentro.
Luego de este primer momento, trabajamos sobre nuestros supuestos, en principio sin entender muy bien el fin, pero luego pudimos captar el valor de poder pensar sobre  ellos. Exponer nuestros saberes respectos de estos temas, identificarlos en nuestros primeros encuentros en los espacios de  prácticos nos ayudó inicialmente para conocernos como grupo, por un lado a reflexionar e identificar las miradas propias como la de todos los compañeros sobre el tema y luego, al avanzar un paso más en el trabajo, poder trabajar sobre las preguntas a realizar en las entrevistas, mediante el dispositivo de lluvia de idea. El ejercicio previo de trabajar sobre nuestros supuestos nos permitió hacer mejores preguntas, al advertir sobre ellos mientras las elaborábamos, esto terminó enriqueciendo el espacio de las entrevistas  y nos ayudó también a que no se convirtieran en piedras en nuestro camino,  obstaculizando nuestro posicionamiento para el análisis del trabajo
En nuestro camino, tuvimos un cambio en el  grupo que nos apenó mucho, luego del primer parcial una de nuestras compañeras decidió abandonar la materia, en parte por temas personales y en parte porque, según nos compartió no terminaba de entender la materia y el propósito del trabajo y le costó hacer un abordaje de los textos, muy distintos a los que en general estamos acostumbrados a leer en la facultad. A pesar de que intentamos convencerla para que no abandonara, su decisión ya estaba tomada. Esta pérdida afectó el ánimo del grupo porque en algún punto nosotros también nos sentimos un poco confusos con todo ello, la propuesta del primer parcial, el pedido inicial de trabajar nuestros supuestos antes de comenzar el trabajo de campo, el abordaje de algunos temas en los teóricos, el pensar inicialmente ejes de análisis y no en conceptos y articulaciones con los autores trabajados, etc.
En momentos de las entrevistas, a nivel grupal, lo primero que nos movilizó fue la escucha y desgravación de la primera. Al momento de pensarla al interior del grupo detectamos una sensibilización compartida que despertó diferentes emociones, asombro, dolor, bronca, indignación, perplejidad, identificación con la institución y sus instituidos, con los valores que sostienen y proclaman.
Cada uno de nosotros tenía sus propios saberes en torno a la temática, el trabajo nos llevó a profundizarlo, repensarlo y a sentirnos parte de su lucha. Quedamos muy afectados por esta lucha, este tema fue de gran seducción, nos vimos capturados y fascinados por su trabajo, esto repercutió luego en el momento de llevar adelante el análisis y posterior desarrollo teórico con los autores, puesto que al haber idealizado su lucha y sentirla en parte nuestra, esto nos dificultó tener una disociación instrumental que nos permitiera analizar la institución tomando distancia de la imagen idealizada, lo que nos obligó a repensarnos a nosotros mismos tanto individual, como grupalmente. En posteriores reuniones de grupos pudimos desarticular esta idealización y comprenderla a la luz de los acontecimientos sociales y culturales actuales que  están sucediendo en este momento en nuestro país, entre otros la marcha del día tres de junio bajo la consigna “Ni una menos”, hecho que también fue trabajado en clase de prácticos, donde se abrió el espacio para que toda la cursada pueda compartir su opinión y experiencia en caso de haber participado. Para entonces nosotros ya habíamos cerrado el ciclo de entrevistas y conocíamos mucho más acerca del trabajo de la institución y pudimos a partir de ello, pesquisar en nuestros compañeros algunos de nuestros supuestos iniciales y también ciertas confusiones en relación a los términos de “género”, “femicidio”, “violencia de género”, entre otros.  Además notamos que #Ni Una Menos despertó distintas posiciones dentro de la comisión ya que en algunos puntos no había consenso, lo que provocó una especie de debate en donde se diferenciaban las opiniones de los alumnos.
Luego, mientras se fueron discutiendo los recortes a trabajar y decidiendo conceptos y autores, se produjo un debate dentro del grupo de trabajo, el cual tuvo como efecto poner de manifiesto que cada uno de nosotros está atravesado por diferentes instituciones lo cual dificultaba el poder llegar a un consenso en donde todos nos sintiéramos representados. De igual modo pudimos llegar a un acuerdo y lograr el objetivo en común integrando cada una de nuestras miradas al interior de cada uno de los ejes analizados, lo que enriqueció el trabajo de igual forma que las relaciones entre el grupo.
Hoy ya con el recorrido hecho creemos que el trabajo en grupo fue sumamente enriquecedor, ya que fue una verdadera puesta en cuestión de aquellas ideas y concepciones que cada uno de nosotros traíamos, que se fueron sumando a otras   que fuimos co-construyendo a lo largo de las entrevistas, la conferencia de Fabiana Tuñez y las discusiones que se fueron dando al interior del grupo al momento de análisis, así como de otras que nos quedaron como inicios de planteos de nuevos interrogantes, algunos de ellos tomados para el ejercicio de devolución. En definitiva se conformaron como la puerta hacia nuevos conocimientos. Creemos que el hecho de que uno pueda acercarse a una institución, tanto si conoce o no algo en relación a la temática que allí se despliega, siempre brinda la posibilidad de encontrar algo nuevo, porque es eso lo que nos ha dejado como enseñanza este trabajo de campo de la materia; el hecho de que cuando se va a intervenir en una institución nada se sabe sobre la singularidad de la misma hasta que no se la interroga, hasta que no se escuchan los distintos discursos de sus respectivos integrantes. Y creemos que es justamente esto lo que nos ha resultado más enriquecedor, darnos cuenta que no importa lo que se sepa o no sepa sobre la institución, lo importante es encontrarse con lo que allí pasa, lo que allí se genera, lo que desde ella se despliega y es esta posición de no saber sobre, permitirnos sentir ansiedad ante esto desconocido, dar lugar al asombro, despejar supuestos y generar el espacio y la actitud para el conocimiento de algo nuevo que esa institución puede brindarnos.

Implicaciones personales

Estudiante 1

Nunca antes en una materia me habían hecho la propuesta de analizar mi implicación desde el comienzo mismo, plantearme que pensaba, desde que lugares. Me resultó difícil en un inicio, seguí muy atenta las clases de teóricos, sobre todo las de la profesora Schejter, comencé a comprender sus dichos, a hacer el ejercicio de pensar ¿desde donde hablo?, ¿cuáles son las instituciones que me atraviesan?, y comprendí que aunque no estén explicitadas, siempre están allí. Cuando comenzamos a trabajar con la Casa del Encuentro, me tocó llevar adelante la primera entrevista y quede atrapada, fascinada y movilizada emocionalmente por el trabajo que allí se realizaba y por las situaciones que sus integrantes pasaban día a día al contabilizar los femicidios. Recuerdo que me costaba hacerle preguntas a Alejandra Jauría, abogada de la institución. Luego compartiendo las sensaciones que me provocó la entrevista con el grupo y en mi entorno familiar, tomé nota de que yo fui criada por un policía (mi padre es hoy policía retirado) y siempre estuve muy familiarizada con las instituciones policiales, judiciales, con la gendarmería (mi abuelo y varios tíos son gendarmes). Yo defino a mi viejo como “un policía como los de antes”, comprometido con su trabajo, al lado de la gente. De pequeña viví en varias ciudades de Entre Ríos en el entorno de destacamentos policiales donde mi papá era el comisario y mamé desde muy chica su trabajo como un hacer para la gente, él era el psicólogo, el asistente social, una amigo, un referente en le pueblo, además del comisario.  Al día de hoy visitando esos lugares, lo recuerdan a él y al paso de mi familia por allí con mucho cariño. Al crecer me di cuenta que no era tan bueno en algunos ámbitos ser la hija del comisario, comprendí que en el imaginario social compartido,  la policía no tenía tan buena imagen como la que yo había construido en mi la infancia, pude comprender los porqués, y en muchas situaciones comparto las ideas de que esta fuerza puede ser corrupta y con jugarse con otras como las ya mencionadas,  y en muchas ocasiones se convierte en cómplice de actos tan aberrantes como lo son la violencia de género y la trata de personas, temas por los que trabajan las integrantes de la CE. Todo esto me hizo pensar como me posiciono  hoy como estudiante para analizar las entrevistas y llevar adelante el trabajo, cómo hacerlo el día de mañana como profesional con perspectiva de género que quiero ser. El poder repensar mi historia personal, tomarla en cuenta, entender que es indisociable de lo que hoy soy y estar atenta para que ella no interfiera negativamente en mi rol, me resulta muy importante, hacer este ejercicio, interpelarme a mí misma, estar atenta a los supuestos que traigo, estar advertida de los imaginarios sociales que sustentan discursos de poder, entender la intervención como una herramienta para mi trabajo profesional, que se puede aplicar a todos los ámbitos, estar advertida de los modos instituidos, poder decontruírlos, interpelarlos, no darlos por sentado sino entenderlos como productos socio históricos naturalizarlos al interior de las instituciones por las que tránsito, todos estos conceptos y muchos más,  suman a mi formación como psicóloga y estoy segura serán de gran ayuda en mis comienzos y enriquecerán mi práctica.

Estudiante 2

Tras descartar la opción de trabajar con la temática de identidad de género, la cual particularmente me despertaba mucho interés y sentía que reunía de manera impecable los conceptos de “género y subjetividad” como temáticas de la comisión, es que terminamos haciendo el abordaje en La Casa del Encuentro. Mi experiencia con la intervención institucional fue sumamente enriquecedora, ya que desde mi desconocimiento frente a varias cuestiones logre aprender y conocer conceptos e ideas que hasta el momento ignoraba.  De hecho, en los inicios del trabajo, a la hora de hablar de nuestros supuestos acerca del género, me di cuenta de la multiplicidad de nociones y conceptos que surgieron para acudir a la misma palabra.
En cuanto a la entrevistas, considero se produjeron en excelentes términos y cumplieron o mejor dicho, superaron mis expectativas, pero a la vez me generaron distintas emociones, especialmente, el temor de pertenecer a un género que se encuentra actualmente bajo las consecuencias de un régimen machista y en los peores casos pone en riesgo la integridad psíquica y física de la mujer. Al mismo tiempo, sentí una gran admiración y valoración por la institución en sí, tanto por el trabajo que realizan, como por la lucha y el sacrificio de las mujeres que la integran. A mi entender, no hubo mejor forma de comprender y a la vez, poner en práctica a través del trabajo de campo, el concepto tan trabajado durante la cursada de que las instituciones son espacios sociales donde se construyen subjetividades ya que dicho atravesamiento despertó en mí, posiciones e intereses nuevos que hacen a la propia subjetividad. La trasmisión de sus ideales y de sus convicciones es de tal intensidad que con el hecho de haber sido parte de dos encuentros, me involucré, en cierta forma, en su lucha, con la ilusión de poder colaborar en la realización de sus objetivos. Por otro lado, me despertó sentimientos de desesperanza, el notar que aquellos instituidos que se instalan en las mentes con tanta fuerza sean tan difíciles de modificar, o peor aún, que haya todavía algunas corrientes o algunas personas que sigan defendiendo ese pensamiento y negando la realidad que nos toca vivir. Pero hubo algo más que hizo de mi paso por la institución y por la materia más fructífera todavía, un evento ligado pero sorpresivo e inesperado: la marcha del 3 de junio, ya que al momento de la elección de la temática desconocíamos que iba a ser un año tan significativo y emblemático para el trabajo que nos compete.  Más allá de que fue un día histórico por la repercusión que tuvo y todo lo que representó socialmente, lo sentí como una verdadera prueba de la forma en que esos imaginarios tan fuertemente cristalizados en la sociedad pueden empezar a tambalear. Detrás de cada cartel presente en la plaza, se mostraba el mensaje que amar o haber amado, o relacionarse de cualquier manera, no da derechos a poseer, violentar, cosificar, humillar y acosar al género opuesto, que los hombres deben abandonar el machismo tradicional con el que muchos conviven. Entonces “Ni una menos” me hizo pensar que los objetivos de la institución trabajada, no son utópicos, pero requieren de un cambio cultural relevante y seguramente tardío. Considero que la marcha marcó un antes y un después, un piso, el principio de este gran cambio social que se pretende dar, pero no de una lucha, porque la lucha de éstas mujeres que integran La Casa del Encuentro ya tiene varios años, y aunque los objetivos están todavía, algunos, muy lejos de cumplirse, lo importante es transitar ese camino.

Estudiante 3

Es la segunda vez que hacía la materia, la primera la había hecho en la otra cátedra y me pareció caótica la cursada, no llegaba a comprender los conceptos, no entendía el sentido del trabajo y decidí dejarla.  En el momento de inscribirme  no tenía muchas ganas de hacer la materia, entonces decidí elegir una comisión en donde el tema a trabajar fuera de mi interés.
El tema “violencia de género” siempre me interesó, pero nunca lo había pensado como lo estoy haciendo ahora. Los conceptos que propone la cátedra invitan a pensar el tema  de una manera compleja.  Uno parte de sus  propias ideas , de sus propias construcciones- representación- imaginarios  como por ejemplo  “el hombre en pos de querer dominar a la mujer ejerce su violencia sobre ella”,  “ es un tema de educación”  pero  luego visibilizas que el tema es más profundo, que eso es la punta del iceberg. Por ello, luego del recorrido, pienso que antes tenía una mirada y explicación micro “el hombre aprendió esa manera de relacionarse violentamente y lo replica”. Gracias al trabajo de campo,  hoy,  comprendo que el tema convoca la sociedad, que el sistema patriarcal nos atraviesa en las prácticas cotidianas, que se ha hecho habitus. Como dice Kaes  todos somos un pedacito de cada una de las instituciones que nos conforman; por lo tanto si no nos repensamos terminamos replicando aquello a lo que criticamos ya que no hay que olvidar que los imaginarios sociales son constitutivos de nuestra psique. Entonces pienso que el trabajo ayudo a complejizar mi lectura, a pensar en contexto, a tener en cuenta las relaciones de poder, a pensar en lo instituido, etc.
Con respecto a la materia en general me llevo una experiencia  sumamente constructiva, encontré  en la bibliografía muchos puntos de interés. Me llevo muchos conceptos para mi caja de herramientas (método clínico, analizador, campo, encerrona trágica, imaginario, institución, implicación, etc) y autores (Bourdie, Schejter, Kaes, Louro, , etc). Pero lo más interesante es que pienso que la psicología institucional ofrece una manera de pensar el rol profesional  independientemente de donde lo ejerzas. El trabajar los impensados es una gran herramienta sin la cual no hubiese sido posible aprender  algo diferente sobre la violencia de género. Opino que más allá del trabajo de campo, me llevo una  herramienta fundamental para poder intervenir.
Si bien el comienzo de la cursada estaba atravesado por la idea “ es una materia obligatoria, hay que hacerla” hoy pienso que la cursada termina convirtiendo a la materia  en esas que hacen mella y te ofrecen respuestas a las preguntas que tenías sobre el rol del psicólogo.

Estudiante 4

En cuanto a lo personal, transitar la temática de violencia de género y femicidio y haber conocido La Casa del Encuentro, fue profundamente movilizador. En principio, estando ya en vistas de una de las integrantes del grupo el tema y la institución finalmente abordados, cuando teníamos como primera alternativa la identidad de género, había apostado fuertemente por esta última, pero azarosamente las instituciones elegidas no nos dieron respuesta o directamente nos cerraron sus puertas, sin mediar explicación, después del primer contacto. Situación que me incomodó bastante. De ahí en más dimos a la temática “violencia de género”.
Debo confesar que me sentí muy incómodo ante esta perspectiva por varias razones personales que no incumbe manifestarlas. Tampoco voy a historiar mi tránsito por el abordaje de la temática, ni de la materia, me limitaré a exponer brevemente, sin entrar en detalles, algo de mi propia implicancia.
Muchos de los instituidos que me atraviesan se pusieron en juego haciéndome sentir en varias ocasiones muy afuera de la materia y del grupo, no por causa de la materia ni del grupo en sí que aprecio y respeto, sino porque aquello que me implicaba desde mis propias vivencias e instituidos, me complicaba también. Necesité en varias oportunidades poner algo de distancia y pensar, reconsiderar si continuar con la cursada de la materia o no, pero tenía ya la decisión tomada de no dar pasos atrás desde que retomé la carrera. Lamenté profundamente que una de las integrantes del grupo desistiera de continuar la cursada, quizás porque en ella intuí, o tal vez proyecté, mis propias incertidumbres, dudas y motivaciones y, además, en parte sentí que no pudimos, aunque lo intentamos e insistimos, tenderle una mano para que continuara; pero cada uno tiene sus tiempos y pensé después que posiblemente la insistencia pudiera incluso violentarla, porque no toda violencia proviene de un golpe o de un grito, valorar las necesidades del otro desde nuestras propias necesidades puede ser o convertirse en un acto violento si tratamos de resolver desde éstas su situación.
Instituidos tales como familia, hijo, madre, padre, niñez, sociedad, ser hombre, ser mujer, violencia, todos atravesados por esta última, puestos sobre relieve, poniéndome en situación de pensar y repensar en mi propia posición en el escenario que se me presentaba. No me resultó nada fácil pero tampoco imposible.
La institución entrevistada operó positivamente en mí, al punto de tener que esforzarme en lograr poner algo de distancia de la misma y de la buena impresión que me causó para poder así pensar algunos puntos concernientes al desarrollo y la elaboración del trabajo. Debo reconocer y manifestar también que sigo influenciado por las primeras y posteriores impresiones con respecto a La Casa del Encuentro y adhiero a sus proclamas y a su causa.
Desde lo observado en las entrevistas, la experiencia presencial en la institución, la temática en particular que comenzamos trabajando desde nuestros supuestos: “Violencia de género”, y la que resultó luego una vez tomado contacto con sus instituidos: “Femicidio”, me llevaron a relacionar mis conceptos ya establecidos y reflexionar sobre los mismos también. Una de mis conclusiones después de transitar este breve tramo es que no se trata solamente de la violencia de género, lo llevo más allá, se trata de toda la violencia que nos atraviesa como sociedad y como seres humanos individualmente, siempre ejercida sobre aquellos más débiles e indefensos, mujeres, niños, ancianos, hombres, incluso animales. La Casa del Encuentro, concentrada en su temática, es una institución que abre sus puertas con calidez y recogimiento e intenta concientizar de que el respeto y la consideración del otro/a son necesarios y posibles. Nada justifica la violencia, como nos dijo Lauría “no por ser mujeres”, pero tampoco por ser lo que se sea desde las categorizaciones de quienes están en posición de privilegio. En lo personal, creo que el cambio que propone en la temática de género, es posible y necesario para cada instancia y situación llevándolo y transponiéndolo a todos aquellos ámbitos donde la violencia es el lenguaje recurrente, ya sea que se trate de mujeres o no, porque desde mis atravesamientos y experiencia, entiendo que la violencia que se ejerce contra la mujer por el hecho de ser mujer y la cosifica, anida en instituidos que se sostienen en la dicotomía fuerte/débil valorando como fortaleza la fuerza física expresada en el golpe, el dominio, el sometimiento y la posesión.
Para cerrar, desde lo más íntimo y personal tengo la convicción de que todos y cada uno tenemos de débil lo que nos falta de fuerte. Sin que aquello que se aprecie como manifestación de fortaleza lo sea, y a veces, quizás a menudo, se trate de debilidad en lugar de fortaleza, pero escondida en violencias capaces de causar mucho daño. Entiendo también que una de las mayores fortalezas que puede tener cualquier sujeto es la capacidad y predisposición para el diálogo, la capacidad y predisposición para pensar y tratar de entender que el otro es simplemente eso, un otro, al igual que cada uno de nosotros lo somos para el resto, con aciertos y errores, con historias personales que nos moldean. Creo yo que como sociedad nos falta educación para superar la violencia en general, La Casa del Encuentro hace un recorte en donde esa violencia tiene quizás una de sus máximas expresiones, la de género que lleva al femicidio, pero existen muchas otras más que no podemos dejar de considerar porque entiendo que cualquier violencia conduce siempre a otra. No puedo evitar pensar en la violencia en general en el entramado de mis instituidos. Todo esto es reafirmado en mi tránsito por esta materia y la institución que fue finalmente elegida, con ayuda en parte de los fallidos intentos de abordar otra temática y otras instituciones.


Ensayo de espacio de intercambio

En nuestro ensayo de devolución nos gustaría poder generar un espacio de reflexión conjunta en un ambiente cálido y agradable, igual al percibido por nosotros cuando visitamos la CE al realizar las entrevistas. Para este fin pensamos en alquilar un consultorio y/o una pequeña sala de eventos de pequeña escala. Este contexto nos parece un espacio propicio, por un lado para que sea un lugar diferente a su ámbito de trabajo dado que, como pudimos observar cuando las visitamos, muchas veces son demandadas con urgencia y deben interrumpir sus quehaceres, y por el otro, porque nos parece importante que sea un lugar neutral, cómodo (imaginamos una pequeña sala con sillones y una mesa ratona central, en la que poder vernos las caras y escucharnos cómodamente) a los fines de generar un ambiente agradable y de apertura. Las dos personas que nos gustaría invitar serían Ada Rico, presidenta de la institución, y Fabiana Tuñez, directora ejecutiva. Ada fue quien nos brindó su tiempo en la segunda entrevista y nos invitó luego, al dificultarse la coordinación de una tercera entrevista antes de nuestra fecha de pre entrega, a la conferencia dictada en la facultad, de allí que su preocupación por ayudarnos con esta invitación a contar con más información para nuestros trabajo nos hace pensar que existe cierto grado de apertura que favorece una fructífera devolución en caso de invitarla. De igual forma a lo largo de toda  la conferencia de Fabiana Tuñez sentimos, en cada una de sus palabra su gran convicción por este trabajo y su entrega por esta causa, por lo que no queríamos dejarla afuera de este espacio.

Intercambio:

A Ada Rico y Fabiana Tuñez: Las convocamos a este espacio en parte con el fin de agradecerles a ustedes y la institución que nos hayan recibido del modo en que lo hicieron. Fue mucho lo que aprendimos y mucho también lo que nos inspiró la labor de La Casa del Encuentro y las voluntarias que la sostienen con esfuerzo y dedicación. Sentimos una profunda satisfacción y orgullo de haber podido entrevistarlas y conocerlas, y es algo por lo que necesitábamos expresarles nuestro agradecimiento. En esto, aunque no está presente, queremos incluir a nuestra compañera Gabriela Romero que nos acompañó en parte de este recorrido y aprendizaje y que por razones personales no pudo continuar la cursada, sabemos, porque lo expresó, que compartía la mirada que tenemos en común como grupo y coincidía en ello.
Nos gustaría aprovechar este espacio también, para comentarles nuestra visión de aquellas cosas que nos aportaron y el modo en que nos hicieron pensar con otras perspectivas la temática que abordan, femicidio y violencia de género. Del mismo comentarle aquellas cosas en las que nos hicieron pensar y abrir nuevos interrogantes y que no hemos tenido oportunidad de plantearlas durante las entrevistas.
Uno de los textos sobre los que estuvimos trabajando en grupo, fue “Ellas…”, el que publicó La Casa del Encuentro, en el que están volcados los informes de femicidios. Nos llamó mucho la atención la creación de este Observatorio y el esfuerzo que realizan para llevar el seguimiento de esos datos. Del mismo modo, o quizás más aún, nos llamó la atención la existencia del Observatorio, dado que en nuestro imaginario teníamos la idea de que el Estado era quien debía llevar adelante esa tarea debido a la importancia. Fue por eso que nos sorprendimos mucho al enterarnos que este trabajo era producto del esfuerzo de ustedes como institución. Esto da cuenta también de nuestra ignorancia al respecto y es algo que más adelante mencionaremos.
Considerando el valor de la información que produce el Observatorio, nos preguntamos varias cosas al respecto. Una de ellas que cómo es  posible que desde el estado no se genere a partir de la recopilación de diferentes instituciones que están atravesadas por esta problemática, hospitales públicos, comisarías, ministerios, etc. que son instituciones que podrían articularse y sistematizar información fidedigna y lo más cercana a la realidad, si esto se debe a falta de voluntad política o si influyen otros factores. Otra de las cuestiones es, en el caso de que el Estado asumiera un rol de participación activa en ello ¿cuál sería la postura o mirada que tendría al respecto La Casa del Encuentro?
No tenemos dudas, desde nuestras miradas, es fundamental en la historia de La CE y estamos interesados en saber desde ustedes qué implica y significa contar con el Observatorio y la producción que de él resulta.
Otras de las cosas que observamos, siempre desde nuestra mirada que no deja de ser foránea, que hay una división del trabajo y organización fuertemente estructurada en cuanto a la elección de los temas con qué trabajan, hasta donde los  trabajan, de qué manera lo hacen, etc. Por eso quisiéramos saber cómo fue el proceso para llegar a tener la estructura de trabajo que tienen en la actualidad.
Otro tema que nos ocupó desde las entrevistas fue el del voluntariado cuando se mencionó la temática en torno al dinero, específicamente la relación entre el voluntariado y al trabajo remunerado. En sus dichos leemos un fuerte énfasis sobre que el trabajo que se realiza en la CE es realizado dentro del marco del voluntariado y que hacen una diferenciación entre “voluntariado” y “trabajo remunerado”. Estamos interesados en saber si esto se debe a algo en particular, cómo es que lo piensan ustedes, o si tal vez, tiene que ver con una posición tomada que el trabajo sea voluntario.
Como futuros psicólogos pensamos que es muy poco lo que vemos a lo largo de la carrera con relación a temas de género y su repercusión en la subjetividad de los sujetos.  Luego de abordar el tema a partir de este trabajo y el interés personal que generó en todos, reflexionamos como estudiantes próximos a recibirnos acerca de esto. Creemos que todas las materias de la carrera pueden y deberían tener un recorte que nos permita comprender la influencia de las diferencias de género en la salud, en la formación de subjetividades,  en una terapia familiar, en una intervención institucional, en el ámbito laboral, etc. En este camino de interrogantes, surgieron algunas preguntas ¿Si acaso a nuestra facultad no le resulta relevante esta perspectiva para la formación del psicólogo? De ser así ¿por qué? y de no serlo, también ¿por qué? Volvió a surgir aquí la pregunta acerca de las voluntades políticas que no están presentes, en este caso de una institución tan importante como lo es la UBA.
No queremos cerrar este encuentro si preguntarles por la marcha del 03/06 bajo la consigna “Ni una menos”, nos gustaría saber cómo ha repercutido en sus quehaceres diarios y si ha generado el efecto que esperaban.


Bibliografía

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